Taylor, Ford y Marx analizaron la división del trabajo de formas diferentes. Taylor organizó el trabajo de manera científica y estandarizada para maximizar la producción. Ford impuso ritmos de trabajo rigurosos y dividió tareas para permitir la producción en serie. Marx argumentó que la división del trabajo reduce la calificación de los trabajadores y fomenta habilidades manuales en lugar de capacidades intelectuales.