El documento describe un terremoto de magnitud 7.8 que ocurrió el 16 de abril de 2016 en Ecuador. El terremoto causó la muerte de 659 personas, dejó 40 desaparecidos y más de 27,000 heridos. Provocó graves daños en las provincias de Manabí y Esmeraldas, con pérdidas estimadas en 3,000 millones de dólares. El gobierno ecuatoriano declaró estado de excepción y emergencia y lanzó un plan de reconstrucción y reactivación económica.