El documento describe la evolución del caballo a lo largo de 60 millones de años, comenzando con su antepasado más temprano, el Eohippus. El Eohippus se parecía más a un perro pequeño que a un caballo, con cuatro dedos en las patas delanteras y tres en las traseras. Los caballos llegaron a América a través de puentes naturales que conectaban los continentes, pero se extinguieron hace 8,000 años. Cristóbal Colón trajo de nuevo los caballos a América en 1492.
1. Evolución
En el caso de los seres vivos, yo creo que su historia comienza mucho antes de su evoución como especie, de hecho
comienza en el surgimiento de la primera forma viviente, pero como esa parte todavía es un misterio, ni modo,
tendremos que comenzar por lo que se sabe de los primeros antepasados de los caballos. La evolución es en
verdad un proceso muy curioso, la seleción natural fue modificando a las distintas especies: según la zona en la que
vivian, los depredadores a los que estaban expuestos, el alimento que tenían disponible y muchos otros factores
logrando la formación de nuevas especies y la desaparición de aquellas que no eran suficientemente aptas. Es por
esto que la anatomía del caballo es tan poco común, pues es el resultado de la influencia del medio ambiente en el
que se desarrolló.
El caballo moderno (Equus caballus) tardó aproximadamente 60 millones de años en evoluciónar. Su antecesor más
temprano: el Eohippus, "caballo del alba" fué el que dió origen a la familia Equidae. Dentro de esta familia se
encuentran: La cebra, el burro y el caballo doméstico, asi como también los asnos de Asia y Africa y el caballo
salvaje de Przewalski.
El Hyracotherium, mejor conocido como Eohippus no se parecía casi en nada al caballo actual en tamaño ni
características, medía en promedio 35 cm a la cruz, pesaba unos 5.5 kilos ¡¡¡¡¡Prácticamente como un perro!!!!!
tenía el dorso arqueado y en lugar de tener un dedo protegido por un casco, tenían una mano con planta carnosa,
con 4 dedos en las patas delanteras y 3 en las traseras, todos ellos terminados en unas fuertes uñas córneas (mas
o menos como las patas de los venados). Sus dientes estaban adaptados para el consumo de hojas tiernas de los
arbustos y sus ojos también eran diferentes, pues estaban situados más al centro de la cabeza impidiendole una
buena visión lateral (que en el caballo actual sirve como sistema defensivo), pero el Eohippus no lo necesitaba ya
que en el ambiente selvatico en el que habitaba, el camuflaje era más efectivo para evadir a los depredadores.
¿Puedes creer que ESTE es el antepasado del caballo? ¿Verdad que es muy distinto al caballo
actual?
Puentes naturales (ahora lo ves, ahora no lo ves):
Muchas personas piensan que el caballo llegó a América durante la conquista, pero esa idea no es del todo cierta.
Durante el período Eoceno, al principio de la evolución equina, Norteamérica ya estaba habitada por antepasados
del Equus caballus. En aquel entonces el continente Americano se encontraba conectado a Europa y Asia a través de
puentes naturales, que se mantuvieron hasta el fin de la época glacial, aproximadamente en el año 9,000 a.C. Estos
puentes permitieron que durante más de un millón de años, se produjeran migraciones de especies de Equus hacia
lo que se conoce como el Viejo Mundo. Al derretirse los glaciares América quedó aislada del resto de los continentes
y mil años después, por causas que aún no se conocen, el caballo se extinguió por completo en este continente.
Las cuatro especies relacionadas con el Equus se distribuyeron de la siguiente manera: caballos en Europa y Asia
occidental, asnos y cebras en el norte y sur de África respectivamente, y onagros en el Medio Oriente.
Llegada al Nuevo Mundo, en números:
2. En 1492, Cristobal Colón ancló en costas americanas y por ese hecho histórico se dieron grandes acontecimientos,
uno de ellos: La Reconquista Equina (término acuñado por mi misma, je je je), pues el caballo que en el Nuevo
Mundo se había extinguido 8,000 años atrás, llegó a alcanzar la cifra de 25 millones de ejemplares en los 400 años
siguientes al descubrimiento de América.
Cristóbal Colón durante su primera expedición dejó 30 caballos en la isla de la Española y en muy poco tiempo el
número de animales se multiplicó considerablemente.
Años después Hernán Cortés llegó a México con 16 caballos, once sementales y cinco yeguas. Entre estos caballos
se encontraba El Morzillo que fué la cabalgadura de Cortés durante mucho tiempo.
Esta historia continuará...