Este documento contiene un poema de Santa Teresa de Ávila que habla sobre mantener la calma y la paciencia ante las dificultades de la vida, ya que Dios permanece constante. Luego presenta unas instrucciones para quedarse en silencio ante Dios, olvidando preocupaciones y deseos personales, y escuchando su palabra sin distracciones. El objetivo es desaparecer uno mismo y dejar que solo Dios esté presente. Finalmente, cita el salmo 37:7 que dice "Quédate en silencio delante del Señor".
Preciosa presentación con ese techo de los méritos humanos que es Santa Teresa de Jesús (ves Cova, hablamos hoy por la mañana y me lo acaban de mandar)
y la música increíble de Taize.
Preciosa presentación con ese techo de los méritos humanos que es Santa Teresa de Jesús (ves Cova, hablamos hoy por la mañana y me lo acaban de mandar)
y la música increíble de Taize.
Oración de descanso. Que nada te turbe. Descansa en DIOS. Teresa de Ávila nos enseña. Combina la oración y la música que puedas permanecer en la quietud de DIOS.
Oración de Teresa de Ávila, acompañada con música para que puedas permanecer orando en la quietud y el amor de Dios. Para todos los que rezan por otros, les regalo esto para que puedan orar desde aquí. Julio Daniel Nardini
Blog Oración de intercesión como servicio y ministerio.
http://oracionintercesion.blogspot.com/
Oración de descanso. Que nada te turbe. Descansa en DIOS. Teresa de Ávila nos enseña. Combina la oración y la música que puedas permanecer en la quietud de DIOS.
Oración de Teresa de Ávila, acompañada con música para que puedas permanecer orando en la quietud y el amor de Dios. Para todos los que rezan por otros, les regalo esto para que puedan orar desde aquí. Julio Daniel Nardini
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2. Nada te turbe
Nada te turbe;
nada te espante;
todo se pasa;
Dios no se muda,
la paciencia
todo lo alcanza.
Quien a Dios tiene,
nada le falta.
Solo Dios basta.
Santa Teresa de Avila (1515-1582)
3. • Música: Nada te turbe. Taizé
• Letra:
• Nada te turbe, nada te espante:
• Quien a Dios tiene nada le falta.
• Nada te turbe, nada te espante:
• Sólo Dios basta. (Se repite)
• 2ª voz
• Todo se pasa, Dios no se muda,
• La paciencia todo lo alcanza.
11. Olvida tus palabras,
olvida tus recuerdos,
tus peticiones, tus proyectos;
mírale,
escúchale sin que tus voces
interiores te distraigan.
12. Quédate en paz ante Él,
abandona en Él
toda turbación, todo cuidado,
toda preocupación,
olvídalo todo.
13. Quédate sin ataduras,
libre de tus deseos,
pobre como la madera muerta en invierno,
vacía de todo cuanto no sea Él.
14. Quédate sola,
sin nadie más en tu corazón
que ninguna criatura
se interponga entre vuestras miradas.
15. Quédate sin quejas,
sin estorbos,
sin “huéspedes” extraños,
sin nada que no sea Él.
16. Quédate entera, sin más recuerdo que Dios,
sin buscar consuelos humanos,
“sepultada” con Él y en Él,
desapareciendo tú
para hacerte don en su corazón.
17. Quédate sin tristezas,
sin resentimientos,
sin orgullo,
sin falsas imágenes de ti misma.
18. Quédate a la escucha de su Palabra,
hazte Palabra y Voluntad suya.