1. La prostitución en conflicto con los niños y niñas
La prostitución se define como el acto de participar en actividades
sexuales o hacer el sexo a cambio de dinero o bienes. Aunque esta
actividad es llevada a cabo por miembros de ambos sexos, es más frecuente
en mujeres, aunque también se aplica a hombres. La prostitución puede ser
tanto heterosexual como homosexual, y puede involucrar a travestidos y
transexuales. El término genérico empleado para referirse a quien la ejerce
es prostituto La prostitución infantil es una realidad social y un delito
consistente en la realización de actos sexuales entre un menor de edad y
otra persona mayor edad a cambio de bienes materiales, económicos o de
cualquier otro beneficio.
La prostitución infantil suele abundar en países, regiones, estados,
provincias, más pobres. Cuando hay abuso sexual de niños, en este último
quizá no se pueda considerar como prostitución ya que en el caso del abuso
sexual el abusado (víctima) no recibe ningún tipo de pago. Cuando se
presta el servicio sexual por un infante a cambio de un pago se habla de
prostitución infantil
La prostitución infantil está prohibida en la gran mayoría de los países.
La prostitución infantil se daría principalmente por la pobreza extrema en
algunas zonas de países desarrollados, y en países subdesarrollados.
Investigaciones llevadas en la Universidad de Guadalajara demostraron
que, en México, la prostitución infantil es un grave problema del cual no se
escucha mucho, un sin número de mafias están detrás del "negocio". Los
consumidores, generalmente, son países ricos y los proveedores son países
pobres.
La investigación de muestra que hay muchos factores que obligan a los
menores de edad a prostituirse. Se demuestra que la mayoría de estos son
las necesidades económicas en el hogar, la huida de casa y la búsqueda de
auto sustento, la drogadicción, la explotación por parte de un proxeneta.
Las consecuencias que este abuso puede traer a los niños son:
drogadicción, suicidio, asesinatos, depresión, alcoholismo. Las víctimas de
este abuso además de ser prostituidas son vendidas en el exterior.

2. Trasladando todo nuestra ciudad el panorama no es más alentador
Una pesada tractomula que rodaba a las 8 de la noche del viernes pasado
por Boquerón, en la entrada a Ibagué, detiene la marcha en una heladería y
recoge a Luisa, una niña de unos 16 años que lleva minifalda, cabellera
negra larga, reloj y zapatos altos.
Más adelante, sobre la variante a Ibagué, el carro vuelve a detener la
marcha.
El conductor y la mujer ingresan a una casa que, por información de
algunos habitantes, funciona como discoteca y alquiler de piezas a los
transportadores que buscan un rato de placer a costas de la prostitución
infantil.
Luisa es solo una de las niñas de 14, 15, 16 y 17 años dedicadas a la
prostitución en Boquerón y el trayecto de la variante a Ibagué.
Ella, que no va al colegio, no es la única menor que vende su cuerpo a
cambio de dinero para satisfacer sus necesidades de vestido y educación o
para ayudar al sustento de su familia.
Este problema eterno de la prostitución infantil en las carreteras, fue
corroborado por Camilo Delgado, quien hasta el martes fue director de la
Oficina de Justicia de Ibagué.
"En operativos con la Policía hemos detectado la presencia de menores que
de manera hábil y soterrada venden su cuerpo a cambio de 5 mil y 10 mil",
asegura.
"Ha habido casos de niñas de 12 años que salen a la Variante a buscar
dinero con los camioneros", agrega.
Las personas recurrente mente generan una gran cantidad de denuncias por
estos hechos
El año pasado hubo algunas denuncias que preocupan, y en este también
existen varias.
Corregir esa situación no es fácil dado que las menores se valen de diversas
maneras para comunicarse con los conductores.

3. Una es esperar, sin despertar sospechas, a sus clientes en una tienda, un
restaurante, una estación de servicio o una heladería de las tantas que hay
en Boquerón.
"Estamos corroborando si es cierto que viviendas de la Variante son
utilizadas como casas de prostitución", señala Camilo Delgado.
Para él, lo cierto es que las menores acceden a estas prácticas, por pura
necesidad económica.
Arturo es un comerciante de la zona de Boquerón. El asegura que el
fenómeno ha venido en aumento pero corregirlo le llevará tiempo a las
autoridades.
"Las niñas son astutas, no dan vitrina, algunas salen a la vía a echar dedo o
a rogar amor a los camioneros, otras, se valen de métodos diversos para que
nadie se de cuenta que ejercen el oficio de la prostitución", dice.
Explica que las menores de edad son contactadas a través de celular e
incluso se ponen citas con sus clientes en hoteles del centro de la ciudad.
"El viernes pasado estuve en una casa de la Variante, y había de todo en ese
lugar: prostitutas menores de edad con camioneros y taxistas de todas las
edades, también las había adultas, y muchos travestis", asegura.
Pese a todos los esfuerzos las autoridades no pueden ejerce control de esta
actividad y fallan al incrementarse esta problemática
1. Aunque la prostitución infantil sobre la Variante no se presenta en un
alto número, lo cierto es que sí viene en aumento.
2. Las menores de edad son por lo general de barrios pobres. Muchas llegan
a este problema invitadas por amigas.
3. Las autoridades están tras las pistas de un grupo de mujeres adultas que
inducen a las niñas a la prostitución.
4. El año pasado y éste la Oficina de Justicia de Ibagué recepcionó 10
denuncias de prostitución en Boquerón y la Variante.
5. Algunos testigos narran que los viernes y sábados en la noche aumenta la
presencia de menores en la Variante.
La motivación generalmente es influenciada por amigas o compañeras de
colegio de las niñas o niños

4. María, una menor de edad que vive en un barrio humilde de Ibagué, relata
sin titubeos que ha sido invitada por algunas de sus amigas a 'pescar' a la
Variante.
"Yo tengo 17 años y mis amigas son de 15 y 16, ellas me dicen que si
necesito plata la solución es ir a Boquerón o a la Variante en busca de
conductores que pagan 10 mil pesos por un rato de sexo", dice.
Afortunadamente María no ha accedido a las invitaciones, pero ha visto
que niñas estudiantes de otros sectores sí lo hacen
Juan, un habitante de la Variante, narra que este tipo de situaciones ocurren
tarde de la noche.
"Los viernes y sábados en la noche se observa a niñas muy bonitas con
señores de edad, con conductores de mulas y camiones", dice.
Una joven de 16 años asegura que días atrás fue invitada por un camionero
que la quería llevar a Armenia.
"Me dijo que no me preocupara, que me daba plata si lo acompañaba, y que
al día siguiente podía regresar casa", afirma.
Las autoridades de verdad generan esfuerzos para combatir estos delitos
Niñas de 13, 14 y 15 años ofrecen servicios sexuales a 5 mil pesos en vías
del departamento.
Una batalla contra la explotación sexual de menores comenzaron las
autoridades del Tolima en el corredor vial que comienza en el Alto de La
Línea (Cajamarca) pasa por Ibagué y continúa hacia los municipios de
Mariquita, Honda, Melgar y Flandes.
"Ese es un corredor vial de mucho riesgo, es una zona de paso que, por su
alta afluencia de turistas, es frecuentada para fomentar la utilización de
niños en los temas de explotación sexual", afirma Martha Rengifo
Rodríguez, directora del Centro Zonal del Instituto Colombiano de
Bienestar Familiar en Ibagué.
Maritza*, una menor de 16 años, de minifalda, cabellera negra, reloj y

5. zapatos altos, frecuenta en las noches la variante de Ibagué y utiliza el
dinero en comida para su familia. "Comencé en esto hace un año pero la
cosa no es fácil, pues la Policía patrulla a toda hora, y no deja trabajar",
señala.
La guerra contra ese fenómeno, que incluye operativos y una campaña de la
Gobernación del Tolima con capacitaciones para la implementación de una
estrategia contra la Explotación Sexual en Niños, Niñas y Adolescentes, ya
comienza a llegar a hoteleros, taxistas, dueños de discotecas, de
restaurantes, vigilantes, conductores y prestadores de servicios en la vía.
Germán Sánchez, secretario de Industria, Comercio y Turismo del Tolima,
quien coordina la campaña, dice que primero se capacita a hoteleros y
transportadores con el fin de que denuncien.
"Vamos a seguir haciendo estas actividades porque no queremos que el
problema se nos salga de las manos; el Tolima es un atractivo turístico,
nuestros niños no lo son", afirma Sánchez.
Ibagué.
*Nombre cambiado.