El resumen describe cómo los israelitas debían ofrecer ofrendas a Dios para mostrar gratitud por sus bendiciones y cumplir sus promesas. También debían recordar los mandamientos de Dios usando franjas de color en su ropa. Aunque cometían pecados involuntarios, también debían asumir responsabilidad por ellos. Los pecados deliberados conllevaban un castigo severo. El pueblo de Dios debe mantener principios firmes pero ser inclusivo hacia los nuevos miembros.