1. LA IMPORTANCIA DE LA PRESERVACIÓN DE LAS LENGUAS Francisco Ramírez Reyes
2. ¿Se imaginan que no hubiera nadie en el mundo con quien poder hablar?
3. ¿Sabían que existe un puñado de seres humanos, dispersos por todo el planeta como una secta maldita, a los que les ha sido negado el derecho elemental de mantener una conversación?
4. No son seres mudos, autistas, ni tienen ningún impedimento físico para expresarse. No se trata de delincuentes que estén aislados en pabellones de castigo. Tampoco nos estamos refiriendo a algún tipo de monje con voto de silencio.
8. Aunque la muerte de idiomas ha ocurrido durante miles de años como un fenómeno natural, en los últimos 300 años se ha visto un dramático incremento de este fenómeno.
11. Pero, ¿por qué mueren las lenguas? Por la muerte de todos sus hablantes. Por la destrucción del medio ambiente. Por el choque cultural de una comunidad de hablantes con otra. Por los medios de comunicación masiva, que abandonan las lenguas minoritarias en favor de otras.
12. Si es un fenómeno natural, ¿por qué preocuparnos por la desaparición de las lenguas?
13. Imagina que eres el último hablante de una lengua, imagina… Que no hubiera palabras para nombrar la fruta que más te gusta. El que tus pensamientos los hicieras en cualquier otro idioma, pero menos en tu lengua madre. Sin palabras propias para jugar o inventar versos. Sin un idioma que te pertenezca para escribir sobre tus recuerdos. Sin una lengua propia para decir lo que quieres, lo que sientes o lo que necesitas.
14. Cuando muere una lengua Se pierde algo más que una forma de comunicación…
15. Al desaparecer una lengua Desaparece una visión del mundo única en su género, con su propio sistema de valores, su filosofía específica y sus características culturales peculiares. Se pierden irremediablemente conocimientos históricos, culturales, espirituales y ecológicos que se han ido encarnando en él a lo largo de los siglos. Muere una forma posible de ser.
16. Cuando muere una lengua, muere también una parte de la humanidad.
17. Recuperar y conservar la lengua materna, es algo que sólo pueden hacer aquellas personas a las que pertenece. Decidir usarla, a pesar de todo, aun cuando se aprenda otro idioma. Decidir que los hijos la aprendan. Decidir mantenerla viva, útil y vigente. Nadie más puede hacer ese trabajo.
18. Está en sus manos que de su gran lengua materna quede algo más que una pequeña grabación