El documento habla sobre el aceite de tea tree, originario de Australia. Se usó por los aborígenes y durante la Segunda Guerra Mundial como medicamento. En la década de 1970 resurgió su uso junto con otros aceites para tratar diversas afecciones de la piel y mucosas de manera antiséptica y antiinflamatoria. Se recomienda usarlo puro solo en pequeñas cantidades y diluido para bebés. Tiene múltiples formas de aplicación para el cuidado de la piel, boca, vías respiratorias