1. El aquí y el ahora.
La adolescencia es una época de cambios vertiginosos en el cuerpo, en la forma de
pensar, de concebir y de representarse el mundo y las relaciones con los demas.
Los adolescentes tienen una particular forma de comportarse que lleva la virtud
de exasperar (desesperar) a los adultos.
En mayor grado a quien tiene autoridad sobre ellos: los padres, maestros,
directivos, etc.
2. • Para que haya un mejor entendimiento entre los jóvenes y los
adultos, es primordial una comprensión de la psicología de la
adolescencia.
Hay que señalar
que en este
periodo hay
características
universales, que
son moldeadas
por la cultura, el
entorno Muchas de las actitudes y
socioeconómico reacciones que exhibe, y
, las que llegan a constituir
características algo que Knobel (1992)
llama “patología normal”,
de la familia, no son mas que
etc. consecuencia de los
conflictos propios de la
delicada tarea de
aprender a ser adulto.
3. La adolescencia es principalmente cambio, desprendimiento de lo que
se fue y muchas interrogantes sobre lo que se llegará a ser.
Apoyándose en las relaciones que establece con sus padres, maestros y otros adultos
significativos para el, buscara los ingredientes que le permitirán darle forma a su
propio adulto.
Pero pasarán las enseñanzas, prohibiciones, ideales ante una rigurosa inspección y
después a sus inventarios personales.
Nosotros los jóvenes sabemos que necesitamos de los adultos y
reconocerlo nos produce coraje, aunque como la mayoría lo hace nos lo
aguantamos.
Los adolescentes entramos en duelo al saber que perdemos la niñez que
un día paso por nosotros y tratamos de resolverlo. Los padres también
deben saber que ya no somos niños y que se enfrentan a un hijo adulto,
crecido y con muchos problemas que resolver.
4. Los padres de ser ídolos de nuestra infancia, pasarán a ser odiados y
amados de manera ambivalente.
Un síntoma de este desencuentro suele ser el otorgar una libertad si
límites que parece más bien a abandono.
La libertad en los jóvenes es necesaria, pero con límites.