Los candidatos presidenciales Anaya y López Obrador tuvieron un enfrentamiento físico en el que Anaya recriminó a López Obrador por la inversión durante su mandato en la Ciudad de México y López Obrador insinuó que Anaya es un ladrón. Más tarde, Anaya y López Obrador se acusaron mutuamente de mentirosos y farsantes sobre las cifras de inversión durante el mandato de López Obrador. Algunos medios mostraron después imprecisiones en los datos presentados por ambos candidatos.