Aplicacion de criterios de sustentabilidad en residencia universitaria.
Malla habitable Sevilla
1. Antonio Álvarez Gasco
Pablo Fernández Mejías
Javier García Lomas de Bernardi
FUNDAMENTOS DEL HABITAR
La malla habitable
2. El arquitecto como proyectista se encuentra constantemente enfrentado a condicionantes y parámetros invariables
que limitan y acotan las posibilidades de un proyecto, y es la creatividad la herramienta que nos permite sortear estas
trabas y generar espacios que satisfagan las necesidades humanas y permitan ser habitados.
Esta creatividad se puede ver favorecida y potenciada por la infinidad de herramientas digitales que han ido
apareciendo a lo largo de los años, herramientas que facilitan el trabajo, agilizan los procesos de diseño y nos abren
un mundo de posibilidades creativas imposibles en otros tiempos.
Un proceso proyectual o de diseño puede contener en si mismo parámetros racionales y emocionales, factores rígidos
e invariables y otros orgánicos y sensibles, son componentes del diseño muy diferentes que tienen que convivir y
confluir en el resultado final, consiguiendo el resultado mas favorable para aquel uso o usos al que vaya a estar
destinado. Pensando en esto nos planteamos buscar la manera de conseguir racionalizar factores emocionales y
sensibilizar lo estricto a través de dos herramientas: la creatividad del arquitecto y el programa de diseño
paramétrico Grashopper.
3.
4. Grasshopper es un plug in de Rhinoceros, orientado al diseño paramétrico que funciona como editor de
algoritmos generativos. Las ventajas de este programa es que a diferencia de muchos, con este no se
necesita experiencia en programación o scripting, lo cual permite crear diseños paramétricos a partir de
componentes generadores, obteniendo una considerable optimización de tiempo.
A partir del diseño paramétrico se puede generar diseños inteligentes y/o responsivos estableciendo un
criterio de diseño (exploración de formas), permitiendo adaptarse a cualquier situación, contexto,
tectónico, etc. Es decir se puede adaptar el diseño a cualquier parámetro / variable que sea integrado al
proceso de diseño, dando un resultado inteligente y responsivo que logra satisfacer un problema
especifico.
5. Aprovechando las posibilidades que nos ofrece grashopper, planteamos la creación de una malla que este
programa nos genera a partir de la definición de una serie de factores o parámetros que nosotros estipulamos
según las características del objeto o espacio sobre el que queramos actuar. Adaptamos los algoritmos del
programa para que varíen la forma de la malla según la importancia de los factores que nosotros consideremos,
se definen puntos de interés, áreas perceptibles de ser ocupadas, superficies mínimas, trayectos o líneas de
comunicación y Grashopper nos devuelve una red cuyas subdivisiones se adaptan a estas condiciones, esta red
puede ser alterada y modificada ofreciendo muchas posibles divisiones para una misma situación proyectual.
Tenemos la posibilidad de adaptar este sistema a muy diversas escalas y situaciones diferentes, pudiendo definir
tanto espacios físicos como zonas de interés o áreas de movimiento de un elemento, con todo ello definimos
varios tipos de “tallas” que se ajustan a diferentes escalas de actuación y que pueden asimilar distintos factores
condicionantes: desde la definición de las mejores áreas para colocar escenarios o stands en una plaza a través
del estudio de los recorridos (en la talla L) o la colocación del mobiliario de una estancia según puntos de mayor
iluminación (en la talla M) e incluso la estipulación de ámbitos de actividad y concentración de especies vegetales
a nivel de barrio o fragmento de ciudad (en la talla XL).
TALLAS:
S M L XL
6. S
La medida S esta pensada para escalas de muy poca dimensión, zonas
que podemos controlar manualmente y que muchas veces presentan una
dificultad mayor de la que esperamos.
M
L
CASOS
XL Muebles, paredes, paneles concursos, escenarios, etc.
7. S
La medida M es posiblemente el caso más útil y más practico a día de hoy.
Ordenar una habitación, diseñar la colocación del mobiliario de una casa
son las pequeñas hazañas a las que nos enfrentamos casi diariamente, un
riesgo que podemos solventar viendo como lo virtual nos acerca a lo real.
M
L
CASOS
XL Casas, unidad de habitación, refugios, cubiertas, etc.
8. S
La medida L se comienza a aproximar a casos tremendamente
complicados, donde lo que se busca no es una parcelación edifcatoria,
sino un lenguaje de usos, ideas y formas de controlar un entorno.
M
L
CASOS
XL Plazas, parques, manzanas, concurrencia de calles, etc.
9. S
La medida XL está enfocada más halla de la razón, pensada y organizada
como fundamento de una posible estructuración de usos y condiciones
que no corresponden a las vivencias de hoy, ni mucho menos a la
magnitud que podemos abarcar hoy. Es sólo el reflejo de que algo tan
sencillo puede permitirnos abarcar grandes áreas, incluso mayores, si
M
dejamos que la programación virtual trabaje con nosotros.
L
CASOS
XL Barrios, polígonos industriales, zonas grandes en desuso, etc
10. Ahora vamos a presentar un caso práctico de la talla XL,
pensado en el puerto de Sevilla.
Elegimos este caso como punto de unión entre el puerto
de Algeciras y de Tánger, las propias aguas que vienen
del Mediterráneo y que pasan la compuerta de estas dos
ciudades nos llegan hasta el mismo seno de la ciudad de
Sevilla y nos permiten abordar esta decisión con
sentimiento y con ganas.
Como factores a tener en cuenta e indicar en la
parametrización de este espacio, son los usos de la
zona, las subidas de nivel del Guadalquivir, la zona
desocupada del puerto.
Como se mencionó anteriormente en la talla, esta
intervención es una idea, un concepto, un abismo
insospechado de cómo podríamos establecer una
parcelación en el puerto de Sevilla, una parcelación no
física, sino de actividades, de puntos de interés, de
encuentros sociales, de relaciones, etc.
12. Esta propuesta nace de la necesidad de
revitalizar la zona del Puerto de Sevilla, la cual se ha ido
desvinculando progresivamente de la ciudad llegando a
configurar dos realidades totalmente distintas e inconexas.
En nuestra propuesta reconciliamos la estructura urbana
existente con una nueva basada en la concepción de una
malla que se cargue y descargue en función de las
necesidades del Puerto.
Para ello hemos establecido unos puntos de interés a
partir de los cuales se desarrolla la evolución de la
propuesta, combinando densidades, usos y la recuperación
de algunas zonas. Se traza una malla-célula con la que
configuramos un espacio variable, de pensamientos,
encuentros y oportunidades.
Vemos en toda está perplejidad adimensional el modelo de
malla: “tejido entrelazado utilizado para hacer redes,
cuyas fronteras también pueden estar en movimiento”.
Esta nueva forma de entender la ciudad basada en
recorridos y crecimientos por densidades combinado con
la concepción del espacio software (carga-descarga) tiene
como fin la creación de espacios permeables y en
constante desarrollo.