1. ¿Podemos alcanzar algún conocimiento
absolutamente indubitable y evidente?
El individuo en soledad, en la casi
desesperada tarea de encontrar un
suelo firme en el que hacer descansar
sus convicciones. Esta es la pretensión
de la filosofía de René Descartes.
El resultado de este afán se concentra
en la frase “pienso, luego existo“. Con
ella Descartes expresa el descubrimiento
de una verdad incuestionable, pero
también un ámbito nuevo de lo real:
la subjetividad individual autoconsciente.
Descartes inaugura una nueva época: la
Modernidad, con sus pretensiones revolucionarias
de autonomía de la Razón.