El capítulo 7 trata sobre la reestructuración de deudas para personas y pequeñas empresas. Permite a los deudores proponer un plan de pago para saldar sus deudas en un plazo de 3 a 5 años, evitando así la bancarrota. El proceso del capítulo 7 es supervisado por un tribunal de quiebras y requiere que el solicitante pase una prueba de medios para demostrar que no puede pagar sus deudas.