La tecnología 3D puede ayudar a los consumidores a encontrar su talla perfecta al escanear su cuerpo y crear un modelo digital 3D, permitiendo probarse virtualmente la ropa. Esto ayudaría a las marcas a crear prendas con ajustes más precisos basados en medidas reales de clientes, reduciendo las tasas de devolución en línea. Algunas empresas como 3D-a-Porter y Port ya ofrecen aplicaciones de escaneo 3D, mientras que marcas de moda han comenzado a incorporar esta tecnología.