1. Barroco
Es hielo abrasador, es fuego helado,
es herida que duele y no se siente,
es un soñado bien, un mal presente,
es un breve descanso muy cansado.
Es un descuido que nos da cuidado,
un cobarde con nombre de valiente,
un andar solitario entre la gente,
un amar solamente ser amado.
Es una libertad encarcelada,
que dura hasta el postrero paroxismo;
enfermedad que crece si es curada.
Éste es el niño Amor, éste es su abismo.
¿Mirad cuál amistad tendrá con nada
el que en todo es contrario de sí mismo!
FRANCISCO DE QUEVEDO
Romanticismo
Amor eterno
Podrá nublarse el sol eternamente;
Podrá secarse en un instante el mar;
Podrá romperse el eje de la tierra
Como un débil cristal.
¡Todo sucederá! Podrá la muerte
Cubrirme con su fúnebre crespón;
Pero jamás en mí podrá apagarse
La llama de tu amor
Gustavo Adolfo Bécquer
Modernismo
LO FATAL
DICHOSO el árbol, que es apenas sensitivo,
y más la piedra dura porque ésa ya no siente,
pues no hay dolor más grande que el dolor de ser vivo
ni mayor pesadumbre que la vida consciente.
Ser, y no saber nada, y ser sin rumbo cierto,
y el temor de haber sido y un futuro terror...
¡Y el espanto seguro de estar mañana muerto,
y sufrir por la vida y por la sombra y por
2. lo que no conocemos y apenas sospechamos,
y la carne que tienta con sus frescos racimos,
y la tumba que aguarda con sus fúnebres ramos
y no saber adónde vamos,
ni de dónde venimos!...
Futurismo
La tierra ya no tendrá más miembros intactos
Y mañana el alma será pisoteada
Por pies extranjeros
Y todo ello para que un tipo cualquiera
Pueda extender sus manos
Sobre alguna Mesopotamia…
Tú, que combates por ellos y mueres,
¿Cuándo te alzarás en pie
Con toda tu estatura
Y lanzarás a su cara
Tu ira profunda
En un grito:-¿Por qué se libra esta guerra?
Dadaísmo
Nosotros seremos incontables.
Pero hoy soy de nombre miedo,
en este mundo de seducción mi piel luna
y tu deseo serán tiempo después gris cuerpo.
¡Voces amantes!
-Vampiro en niebla-
La razón enloquecida dice
¡existimos!
Sopor, sombra magnífica
este instante de respiración...
Sol, somos seres de lluvia.
Sueños secretos. Nunca.
Escribir clásicos,
tan sólo volar... y esta noche
hacer nuestra realidad sin volumen.
Incorrupta.