El tatuaje se inserta con una aguja fina que incrusta tinta en la piel cortando pequeñas partes del tejido. Existen varias técnicas para eliminar tatuajes como dermoabrasión, salabrasión y escisión, pero ninguna garantiza dejar la piel como estaba originalmente. Se recomienda no tatuarse para personas con hemofilia, marcapasos o afecciones de la piel.
2. COMO SE INSERTA UN TATUAJE El tatuaje se inserta con una aguja de 18 cm de grosor y una válvula giratoria de tinta que esparce tinta por toda la superficie en este caso el cuerpo activada por un interruptor ubicado en la parte superior del Skap ( lapicero electrónico ) asi se plasmara el dibujo deseado en el cuerpo accionando todo el mecanismo lleno de tinta y cortando pequeñas partes de tejido donde se incrustara la tinta.También existen diferentes formas de plasmar tatuajes como la opción de tatuajes una serie de calcomanías que se adhieren al cuerpo con una tinta que se borra con agua o con sustancias como el alcohol.
3. Como remover un tatuaje Existen diversas técnicas de eliminación de tatuaje, pero ninguna garantiza dejar la piel como estaba antes de ser grabada. Entre ellas pueden mencionarse: Dermoabrasión. La zona elegida se rocía con una solución que la congela, para después, usando un instrumento rotatorio, se eliminan la capa de la epidermis (primera capa de piel) y el pigmento utilizado sobre ella; produce una herida similar a una quemadura y al cicatrizar disimula el tatuaje. Se utiliza poco. Salabrasión (abrasión salina). Tras aplicar anestesia en la región, se “lija” la piel con un instrumento similar al empleado en la técnica anterior y utilizando una sal especial; este método deja cicatrices.
4. OTROS METODOS Escisión. Se trata de eliminar porciones de piel, suturando los bordes. (Se hace siempre con anestesia local). En términos sencillos, se estira la zona de piel del tatuaje y se corta, dejando una cicatriz lineal. Es un procedimiento más caro, largo y doloroso que el uso del láser, y puede resultar peligroso dependiendo de la zona del cuerpo donde se realice. No es recomendable para tatuajes amplios, ya que puede dejar muchas cicatrices e incluso necesitar injertos.
5. Algunas normas No deben tatuar su piel quienes padecen hemofilia, ya que presentan escasa coagulación de la sangre y, en consecuencia, las pequeñas heridas que deja el proceso podrían poner en peligro su salud. Igualmente debe restringirse a individuos que portan marcapasos, debido a que las máquinas tuteadoras pueden interferir con el buen funcionamiento del dispositivo. También es necesario que lo eviten los pacientes con afecciones en piel, como acné, dermatitis, heridas o irritación, pues la cicatrización puede demorar más de lo normal.