El régimen estalinista en la Unión Soviética se caracterizó por un gobierno centralizado y dictatorial bajo Stalin, con un fuerte culto a la personalidad, represión, y control ideológico. La economía se planificó a través de planes quinquenales para industrializar rápidamente el país, a costa de escasez de bienes de consumo. La colectivización forzosa de la agricultura destruyó a los kulaks y causó hambrunas. Stalin eliminó a disidentes y opositores a través de purgas y