Las compañías de internet apresuraron a aplicar un parche a su software de encriptación Open SSL después de que se descubrió una grave vulnerabilidad conocida como "Heartbleed" que podría haber permitido a los hackers acceder a información privada alojada en servidores. La falla afectaba a la versión 1.0.1 de Open SSL y sitios como Yahoo tuvieron que corregirla. Se advirtió a los usuarios mantenerse desconectados hasta que se solucionara el problema para proteger su privacidad.