1. LAS CUEVAS DE ALTAMIRA Ana Sánchez de las Matas y Miriam Fernández.

2. Introducción: Cuando pensamos en la Prehistoria se nos viene a la mente imágenes de de animales pintados en las paredes y techos de las cuevas. Las cuevas mundialmente más famosas son las cuevas de Altamira, en el municipio de Santillana del Mar (Santander). Las cuevas cántabras son los ejemplos más bellos e ilustrativos que hemos podido descubrir de nuestros antepasados. Plano de Situación Acceso a la Cueva de Altamira Vida en la prehistoria

3. Poco después publicaría un artículo sobre algunos objetos prehistóricos de la provincia de Santander, donde defendía que se trataba de escenas prehistóricas. La polémica dijo que podrían haber sido otros investigadores, falsificando las pinturas, porque consideraban imposible que el hombre primitivo hubiera sido capaz de llevar a cabo un trabajo tan excepcional. Descubrimiento: El descubrimiento de la cueva fue realizado por casualidad en 1868, por Modesto Cudillas, mientras cazaba con su perro. Más tarde, se lo comunicó a Don Marcelino Sanz de Sautuola, para quien trabajaba. Sanz de Sautuola María, la hija de D. Marcelino, descubrió las pinturas.

4. Con el paso del tiempo otras cuevas similares fueron descubiertas en el sur de Francia. Las pinturas de Altamira no serían finalmente aceptadas como antiguas hasta principios de la centuria siguiente, y el reconocimiento solo le llegaría a Marcelino después de su muerte. Cueva de Lascaux, en Francia Cuevas con pinturas rupestres en el Mundo

5. Características: Los investigadores han datado la antigüedad de las imágenes de Altamira en unos 12.000 ó 15.000 años, situándose en el periodo conocido como Magdanienses. Más tarde un desprendimiento de rocas sepultó la entrada de la cueva, que quedó aislada y olvidada durante miles de años. La cueva de Altamira mide unos 270 metros de longitud y se encuentra dividida en tres zonas, un vestíbulo cerca de la salida, una gran sala decorada (de unos 18 metros de largo) donde se han encontrado las pinturas más espectaculares, y otras pequeñas ramificaciones. Mapa de la cueva de Altamira Mapa de los derrumbes en la cueva

6. Las imágenes se encuentran grabadas o dibujadas en las paredes o techos con pigmentos minerales ocres, marrones, amarillentos o negros, mezclados con aglutinantes como la grasa animal. Se aplicaron con los dedos, algún utensilio a modo de pincel y en ocasiones soplando la pintura a modo de aerógrafo. También se usó el carbón vegetal para perfilar los bordes.

7. El bisonte es el animal que más veces aparece representado, aunque también hay ciervos, jabalís, mamuts, renos, caballos, ( animales propios de climas fríos que en la actualidad están extinguidos en Europa) figuras antropomorfas y diversos símbolos. Aprovechaban los abultamientos de la roca para conferir volumen a las formas. Los elementos pertenecen a diversas épocas. Se cree que las pinturas más antiguas son las rojas, sobre las que se añadieron otras negras. El bisonte El ciervo Aprovechaban los bultos para poner volumen a las formas. El mamut El caballo

8. Lo más sorprendente de las pinturas es su expresividad. Se han encontrado signos de diferentes formas geométricas, muy abundantes en las galerías centrales y en la parte de la cueva conocida como “Cola de Caballo”, donde también hay animales pintados o grabados en color negro. Los prehistóricos pintaban a los animales, que más tarde iban a ser cazados. Formas geométricas, animales y manos Dibujos en la zona “Cola de Caballo”

9. En la actualidad el acceso a las cuevas de Altamira ha sido prohibido, para evitar que el microclima generado de los visitantes afecte a la conservación de las pinturas. Pero para hacerse una idea del original se puede visitar la Neocueva, que es una copia exacta, construida en el exterior. Otra reproducción puede disfrutarse en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid. Inauguración de la Neocueva Neocueva