Los sicarios de verdad trabajan para las mafias y realizan la mayoría de sus trabajos para eliminar rivales de otras bandas. Muchos anuncios en Internet ofreciendo servicios de sicario son en realidad estafas, realizadas por timadores que se llevan el dinero sin cumplir con el encargo. Contratar a un sicario de verdad no es sencillo y se debe contar con la recomendación de alguien conocido por la organización criminal. Cada vez hay más sicarios españoles trabajando para las mafias por la mitad del prec
1. SUCESOS
Los de verdad trabajan en mafias
La estafa de los
falsos sicarios
Fotografía tras la detención de una organización criminal británica en Marbella
(Málaga). EFE
o Aporta más información
'Yo quedaba con uno o dos clientes cada mes, les sacaba
el dinero que podía y no me volvían a ver
Según la policía, cada vez hay más verdaderos sicarios
españoles, más baratos que los del Este
LUCAS DE LA CAL
Madrid
2. 28/02/2016 03:37
En su ciudad natal, Pereira (Colombia), le gustaba ejecutar sus
trabajos como lo hacían los primeros sicarium de la Antigua Roma.
Siempre llevaba la sica, una pequeña y afilada daga, escondida entre
el cinturón y el pantalón. Cuando llegó a España hace 10 años, se dio
cuenta de que podía ganar más dinero siendo un falso sicario que uno
de verdad. Tan fácil como poner un anuncio en Internet con una
dirección de email: «Trabajos limpios, sin huellas ni testigos. Soluciono
su problema de raíz en menos de diez días». Su tarifa era de 8.000 a
12.000 euros, dependiendo de la dificultad para llevar acabo el
asesinato. Cuando quedaba con el cliente le pedía la mitad del dinero
por adelantado, luego desaparecía sin cumplir el encargo y sin temor a
una denuncia que obviamente no le llegaría.
Al preguntarle por su nombre nos dice que le podemos llamar Capi,
que es el mote que le pusieron los paramilitares en los años 70
cuando luchaba contra las guerrillas colombianas. Nos encontramos
con él en una cafetería en la plaza de El Barraco, un pueblo de casi
2.000 habitantes a 25 kilómetros de Ávila. Se piensa que en verdad
somos de algún programa de televisión, por eso antes de sentarnos
nos lleva al baño y nos hace un minucioso registro en busca de micros
o cámaras. Ya en la mesa con dos refrescos, este «sicario jubilado»
de no más de 55 años nos habla de la estafa que hay detrás de estos
asesinos a sueldo.
«En España, los sicarios de verdad son los que trabajan para las
mafias. Y la mayoría de los encargos que les hacen es para cargarse
a alguien de una banda rival. Vienen de su país, matan y se vuelven.
A esos les encuentras en la calle, por Internet sólo hay estafadores,
como yo lo era, que nos aprovechamos de la desesperación que
tienen ciertas personas que quieren eliminar al amante de su
mujer o a su jefe», cuenta el colombiano. «Hay una verdadera red de
sicarios timadores. Yo quedaba con uno o dos clientes cada mes, les
3. sacaba por adelantado todo el dinero que podía y no me volvían a ver
el pelo. Todo iba bien hasta que uno me la jugó, me pillaron y me pasé
un par de años en la cárcel». Ahora dice haber dejado ese mundo y
que trabaja decentemente en los mercadillos que van por los pueblos
de la Sierra de Gredos.
Al teclear en Google «busco sicario», aparecen infinidad de mensajes
en foros y blogs. «Si necesita quitar del camino a alguien sin
ensuciarse las manos cuente conmigo. Rápido y discreto». Al alcance
de un click, y por menos de 3.000 euros, tienes un asesino a sueldo. O
no. El Grupo de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil son los
encargados de rastrear estos mensajes. Llevan años detrás de estos
supuestos sicarios. «En la red no encuentras a los verdaderos. Son
anuncios falsos, detrás de ellos hay timadores profesionales. Y una de
las tantas estafas que llevan acabo es la de hacerse pasar por sicarios
para hacerse con dinero rápido por un encargo que nunca realizarán»,
explican desde la Guardia Civil.
En las últimas semanas, la palabra sicario salió de nuevo en todos
los medios por el periodista deportivo Paco González. La mujer que
agredió hace dos años a su mujer e hija, intentó terminar el trabajo
desde la cárcel contratando los servicios de un asesino. Aquí surge la
pregunta: ¿Es fácil contratar a un sicario, de los de verdad?
«En la calle, por el boca a boca, sí. Pero no es sencillo. Tienes que ir
de parte de un conocido de ellos, porque sino se piensan que eres
policía», nos dicen desde la Unidad de Droga y Crimen Organizado de
la Policía (UDYCO), que hace poco detuvieron en Marbella a seis
miembros del conocido Equipo A, un grupo de sicarios británicos que
planeaban matar al líder de una banda rival. «No hay estadísticas
reales de los crímenes que cometen cada año. Son delitos en silencio
porque las víctimas no denuncian por miedo».
Se estima que el 70% de estos ajustes de cuentas nunca se
esclarecen. Y la gran parte son por temas de narcotráfico. «Estas
4. oficinas de cobro, como las llamamos, se empezaron a instalar en
España en los años 90. Ahora, debido a que cada vez interceptamos
más alijos de drogas, estos carteles contratan a sicarios para matarse
entre ellos y robarse la mercancía». Como el pasado enero, que dos
miembros de la mafia georgiana aparecieron muertos en un piso de
Tarrasa.
La Policía nos cuenta que lo que ha cambiado en estos años es que
cada vez hay más españoles que hacen estos «trabajos» por la mitad
de dinero que los «profesionales» sudamericanos o de Europa del
Este. En las deudas por narcotráfico, el objetivo principal de estos
sicarios no es matar, sino cobrar. Ellos se quedan con un 20% y lo
demás va para la organización criminal.