El Palacio de Knossos en Creta fue el palacio más importante de la civilización minoica. Construido hace más de 3500 años, el palacio contaba con alrededor de 1500 habitaciones y fue destruido por un terremoto. Fue excavado y reconstruido parcialmente por Arthur Evans a principios del siglo XX. Algunas de las características más destacadas del palacio incluyen frescos, baños reales, almacenes subterráneos y la sala del trono.