1. El principal motivo de esta Reforma, aprobada mediante el Real Decreto Ley 3/2012, ha
sido sin duda la grave situación económica y financiera global que ha sacudido a
nuestro país con una de las tasas de desempleo más altas de Europa. En este sentido la
Reforma actual emprendida por el Ejecutivo se convierte en un nuevo paradigma de
las relaciones laborales en España enmarcada en este especial contexto económico y
socio-político.
En esta ocasión se han analizado y explicado las cuestiones más trascendentales de la
Reforma Laboral y sus aplicaciones prácticas, centradas principalmente en los cuatro
grandes bloques que han sido objeto de modificación, así como sus puntos más
conflictivos:
1. Fomento de la contratación indefinida y nuevo contrato para la formación.
2. Medidas de flexibilidad interna.
3. Novedades en la aplicación de los convenios colectivos.
4. Modificaciones en materia de despido.
Igualmente se ha analizado el nuevo equilibrio en las relaciones laborales que plantea la
denominada flexiseguridad, entendida como el conjunto de medidas que pretenden
fomentar: la empleabilidad de los trabajadores, reformando aspectos relativos a la
intermediación laboral y a la formación profesional; la contratación indefinida y otras
formas de trabajo, con especial hincapié en promover la contratación por PYMES y de
jóvenes; incentivar la flexibilidad interna en la empresa como medida alternativa a la
destrucción de empleo; y, finalmente, favorecer la eficiencia del mercado de trabajo como
elemento vinculado a la reducción de la dualidad laboral, con medidas que afectan
principalmente a la extinción de los contratos de trabajo.
Si bien es verdad, que el espíritu normativo de esta Reforma es principalmente la del
fomento del empleo con una apuesta decidida por la flexibilidad interna en las empresas,
en la corta andadura de la norma, y sin perjuicio de las modificaciones que se puedan
producir en sede legislativa, la realidad es que a corto plazo ha sido principalmente la
utilización de los mecanismos ofrecidos para la extinción de los contratos de trabajo. Es de
suponer que, a medio y largo plazo, la Reforma ahora analizada estimulará el empleo
indefinido por poner a disposición del empresario procedimientos más rápidos y sencillos
de modificación de las condiciones laborales inicialmente pactadas en función de los
cambios productivos que se puedan dar en la empresa, así como en última instancia
medidas que de facto suponen un abaratamiento del despido.
Es por ello por lo que cobra especial importancia conocer y aplicar correctamente el
nuevo marco normativo laboral, no solo en aquello que regula expresamente, sino
también sus “silencios”, aquello que no dice y que puede ser interpretado con un amplio
margen de decisión. Igualmente es importante analizar su especial régimen transitorio,
para determinar en qué casos y desde cuándo debemos aplicar la nueva normativa, todo
ello en definitiva para poder adoptar las medidas más adecuadas y eficaces que en cada
momento requiera la situación real de la empresa y de su plantilla.