Este poema de Antonio Machado describe la belleza efímera de las pompas de jabón y la naturaleza transitoria del camino de la vida. En la primera sección, el poeta dice que disfruta viendo las pompas de jabón flotar y estallar bajo el cielo azul. En la segunda sección, el poeta compara la vida del caminante con las huellas en el camino, diciendo que el camino solo existe a medida que se avanza y nunca se puede volver sobre los pasos.