Europa y la Exploración del continente americano.pptx
Eliminación de tatuajes
1.
2. Uno de los remedios a los que puedes recurrir es el uso del
ácido tricloroacético. Se trata de una crema libre de
hidroquinona, más económica que la cirugía láser ideada para
eliminar, además de tatuajes, otras muchas más
imperfecciones en la piel.
3. Uno de los principales riesgos es que el ácido tricloroacético
puede provocar blanqueamiento de la piel, por lo tanto, debe
ser aplicado con cuidado. Cuando apliques esta crema en tu
piel es normal que sientas cierto escozor, tranquila, se trata de
una reacción completamente normal.
4. Estamos ante un elemento esencial en la dermoabrasión. Para
conseguir óptimos resultados debes, en primer lugar, exfoliar
la piel para conseguir eliminar varias capas de su superficie.
Esto puede resultar un poco doloroso y sangrar. Por lo tanto,
debes vendar la zona aplicando un vendaje limpio hasta que
cure. El proceso debes repetirlo durante varias semanas.
5. Primero, limpia el área del tatuaje con jabón. Seca la zona
completamente y afeita todo el pelo de la zona. A
continuación, mezcla dos cucharadas de sal con agua. Ahora,
aplica esta mezcla en el tatuaje ayudándote de una esponja
durante media hora y déjalo secar. Transcurridas dos horas,
retira la sal con agua y deja que el tatuaje se seque. Venda la
zona para evitar una infección.
6. Se emplea como producto desinfectante, pero igualmente
puede utilizarse para eliminar los tatuajes de tu piel. Otra de
las propiedades es eliminar las bacterias que pueden
desarrollarse después de que se han utilizado otros agentes
para hacer desaparecer tus tattos.
7. Respecto al uso de peróxido de hidrógeno debes aplicarlo
diariamente ayudándote de un hisopo de algodón. No esperes
milagros, eso sí, deberás aplicar este tratamiento durante
varias semanas hasta experimentar los primeros resultados en
tu piel.
8. Cada sesión del tratamiento consiste en la exposición del
tatuaje a un láser que produce pequeños golpes o pulsaciones
de una intensa luz que atraviesa las capas superiores de la piel
y que de forma selecta absorbe los pigmentos del tatuaje.
El láser provoca una fragmentación de esos pigmentos que se
desprenden pequeñísimas partículas que luego el sistema
inmunológico se encarga de quitar naturalmente sin ningún
tipo de problemas. Los expertos coinciden en que esta es la
mejor manera de eliminar un tatuaje.