Scratch es una aplicación educativa desarrollada por el MIT para enseñar conceptos básicos de programación a niños de manera divertida y sencilla mediante el uso de objetos gráficos que pueden moverse y interactuar en escenarios. Los proyectos de Scratch se componen de objetos con disfraces que pueden modificarse y un escenario donde dichos objetos interactúan y se mueven.