El documento describe la experiencia del autor en la Institución Educativa Colegio Loyola para la Ciencia y la Innovación. Inicialmente, el autor escuchó sobre el colegio a finales de 2014 y se esforzó por ser admitido a pesar de la distancia y las dudas de su madre. En diciembre de 2014, el autor fue admitido y fue el primero en la lista, lo que lo llenó de felicidad. El autor disfrutó su primer día de clases en enero de 2015, donde hizo nuevos amigos y aprendió cosas nuevas cada día