Rosalía, una niña de 6 años, estaba imaginando ser un hada que puede cumplir los deseos de su mamá. De repente, una anciana le dice que ya es un hada de los deseos y que puede hacer realidad los deseos de su mamá. Rosalía cumple tres deseos de su mamá: comprar sal, poner la mesa y hacer silencio para no molestar a su abuelita. Su mamá queda impresionada por la habilidad de Rosalía para cumplir sus deseos como una verdadera hada.

1. ¡¡¡
en
las
Hadas!!
!
Crees

2. La pequeña, tierna e inocente
Rosalía con tan solo 6 añitos
estaba sentada en la
entrada de su casa.

3. Con su cuento favorito: el
de las hadas,
imaginándose que ella
fuese un hada, podría
cumplir todos los deseos
de su mamá.

4. ¡¡Yo
desearía
ser el hada
de los
deseos!!
Dijo en voz
alta,
cuando de
repente….

5. ¿Había aparecido el hada del
cuento?
No llevaba ninguna diadema
en el cabello ni tampoco
rayos del sol.
Por el
contrario
al
regresar
a ver...
Era una
anciana

6. ¿Estaba soñando?
La anciana con una sonrisa
le dijo:
¡¡Tu eres ya un
hada de los
deseos!!
Solo que no has
probado nunca
tus poderes.
Tu puedes hacer
realidad todos

7. ¡¡Mami, mami!!
¿Tienes algún deseo? Si hijita
anda a comprar sal para la
sopa. Y así lo hizo de
inmediato…

8. al regreso…
¡¡Mami , mami!!
¿Deseas alguna
otra cosa?
Si alguien pusiera
la mesa, yo
estaría muy
contenta.

9. Al momento estuvo la
mesa lista y todo en su
lugar.

10. Y el tercer deseo mami!!!
Has silencio que a la
abuelita le duele la
cabeza y debe estar
tranquila.

11. Rosalía no
dijo una
palabra en la
mesa para no
importunar a
su abuelita y
cumplir el
deseo de su
mamá.

12. Rosalía dijo:
¡¡Soy un hada de los
deseos!!
Y de ahora
en
adelante
cumpliré
todos tus

13. La mamá la miró a la niña
luminosa y
resplandeciente.
Parecía
verdaderamente una
hada.

14. La mamá exclamo:
¡¡Tengo la suerte de que
hayas nacido,
Hija
Querida!!!.
FIN.