Boletín de distribución gratuita para usuarios del Metrobus, que ofrece una versión amigable sobre la historia urbana de la colonia Santa María la Ribera, con miradas a su vida cotidiana, arquitectura, lugares de interés, espacios públicos, trayectoria histórica, origen de los nombres de sus calles y más.
Proyecto desarrollado por jóvenes universitarios de GERMINALIA A.C. con apoyo del CIDE, Instituto Mexicano de laJuventud, PACMYC, Secretaría de Cultura del Gobierno del DF.
2. Contenido 4 Corazón de la colonia 7 Historia 10 Los días en la historia 13 Arquitectura 16 Habitantes célebres 20 La colonia hoy
Ciudad en Ruta. Historia de las colonias del Corredor Vial Insurgentes
C iudad en Ruta. Historia de las colonias
del Corredor Vial Insurgentes, es una pu-
blicación bimestral y gratuita que tiene la fina-
espacio que el trasporte público nos otorga y así
llegar a las manos de quienes lo harán suyo: los
habitantes y visitantes de las colonias.
acciones destacan “Esquina Bajan...cultura a
600 watts” de difusión cultural en el trolebús
de la Ciudad de México.
Equipo de investigación
Alejandra Valdés Teja
lidad de mostrar a los usuarios del transporte Ciudad en Ruta consta de la publicación de Esperamos que este proyecto sea de su Nuty Cárdenas Alaminos
público la historia y riqueza de las colonias nueve boletines coleccionables dedicados a ca- agrado y que, con entusiasmo, esperen los Sofía López Fuertes
por las que cruza la avenida más importante da una de las emblemáticas colonias que for- siguientes números. Raúl Mendoza Azpiri
de la ciudad. man el camino que va desde San Ángel hasta Agradecemos el apoyo de la Dirección Ge- Sofía Deveaux Durán
Este proyecto es el resultado de la inquietud Indios Verdes pasando por Nápoles, del Valle, neral de Vinculación Cultural y el Programa Diseño Gráfico
de un grupo de jóvenes que, sin ningún fin de Hipódromo Condesa, Roma, Zona Rosa, Taba- de Apoyo a las Culturas Municipales y Comu- Daniel Zúñiga (Don Dani)
lucro ni político, nos hemos reunido para bus- calera, Santa María la Ribera, Nonoalco-Tlate- nitarias de Culturas Populares de conaculta, Fotografía
car el mejor medio de acercar a la población lolco y Santa Isabel Tola. así como a la división de Histoia del Centro Enrique Macías Martínez
esta información que a todos nos pertenece y Ciudad en Ruta es un proyecto impulsado por de Investigación y Docencia Económicas y a Contacto
poder volver a sentir nuestros los rinconcitos Germinalia A. C., asociación civil dedicada a la Fototeca del inah, para la realización de ciudadenruta@gmail.com
de la ciudad, para lo que hemos aprovechado el la promoción educativa y cultural, entre cuyas este número. germinalia@gmail.com
3. Corazón de la colonia Pero era el suelo del Kiosco el lugar prefe-
rido, no sólo porque en él se podía bailar, sino
porque era el lugar ideal para patinar y jugar
a “la cazadora”, aquel antiguo juego que con-
sistía en perseguir al patinador que portaba
un pañuelo y tratar de quitárselo. En varias
ocasiones la gente se reunía a observar a los
intrépidos jugadores, pues sus habilidades para
esquivarse unos a otros y brincar por las esca-
“Los domingos y los jueves en el parque daban vueltas en coche pasando frente a la ne- leras representaban todo un espectáculo para
principal ameniza las reuniones la Banda vería la Especial y los ancianos recordaban con los paseadores.
municipal, y como a eso de las 7 ya se mi- nostalgia los viejos tiempos. Desafortunadamente para los niños de la
ran desfilar las muchachas y muchachos Los domingos en la Alameda eran el esce- colonia se prohibió el patinaje en el Kiosco, y
que las vueltas van a dar”. nario de los “requiebros” y coqueteos de los fue entonces que se construyó el Redondel, un espacio ovalado con una larga banca alrede-
jóvenes que caminaban en dirección opuesta a dor, exclusivo para patinar, andar en bicicleta
4
T al como Chava Flores describe la vida de
provincia en una de sus canciones (Vámo-
nos al parque Céfira), así era la vida de la emble-
las muchachas (cuya belleza les daba fama en
toda la ciudad), para encontrarse e intercam-
biar una romántica mirada, una flor o alguna
y jugar futbol, que funcionaba también como
escenario dominical de los payasos “Rabanito”,
“Pipiolo” y otros personajes pintorescos como
mática colonia Santa María la Ribera durante la palabra de galantería. el “Fakir” y su hija contorsionista, el amaestra-
primera mitad del siglo xx, que con su hermosa En su famoso Kiosco Morisco se acostum- dor de ratones y el cubano que hacía piruetas
Alameda daba a sus habitantes un ambiente braba realizar grandes fiestas y bailes a las que en su bicicleta.
provinciano del cual no gozaban otras zonas acudían las personas más elegantes de la época Los santamarianos recuerdan su Alameda
de la ciudad. y la ciudad. Al quedar prohibidos, el lugar se como el lugar en el que se crearon largas amis-
La Alameda era el principal centro de diver- reservó para los románticos Jueves de serenata tades, en donde todos los días, y sobre todo los
sión de los ribereños: en ella jugaban los niños que ofrecían las diferentes bandas como la de domingos, había un ambiente de fiesta en cada
a las canicas, los patines o la bicicleta mientras la Marina, la Policía, la Ciudad de México y la rincón, una gran celebración que invitaba a to-
que las madres platicaban y tejían, los jóvenes Típica Lerdo de Tejada. da la gente de la ciudad.
Interior del Kiosco Morisco
Descanso en la Alameda
4. Historia
Fundación se dedicaban a bienes raíces, lo que motivó al
E n el lugar donde actualmente se ubica la
Santa María la Ribera, en la época de Her-
nán Cortés había huertas que se alimentaban
gobierno a condicionar la venta a la donación
de algunos espacios para fines sociales.
Fue así que los hermanos Estanislao y Joa-
del río San Cosme, que en 1524 se repartieron quín Flores –el primero de ellos considerado
como solares para sembradíos. Durante el Vi- fundador de la colonia– donaron sus terrenos
7
rreinato, familias adineradas cautivadas por su para convertirlos en parques, plazas, paseos,
buen clima y abundante vegetación eligieron mercados y otros lugares de encuentro, toman-
los límites de la Ribera de San Cosme como el do terrenos de las haciendas de la Condesa y
lugar idóneo para construir sus casas de vera- la Teja y el rancho anexo de Santa María. Si-
neo. Fueron estas mismas características las guiendo el ejemplo de los hermanos Flores,
que impulsaron que el desarrollo urbano de otras familias acaudaladas fraccionaron sus
la ciudad de México del siglo xix se orienta- terrenos y posteriormente los donaron para los
ra hacia esa zona, ya que los terrenos del lado mismos fines. Por iniciativa de los vecinos se
oriente eran tan bajos que sufrían continuas inauguró la nueva “Santa María de la Ribera” el
inundaciones. Más tarde, durante el Porfiriato, 15 de agosto de 1860, con una celebración que,
la zona se convirtió en un espacio atractivo pa- según la propia invitación al festejo, tenía el
ra los inversionistas y en especial para los que propósito de “hacer más conocidas del público
Interior del Museo del Instituo de Geología
7. Arquitectura
¿ Sabías que las estructuras de algunos edi-
ficios se pueden desarmar, transportar y ser
colocadas en otro lugar?
Como parte del programa de embellecimien-
to y engrandecimiento de la ciudad durante el
mandato de Porfirio Díaz, se planeó la colonia
13
Santa María la Ribera, imitando la traza del cen-
tro histórico, la cual se asemeja a un red con un
parque en el centro, de acuerdo con la influen-
cia francesa de fines del siglo xix y principios
del xx. En el centro de la plaza más famosa de
la colonia, conocida como la Alameda de Santa
María la Ribera, después de armarlo y desmon-
tarlo varias veces, se colocó el kiosco de estilo
morisco diseñado por José Ramón Ibarrola, el
cual resalta por sus colores rojo, azul, amari-
llo y ocre así como por el águila en la punta de
su cúpula. El kiosco se creó como pabellón de
Kiosco de la Alameda
8. México en la exposición internacional de Nuevo nia es el Museo del Instituto de Geología, cuya de art nouveau. Un detalle a destacar es el uso bién existen algunas privadas multifamiliares.
Orleáns de 1884 a 1885 y gracias a su estructura construcción se inició en 1902 por el arquitecto del vidrio en la cúpula del vestíbulo y los siete Como todavía podemos apreciar, las fachadas
de hierro desmontable fue trasladado a la feria Carlos Herrera con motivo de las Fiestas del vitrales con paisajes mexicanos y descripciones de estas casas incorporan estilos diversos como
internacional de San Luis Missouri y de ahí a la Centenario de la Independencia. De la fachada del trabajo de las minas. el neoclásico y ecléctico con detalles en hierro
Alameda Central de la Ciudad, donde durante de este edificio destacan un reloj en el centro Las estructuras desarmables de hierro, el forjado, vitrales y ornamentación en piedra que
veinte años se realizaron los sorteos de la Lo- que aún funciona (cuyas campanas matutinas acero y el vidrio no son la única característi- enmarca esbeltas puertas y ventanas. La mayor
tería Nacional y se proyectaron las primeras llevan varios años sin sonar), decorados en pie- ca de toda la arquitectura de la colonia, como parte de las casas fueron construidas alrededor
películas mudas. Fue en las Fiestas del Cen- dra con relieves de fósiles de caracol y la esca- vemos en la Casa de los Mascarones, cuya es- de un patio central enmarcado por un pasillo y
tenario de la Independencia cuando se instaló linata de acceso. Al interior, la impresionante pléndida fachada barroca albergó el colegio de múltiples habitaciones con altos techos.
en la colonia: primero en el lado sur, frente a la doble escalera curva, totalmente desmontable, San Luis, la Escuela Nacional de Música, la Fa-
Iglesia del Espíritu Santo y posteriormente, en que se extiende de forma majestuosa desde el cultad de Filosofía y otras instituciones educa-
1910, donde se encuentra actualmente. vestíbulo, nos enseña un magnífico ejemplo tivas religiosas y laicas. Ubicada en la Ribera
Debido a la producción masiva de acero, hie- de San Cosme, esquina con la calle de Naranjo,
rro y vidrio de la época, se pudieron incorporar debe su nombre a los diversos mascarones que
estos materiales a las grandes construcciones, representas figuras humanas en las bases de
14
como vemos en algunas de la colonia. Con una las columnas.
estructura igualmente desarmable, traída des- Otras construcciones que vale la pena admi-
de Alemania y montada en México por el inge- rar son la Secundaria número 4 Moisés Sáenz,
niero Luis Bacmeister, se construyó el Palacio la escuela Normal Superior (obra del arqui-
de Cristal, posteriormente llamado Pabellón tecto Enrique Yañez), la Iglesia de la Sagrada
Japonés y hoy conocido como Museo del Cho- Familia construida por el arquitecto Herrera
po, el cual recientemente fue remodelado por en 1906 con ciertos elementos bizantinos, y la
el arquitecto Enrique Norten. Las dos torres Fundación Matías Romero, con llamativos de-
metálicas de su fachada son la entrada a un talles en ladrillo, que actualmente funciona
edificio que, desde 1904, combina el tabique con como un asilo de ancianos.
el acero en sus muros. Otro ejemplo del uso del La mayoría de las construcciones de la co-
acero y el hierro en la arquitectura de la colo- lonia fueron casas unifamiliares, aunque tam-
Museo del Chopo
Museo del Instituto de Geología
9. Habitantes célebres
(11-200)
El domingo 26 de marzo 1939 el estadio Asturias
fue consumido por el fuego después de que los
aficionados del Necaxa prendieran hogueras
tras el injusto empate de su equipo frente al
Asturias y la grave lesión del “Chamaco”, uno de
los primeros ídolos del deporte en México. Los
periódicos del día siguiente relataron la crónica
de un “match sucio, violento y alevoso”, junto
con los sucesos de la inminente Guerra Mundial
16 (1872-168)
y la rendición de Madrid a los franquistas. En
Poeta, dibujante y pianista, personaje caracte- diplomático Carlos Pereyra, fue muy admirada 1936, con tan sólo 17 años, ingresó al legenda-
rístico del periodo de esplendor de la colonia, da por la aristocracia mexicana e internacional rio conjunto de los Once Hermanos del Necaxa.
nombre a una de sus calles. Su libro Rosas de la al encarnar el ideal de la mujer porfirista: una Campeón de goleo en la temporada 1950-51, fue
Infancia llegó a todas las escuelas primarias del feminidad delicada, pura y pudorosa que actúa autor de 242 goles en 304 partidos de liga na-
país con el fin de inducir a los niños “a la curio- con gracia, renunciación, recato, sencillez, sen- cional y 56 con la selección nacional a lo largo
sidad y al saber” siguiendo el orden moralista de timentalismo y religiosidad, cuya obra inducía de su carrera. En 1944 apareció, junto a Joaquín
la época. El amor y el dolor, la tristeza, melanco- a la resignación y conformismo. Solitaria, con- Pardavé, en las taquilleras cintas Los Hijos de
lía, soledad, amargura y muerte son el sello de servadora e idealista, escribió poemas de estilo Don Venancio y Los Nietos de Don Venancio. Fue
su poesía. Compuso algunas piezas para piano, romántico moderado y se opuso abiertamente en la Alameda de la Santa María donde conoció
como la popular Entre Rosas en 1895. Originaria al modernismo argumentando que toda moda a su esposa, con quien vivió por más de 60 años,
de Coatepec, Veracruz, y esposa del escritor y es “ridícula, incompetente y necia”. y murió en 2005 padeciendo Alz Heimer.
Torre del Museo del Chopo
11. La colonia hoy
H oy viven en la Santa María más de 40 000
personas, casi 13 veces el número de ha-
bitantes que había en 1882 –época de apogeo
sigue siendo predominantemente habitacional
y con una identidad hoy difícil de encontrar.
Antiguamente la colonia tenía una bas-
de la colonia–. Por este aumento en la densi- ta oferta de restoranes, cines y teatros, y hoy
dad poblacional y por los sustos y rezagos del surgen lugares de encuentro juvenil como los
terremoto de 1985, los grupos que la habitaban tianguis, las casas de cultura y los cafés, que
21
–en su mayoría artesanos de las capas socia- coexisten con el pasado rico en historia, arqui-
les intermedias– salieron hacia otras zonas y tectura y tradiciones.
llegaron nuevos pobladores que cambiaron el
ritmo de la colonia: comerciantes, estudiantes
y nuevas familias.
En los últimos 30 años, la Delegación Cuau-
htémoc (la zona más antigua de la ciudad) ha
sido la que más población ha expulsado en todo
el Distrito Federal –hoy vive ahí una tercera
parte de la que la habitaba en 1980–, cambiando
el uso de suelo residencial por el comercial. La
Santa María la Ribera es una excepción ya que
Interior del Museo del Chopo
Limpiando la herrería
12. y coleccionistas de rock, jazz y música popular (casi esquina con San Cosme), hasta llegar al
Crisantema contemporánea, que se juntaban los sábados. lugar que hoy los hospeda cada sábado.
Plazas y Parques
Eje 2 Nte. Ric ard La Alameda. Su Kiosco Morisco fue restau- Su crecimiento desproporcionado e inevitable Mercado de San Cosme
o Flores Magón
rado en 2003; los vecinos y visitantes fueron conversión en espacio comercial, lo hicieron
recolectando las piezas faltantes recuperán- trasladarse a la calle. Cada vez había más gente, Monumentos y Construcciones importantes
ar tínez
Eligio Ancona dolas de sus colecciones privadas. Ahí hay lo que empujó a los choperos a buscar un nuevo Iglesia de la Sagrada Familia
Bodet
González M
bailongo los sábados. espacio en dónde asentarse: pasaron por la Ala- Casa de los Mascarones
Cto. Interior
uela
meda de Santa María, la explanada de la Facul- Escuela Normal para Maestros
Jaime Torres
Jardín de Alzate
Manuel Carp
Dr. Mariano Az
io Jardín de la Ribera de San Cosme tad de Arquitectura de la unam, la calle del cine Secundaria núm. 4
Naranjo
Dr. Enrique
La Raza y un estacionamiento en Insurgentes Estación Buenavista
Salvador Día Museos y centros culturales
z Mirón Dr. Atl
El Palacio de Cristal –Museo Nacional de Bibliografía
Historia Natural durante varias décadas– se
Sabino
Archivo del Arzobispado de México. Leal, Luis: Mariano Azuela: vida y obra. México, Edi-
convirtió en el Museo Universitario del Chopo Azuela, Arturo: Alameda de Santa María. México, ciones de Andrea, 1961.
Eje 1 Nte. José
N ogal
Antonio Alzate Plaza y Valdés, 2003. Luna Arroyo: Dr. Atl. México, Salvat Mexicana, 1992.
en 1975, después de haber estado cerrado por
Azuela, Arturo: Los ríos de la memoria, Invenciones en Periódico El Universal, 27 de marzo de 1939 23
s N te
. más de 11 años y en peligro de ser demolido y Santa María la Ribera. México, Ediciones Castillo, 2003. Ponce de León, Salvador: María Enriqueta y su retorno
Sor Juana vendido como chatarra. La unam lo recuperó y Boils, Guillermo: Pasado y presente de la colonia Santa a México. México, Editores Mexicanos Unidos, 1961.
Inés de la
Cruz
e n te
María la Ribera. México, uam-x, 2005. Raúl Solano Lartugau: “Las iglesias porfirianas de
Fresno
hoy es un canal de acercamiento y expresión
Casado Navarro, Arturo: Gerardo Murillo el Dr. Atl. la Ciudad de México”, México Desconocido, núm. 186,
surg
artística enfocada en los jóvenes. Consulta la
Cedro
Ribera
México, unam, 1984. agosto de 1992.
Av. In
programación en www.chopo.unam.mx. conaculta: Cancionero Popular Mexicano. México, Sáenz Páez, Mary Elizabeth: La escritora mexicana
Amado Nervo
Sta. Ma. La
Violeta Museo de Geología de la UNAM. Lecturas Mexicanas conaculta, 2001. María Enriqueta. Tesis Maestría, Facultad Filosofía y
Casa de Cultura “Santa María la Ribera”. De Gortari Rabiela, Hira (comp.): Memoria y encuen- Letras unam, México, 1964.
Aldama
tros: la Ciudad de México y el Distrito Federal (1824-1928). Tello Peón, Berta: Santa María la Ribera. México,
Av. R México, Departamento del Distrito Federal, Instituto de Clío, 1998.
ibera
de S
an C
Mercados Investigaciones Dr. José María Luis Mora, 1988. Ciberografía
o sm
e El Tianguis del Chopo. Nació en 1980 en el Espinoza López, Enrique: Ciudad de México. Com- www.chopo.unam.mx
pendio cronológico de su desarrollo urbano. 1521-1980. www.mexicodesconocido.com.mx/espanol/
Museo Universitario del Chopo como un espacio
México, 1991. historia/siglo_xix
de intercambio no comercial entre melómanos Henríquez Escobar, Graciela y Armando Hitzelin www.mexicocity.gob.mx
Égido: Santa María la Ribera y sus Historias. México, cona- www.cuauhtemoc.df.gob.mx
culta, inah, Museo Universitaro del Chopo, unam, 1997. www.oncetv.ipn.mx/Aguila/episodios