2. El Santo le pregunta a la primera monja: Hermana Teresa, usted tuvo alguna vez contacto con un pene? La hermana sonríe tímidamente y responde: bien...una vez toqué la cabeza de uno, con la puntita del dedo. OK - dice el Portero del Cielo - Meta la punta del dedo en esta pira de agua bendita y atraviese el portón...