El documento discute cómo el acceso a grandes cantidades de información en línea ha llevado a que los jóvenes puedan encontrar fácilmente conocimiento, pero plantea la preocupación de si saben usar este conocimiento de manera positiva. También describe cómo la hiperconectividad de la era digital dificulta la concentración y la profundización en temas, ya que las personas están constantemente interrumpidas y divididas entre múltiples tareas y plataformas en línea.
1. MAS INFORMACION, MENOS
CONOCIMIENTO !!!
Escrito por: Mario Vargas Llosa
Sonia Teresa Paco Flores
2. Con el pasar del tiempo todo fue cambiando, los
lugares, las personas, las costumbres hasta el
conocimiento que hoy en día existe en el mundo, si
antes nuestros padres devoraban uno tras otro
libro para realizar sus tareas, hoy en dia los joven
con el simple hecho de ingresar a una
computadora y poner un par de frases, encuentra
una infinidad de conocimientos, pero la pregunta
es si saben utilizar este conocimiento para bien.
3. Las revoluciones tecnológicas han generado este tipo
de temores en el pasado. Pues es verdad que las nuevas
herramientas nos hacen perder viejas habilidades y
costumbres, entregadas ahora a las máquinas. Basta
recordar qué cantidad de tareas hemos pasado al
computador y cómo hemos cambiado nuestro estilo de
vida en estos últimos 15 años por culpa de "La Red" (ese
engendro que no para de crecer, cuya columna
vertebral es Internet, y que cada vez se empodera más
gracias a los motores de búsqueda, las bases de datos,
las telecomunicaciones, los dispositivos móviles, las
redes sociales, etc.).
4. El computador hace las matemáticas por nosotros, corrige
nuestra mala ortografía, escribe lo que dictamos, hojea la
biblioteca infinita de Internet, busca y encuentra el
contenido por nosotros, etc. La Blackberry, Twitter, el
iPhone, Facebook, LinkedIn, Google+, iPad, etc, nos
mantienen hiperconectados, hiperinterrumpidos,
pendientes de mil cosas. La hiperconectividad nos impide
concentrarnos en nada en particular, pues estamos aquí
pero estamos en mil lugares a la vez, nos impide
profundizar ningún tema por más de algunos minutos, nos
corta el hilo de la conversación y del pensamiento. Ya no
necesitamos ni hablar en persona con nadie, basta enviar
un mensaje de texto (en realidad, de símbolos semi
lingüísticos), basta chatear o informarse de los demás a
través de Facebook. Es el celo de La Red, el celo de esta
creatura que
5.
crece vertiginosamente en tamaño y complejidad y que no quiere que prestemos atención
a nada más que a ella. La Red absorbe nuestra concentración y nuestras facultades como
un hoyo negro absorbe toda la materia y energía a su alrededor.
La Red actúa como un hoyo negro que absorbe toda nuestra concentración y nuestras
facultades