Este documento resume los principales puntos sobre el valor de la vida humana desde una perspectiva cristiana. Explica que para los cristianos, la vida fue creada por Dios y debe ser acogida, conocida, cuidada, promovida y defendida. También señala que la vida humana se ve amenazada por la violencia y debe buscarse una mayor calidad de vida. Finalmente, advierte sobre la manipulación de la vida humana con fines distintos a su promoción y cuidado.