Según el estudio ‘El gasto en ocio y cultura de los españoles’, del EAE Business School».
En un contexto económico marcado por la salida de la
recesión y la leve mejoría de los datos del empleo, la tauromaquia ha comenzado a tocar fondo antes de que lo haga el gasto en cultura , que seguirá cayendo a ritmos cercanos al 8%.
DE LAS OLIMPIADAS GRIEGAS A LAS DEL MUNDO MODERNO.ppt
Según el estudio el gasto en ocio y cultura 2014 de eae. la rioja
1. Cs CULTURAS Y SOCIEDAD Domingo 26.10.14
60 LA RIOJA
El toreo comienza a salir de la
recesión: crece un 1,1%en el 2014
La temporada cerrará con 956 tardes de toros. Es decir, un 1,1%más que en el 2013
PABLO
GARCÍA
MANCHA
pgmancha@toroprensa.com
No creo se cuentencon
los dedos de una mano,
pero poco faltará. Los
toros, la fiesta más es-pañola,
la de más tradición a lo lar-go
de un montón de siglos, son los
toros en sus diversas versiones, en-cierros,
capeas, corridas de vacas,
de novillos, corridas de toros....
Digo, queme pierdo, los toros, son
la descarga de adrenalina demu-chos
valientes que corren encie-rros,
que saltan al ruedo con las va-quillas
y las vacas, para burlarlas y
pare sentir esemiedo natural por
el riesgo, superado cuando eres ca-paz
de burlar las embestidas, casi
siempre inciertas de las reses que
recorren las calles. Entonces te
sientes, no digo un súper hombre,
pero sí un hombre importante por
vencer el lógico temor al ridículo y
al trompazo, lesión o herida pro-ducida
por asta de res brava y lista.
TOROS
Los datos del sector taurino en el 2014 son los mejores de las últimas temporadas. :: EFE / JOSÉ LUIS ROCA
Ahora que eso de correr es historia
para mí, recuerdo en aquellas fe-rias
de ganado en los alrededores
de la plaza de laManzanera, o las
fiestas bernabeas, con largas filas
para entrar a las ‘vaquilla’ con la
meriendo y la bebida, para ‘echar
la tarde’.
Sigo perdiéndome. No tengo re-medio
al agolparse cantidad de re-cuerdos
de juventud relacionados
con al fiesta de toros. El titular dice
que no sabemos nada y la pregunta
con la que debería haber comenza-do
este comentario, no es otra que
son pocos los que no saben en
nuestra tierra de toros, aunque no
estén ahora demoda, de fútbol y
de pelota a mano y ahora de balon-cesto
y balónmano, que ‘pa eso va-mos
bien’. Es posible que la mayo-ría
sepa de todo lomencionado,
pero estoy seguro, que en el capí-tulo
de TOROS es mucho más lo
que ignoramos que lo que sabe-mos.
Somos, la mayoría, unos ‘sa-bios
ignorantes’, contrasentido
muy real. Yo confieso en sentido
literal mi ignorancia pese a estar
convencido que cada día aumento
mis conocimientos taurinos, en re-ferencia
al juego que dan los toros
en la plaza.A la vez de este recono-cimiento
me doy cuenta que la sa-biduría
taurina, el conocimiento
del toro de lidia, su juego en la pla-za,
es imprevisible, muchas veces.
Sabemos los aficionados muchas
cosas, pero a la vez, si somos since-ros,
somos conscientes que no sa-bemos
nada omuy poco. Si teme-tes
en el terreno del toro, no hay
duda que el toro te aparta, te arro-lla
o te cornea. Si te quedas al des-cubierto,
es decir, si citas con la
muleta en oblicuo dejando mucho
espacio libre entre engaño y el
cuerpo, le das la opción al toro de
elegir, carne o tela. Sabemos cuán-do
los lances con capote ymuleta
son buenos, según la posición y la
distancia que se hagan. Sabemos
cuándo un picador hace bien la
suerte, conocemos cuándo un ban-derillero
se cuadra delante del
toro, se ‘asoma al balcón’ y sale
bien la suerte. Sabemos cuándo la
estocada es buena en ejecución y
colocación. Sí ¿y qué? Ciertamen-te
hay ‘sabios’ aficionados y escri-bidores
de toros, esos que hablan
ex cátedra, pero somos muchos
más los que ignoramos tantas co-sas
del toro en el ruedo y tan poco
que lo confiesan. Lamentable-mente
es cierto.
JUAN CRUZ GASTÓN
NO SABEMOS NADA
Ciertamente hay ‘sabios’ aficionados y
escribidores de toros, esos que hablan
ex cátedra, pero somos muchos más los
que ignoramos tantas cosas del toro
en el ruedo y tan pocos que lo confiesan
LOGROÑO. «La economía taurina
está cambiando el paso. Poco a poco,
el sector comienza a salir de la rece-sión
», tal y comoescribe el periodis-ta
Juanma Lamet en su blog ‘Tauroe-conomía’:
«Después de seis años de
números rojos ininterrumpidos, el
número de festejos mayores celebra-dos
en España ha vuelto a crecer en
el 2014. El año cerrará con 956 tar-des
de toros. Es decir, un 1,1% más
que en el 2013, año en el que la cifra
ascendió a 946».
Lamet abunda en el crecimiento
resaltado que el de 2014 es un incre-mento
leve, apenas por encima del
estancamiento, pero esmuysignifi-cativo:
«Para empezar, la tendencia
recesiva, siempre difícil de revertir,
se ha frenado. En un contexto eco-nómico
marcado por la salida de la
recesión y la leve mejoría de los da-tos
del empleo, la tauromaquia ha
comenzado a tocar fondo antes de
que lo haga el gasto en cultura , que
seguirá cayendo a ritmos cercanos al
8%, según el estudio ‘El gasto en ocio
y cultura de los españoles’, del EAE
Business School».
Los toros han pasado ahora a ali-nearse
con el repunte de la activi-dad
económica nacional. No en vano,
según las previsiones del Gobierno,
el Producto Interior Bruto nacional
crecerá un 1,3%. De momento, el
‘Producto Interior Bravo’ se ha ano-tado
una subida mínima del 1,1%. El
incremento –siempre según refle-xiones
de Lamet– lo aporta de for-ma
íntegra el segmento de las novi-lladas,
que sube un 13,17%: de las
243 celebradas en el 2013 se ha pa-sado
a 275, 32 más. Aupada por la
efervescencia del escalafón noville-ril,
la estadística no sólo mejora los
datos del 2013, sino, también, los de
2012. Se trata del primer dato posi-tivo
desde que comenzó la ‘Gran Cri-sis’,
en el 2007, y resulta todo un
cambio de tendencia, teniendo en
cuenta que las novilladas se venían
anotando números rojos de dos dí-gitos
(-26,8% en el 2012, -20,5% en
el 2009, -22,3 en el 2008...). Algo si-milar
ocurría con los rejones. En toda
España se han dado este año 219 fes-tejos
de toreo a caballo, un 5,2% por
debajo del año pasado (231).
El número de corridas se ha redu-cido
de las 472 del 2013 a 462,un2,1%
menos. Es el menor retroceso regis-trado
en los últimos siete años. El nú-cleo
de la llamada fiesta mantiene,
por tanto, el pulso, aunque se man-tengamuylejos
de las cifras registra-das
en los años del boom del ladrillo,
en los que se llegaron a estoquear has-ta
1.035 corridas en un solo año, el
recalentado 2007.
Datos contextualizados
Pero este dato de corridas del 2014,
muysignificativo, sigue sin ser esca-so.
En la década de los80, queno se
considera de decadencia, la media
fue de 476 corridas al año, ciframuy
similar a las 462 de este año.Además,
actualmente hay una ratio de una co-rrida
por cada 100.000 habitantes, si-milar
a la de la Edad deOro de la Tau-romaquia.
«¿Están los toros en deca-dencia
si se celebra unmismo núme-ro
de corridas por persona que en la
mejor de las épocas de cuantas ha vi-vido
esta disciplina cultural?Nohace
falta responder», se pregunta Juan-maLamet.
En todo caso, las cifras ac-tuales
siguen muy lejos de las regis-tradas
en los años de la burbuja in-mobiliaria,
en los que se llegó a su-perar
la barrera de los 2.200 festejos
en un contexto de pronunciado re-calentamiento
económico.
La crisis también
cae en las CCAAcon
corridas de toros
Sólo 13 de las 43 provincias en
las que está presente el toro ex-perimentan
aún una caída inte-ranual
del número de festejos.
Hay diez quemantienen la mis-ma
oferta taurina que en el 2013
y 20 en las que elmercado táuri-co
sube. Entre ellas, cabe desta-car
a Huelva, que ha pasado de 9
a 19 corridas (un 111% más), y a
Burgos, que suma 7 nuevas tar-des
de toros, desde las 18 de 2013
a las 25 de este ejercicio (un 39%
adicional). De entre las provin-cias
que prosiguen con el ajuste,
las quemás sufren sonMálaga,
que pasa de 34 a 25 corridas
anuales, y Cádiz, que de 28 cae a
22. El toreo aumenta en siete au-tonomías
(Cantabria, Castilla y
León, Comunidad Valenciana,
Extremadura, Madrid, Murcia y
País Vasco), semantiene en Na-varra,
La Rioja, Baleares y Astu-rias
y cae en Aragón, Galicia y las
citadas Castilla-La Mancha y An-dalucía.
Como explica el periodista
Juanma Lamet, «la
tendencia recesiva,
siempre difícil de
revertir, se ha frenado»