Entrevista del recuerdo por Zhejumigudeportes con la recordada "tia chepa" quien fue la cocinera oficial de los seleccionados peruanos d voleibol en su época de oro y hasta hace algunos años atrás.
Judith Chuquipul Torrejón C.P.D.P. 432 LM AIPS - PER 00101
Zhejumigudeportes - Edición VI - Año I - Octubre 2004
Libro quien se ha llevado mi queso es una pregunta común si se encuentra con cambios en tu vida, estar vivo significa que estamos en constante movimiento.
Entrevista del recuerdo por Zhejumigudeportes con la recordada "tia chepa" quien fue la cocinera oficial de los seleccionados peruanos d voleibol en su época de oro y hasta hace algunos años atrás.
Judith Chuquipul Torrejón C.P.D.P. 432 LM AIPS - PER 00101
Zhejumigudeportes - Edición VI - Año I - Octubre 2004
Libro quien se ha llevado mi queso es una pregunta común si se encuentra con cambios en tu vida, estar vivo significa que estamos en constante movimiento.
Friedrich Nietzsche. Presentación de 2 de Bachillerato.
Quién se ha llevado mi queso
1. ¿Quién se ha llevado mi queso?
Todo inicia en Chicago un domingo en donde ex compañeros del Instituto se
reunían para almorzar después de haber asistido a un acto oficial en el centro la
noche anterior en donde contaban anécdotas de sus vidas la cual había tomado
rumbos distintos en donde hablaban de los cambios y de los miedos afrontados
entonces exclamo Michael cuando se produjo un cambio en nuestra empresa, no
supimos que hacer seguimos actuando como siempre y casi lo perdimos todo pero
me contaron un cuento que lo cambio todo. Sus amigos le pidieron que se lo
contara y el inicio diciendo: que alguna vez en un país muy lejano vivían cuatro
personajes y que todos corrían en un laberinto en busca del queso del cual se
alimentaban y los hacía muy felices, dos de ellos eran unos ratoncitos llamados
oliendo y corriendo (de cariño le decían OLI y CORRI) y las otras dos personitas muy
parecidas a los humanos llamados KIF y KOF y del cual se disponían todos los días
poniéndose su chándal y sus zapatillas deportivas y salían corriendo de su casita
hacia el laberinto en busca de su queso favorito.
El laberinto era un dédalo de pasillos y salas y algunas de ellas contenían deliciosos
quesos pero también había rincones y oscuros callejones sin salidas que no llevaban
a ningún sitio y resultaba muy fácil perderse, al principio las personitas corrían para
disfrutar de los deliciosos quesos, pero después de un tiempo cambiaron y cada vez
más se vestían más despacio iban caminando hacia la central quesera, al fin y al
cabo sabían en donde estaba el queso y como llegar a él. KIF y KOF se sentían muy
seguros pues ellos creían que ese queso siempre iba a estar allí alrededor de ellos y
para sentirse más a gusto decoraron las paredes son frases y pintaron trozos de
quesos que los hacia reír entre estas frases decía “tener queso hace feliz”. Todo
estuvo así por mucho tiempo, pero al cabo de unos meses, la confianza de KIF y KOF
se convirtió en arrogancia, se sentían tan bien que se daban cuenta de lo que
estaba ocurriendo. Por otra parte OLI y CORRI seguían haciendo lo mismo, llegaban
temprano a la Central, husmeaban, escarbaban e inspeccionaban la zona para ver
si había cambios con respecto al día anterior. Luego se sentaban y se ponían a
mordisquear queso. Una mañana habían notado que las reservas habían ido
disminuyen poco a poco, pero a OLI y CORRI no les sorprendió, ya que esto
animalitos aunque solo poseían cerebro de ratones y tenían muy buen instinto
buscaban el queso seco y curado y se habían dado cuenta de la situación no les
sorprendió y estaban preparados para lo inevitable e instintivamente seguida
2. supieron que hacer. La situación en la Central Quesera Q había cambiado por lo
tanto OLI y CORRI decidieron cambiar. Ambos asomaron la cabeza por el laberinto.
Entonces OLI alzó el hocico humeo y asintió con la cabeza tras lo cual, CORRI se
lanzó a corre por el laberinto y OLI lo siguió lo más deprisa que pudo mientras KIF y
KOF seguían pensando y discutiendo que hacer, OLI y CORRI se habían puesto en
marcha y habían recorrido muchos pasillos buscando mas centrales que
encontraban en el camino. No pensaban en otra cosa que en encontrar queso
nuevo. Pronto OLI y CORRI habían encontrado una nueva central quesera N
riquísima en quesos y de mucha variedad. Mientras KIF y KOF se lamentaban de su
mala suerte y aferrados a la idea de que volvería el queso a su lugar.
Entonces KOF le decía a KIF que buscaran un nuevo queso él decía que no, mientras
KOF perdía más tiempo en decidirse, los ratoncitos ya estaban disfrutando del
nuevo queso y las personitas estaban cada vez más débiles debido al hambre y al
estrés KOF empezaba a cansarse de que la situación no mejorase. Comenzaba a
comprender que cuanto más tiempo estuvieron sin queso, peor se encontrarían KOF
sabía que estaba perdiendo agudeza.
Finalmente, un día KOF empezó a reírse de sí mismo al ver que cada día hacia las
mismas cosas una y otra vez a KOF no le gustaba la idea de volver al laberinto
porque no perdería y no tenía la certeza de que fuera a encontrar más queso, pero,
al ver lo estúpido que se estaba volviendo por culpa del miedo, tuvo que reírse de sí
mismo. Entonces busco sus chándales y las zapatillas y KIF le pregunta si volvería al
laberinto y KOF le dijo que él tampoco quería verlo, pero se da cuenta que ya nadie
les devolvería el queso a su lugar. KIF quedo esperando que volviera el queso a su
lugar. Mientras KOF emprendía su nueva aventura en busca de un nuevo queso, en
el camino encontró muchos obstáculos pero los fue superando dejando muchas
frases a medida que iba avanzando hasta encontrar la nueva central quesera N con
muchos quesos y muchas variedades. Allí estaban los ratoncitos OLI y CORRI, el cual
le dieron la bienvenida, de pronto le pareció oír ruido de movimiento en el
laberinto. El ruido era cada vez más fuerte, y, advirtió que se acercaba alguien.
¿Sería KIF? ¿Estaría a punto de doblar la esquina?
KOF rezó una oración y espero como tantas veces había hecho que su amigo
finalmente hubiese sido capaz de ¡moverse con él queso y disfrutarlo!