Un padre de familia solicita la exoneración de su hija del curso de religión en la escuela, argumentando que pertenece a una familia cristiana que recibe formación religiosa y moral durante 20 años en la iglesia evangélica a la que asisten. El padre pide al director que ordene exonerar a su hija, que cursa primer año de secundaria, del área de formación religiosa por considerar su solicitud justa.