El documento compara dos lecturas sobre cómo hacer una buena presentación oral. Ambas lecturas discuten la importancia de planificar bien la presentación y conocer muy bien el objetivo y mensaje. Si bien comparten este enfoque, también tienen diferencias en cómo abordan aspectos como el inicio y desarrollo de la presentación. En general, ambos autores concluyen que una buena presentación requiere preparación y mejora continua.