Las condiciones precarias y la violencia a la que se enfrentan los refugiados en las islas griegas están deteriorando gravemente su salud mental. Más del 90% han huido de conflictos armados, y el 80% ha sufrido algún episodio violento. La falta de recursos y la prolongada espera para ser trasladados al continente están empeorando sus traumas y provocando un aumento de las enfermedades mentales.
2. EMPEORA LA SALUD MENTAL DE LOS REFUGIADOS EN GRECIA
Inmigrantes, refugiados y solicitantes de asilo se agolpan en las fronteras de
la unión europea. En las islas griegas de Samos y Lemos donde actualmente
residen 15000 personas solicitantes de asilo.
La salud mental de muchas de estas personas se está deteriorando cada día
más por las pésimas condiciones en las que viven, la falta de recursos para
atenderlos y la violencia a la que son sometidos. Y ni por asomo hay algún
motivo para que vayan a ser trasladados a la parte continental del país.
3. Algunos testimonios:
Mohammad: "si lo sé no vengo", relata de su experiencia. Procedente de
Siria, donde se pasó cinco meses encarcelado por haber participado,
supuestamente, en las manifestaciones de 2012.
Allí, en Siria, le sacaron los dientes, le cortaron con cuchillos y quemaron
su piel con cigarrillos. Han pasado cinco años y, a sus 31, dice que le
sigue doliendo el cuerpo por las palizas. Llegó a Lesbos hace 11 meses y
vive bajo una carpa con 13 personas más. Ha sido testigo de la violencia
infligida a otros refugiados por parte de la policía griega: "Nos dijeron
que estaríamos seguros en Europa pero no lo siento así”, dice. La policía
aquí es como la policía en Siria. Nos insultan y nos hacen desnudar para
registrarnos, pero solo lo hacen para humillarnos´´
4. Muchos de los que cuentan con este tipo de asilo dicen que están
experimentando unos acontecimientos muy traumáticos, existe más de
un 90% que han huido del conflicto armado. Pero son las precarias
condiciones de su vida así como a la violencia a la que son sometidos lo
que les está minando su estabilidad mental. El 80% aseguró haber
sufrido algún episodio violento, otro 25% han sido víctimas de torturas y
un 19% de abusos sexuales tanto en su país de origen como en el
tránsito y ya en Grecia.
5. Retrato de Karon, 31 años de edad y procedente de Irak. Él, su
esposa y sus dos mellizos están bloqueados en Lesbos desde su
llegada el 2 de agosto de 2016. "NO quiero que mis hijos vean lo que
yo he visto en Irak. Por eso dejamos nuestro país, allí todo está
paralizado, no hay vida... Mi sueño es que mis hijos vivan en un país
hermoso, sin guerra, sin derramamiento de sangre, sin nada de esto.
Esto es lo único que deseo
6. Khalid, de 54 años, permanece en un alojamiento protegido ya que su
estado mental es muy vulnerable, procede de Kurdistán de donde son
también sus tres hijos, los cuales viven en Dinamarca con su exmujer.
Se siente bastante sólo y teme que sea deportado en cualquier momento
debido a que su solicitud ha sido rechazada por segunda vez y la policía
podrían detenerlo en cualquier momento.
Existe un gran número de pacientes con patologías mentales es bastante
preocupante y va empeorando. Desde julio a agosto de este año fueron
atendidos 110 personas, el doble de personas que el año pasado.
7. Ahmad de 30 años procedente de Raqqa, una de las ciudades sirias más
castigadas del Estado Islámico. Vive desde octubre del 2016 en la isla
Samos, en un centro de recepción, lleva 8 meses esperando la
resolución de su asilo. Dice que sólo aquellos que se autolesionan los
sacan de allí, pese a que tampoco sabe donde les llevan.
Duerme en la calle porque su tienda está saturada de gente, ya que no
tienen ni luz, sin agua en el inodoro y que con respecto a la comida no
es ni lo suficientemente buena ni para los animales.
Según la policía, le han detenido en cinco ocasiones, después de la
última volvió con cuatro costillas rotas
8. También la población femenina vive circunstancias muy complicadas,
como es el caso de Reine y Julie, amigas procedentes de la República
Democrática del Congo, un país en permanente conflicto donde la
violación de las mujeres se utiliza como arma de guerra. Ambas chicas
han sufrido violencia sexual y fueron también obligadas a casarse,
fueron salvadas por un hombre sirio, el cuál se las llevo a casa hasta
que pudieron tomar un bote a Samos donde ingresaron en un centro
de recepción.
Entre enero y septiembre de 2017 fueron atendidas 213
supervivientes, de las cuales un 80% proceden en países del África
subsahariana.
9. En la mitad de los casos, la agresión había sucedido en sus
países origen, ¼ de ellos en Turquía y el otro cuarto -21 mujeres-
fueron violadas en múltiples ocasiones. Por el contrario solo un
tercio de todas ellas han sido identificadas vulnerables por las
autoridades.
La mayoría de pacientes no obtendrán acceso a los cuidados y
protección que necesitan y que no serán transferidas al
continente
10. Reine ha sido objeto de la violencia de un trabajador social, pero aún
no ha visto a un médico. Ninguna de las dos en realidad, a pesar de los
dolores de cabeza, el insomnio, las hemorroides y el embarazo de Julie,
que ya está de cuatro meses. “Pide manzanas. Es lo único que puede
comer. Pero ellos nos dan esto”, dice y muestra un plato de plástico con
pollo y arroz. “¿Por qué hicimos esto? ¿Por qué huimos? Habría sido
mejor morir en casa”, solloza Julie