El documento presenta una carta del Ministerio de Educación dirigida a los padres, madres y apoderados. En ella, se destaca la importancia de la participación de las familias en la educación de los niños y niñas para lograr mejores resultados en el aprendizaje. También se compromete el Ministerio a apoyar a las familias en esta tarea y a trabajar en conjunto con las comunidades para favorecer el desarrollo educativo de los estudiantes. Finalmente, se presenta una nueva guía de aprendizaje para orientar los estud
2. Estimados padres, madres y apoderados:
Nuestra misión es preparar a niños y niñas para la vida, para in-
tegrarse con éxito en el mundo real, sentirse seguros, acceder
a mejores oportunidades de trabajo, realizarse y ser felices. La
experiencia nacional e internacional demuestra que, cuando
los padres se involucran en la educación de sus hijos los re-
sultados de aprendizajes son mejores. La fuerte y positiva in-
fluencia que ustedes pueden ejercer sobre la educación y los
aprendizajes de sus hijos es apoyada comprometidamente por
este Ministerio, de manera que no están solos en esta desafian-
te tarea.
La convicción que el futuro de nuestros estudiantes, hijas e hi-
jos se juega hoy, nos mueve a ponernos a disposición de las
familias y a comprometernos con ustedes, como un Ministerio
que impulsa a la comunidad completa para favorecer el mejor
desarrollo educativo.
Cada niña y niño que tiene la oportunidad de soñar, imaginar y
emocionarse al escuchar textos entretenidos y variados, segu-
ramente, llegará a ser un buen lector. El acto de leer debe llegar
a ser una práctica cultural cercana, con sentido comunicativo y
vinculado a nuestras necesidades cotidianas. Así, descubrirán
que la lectura es un apoyo fundamental para la vida y para en-
tender los eventos del mundo que habitan.
2 Cuenta Conmigo
3. Conversar, leer en voz alta, plantearse preguntas y buscar po-
sibles respuestas constituyen apoyos tanto para el aprendizaje
del lenguaje, como del cálculo y el razonamiento matemático,
de la ciencia, del arte. En las actividades cotidianas del diario
vivir está la oportunidad de acompañar a nuestros hijos e hijas
para que desarrollen exitosamente sus capacidades para pen-
sar, investigar, descubrir y hacer.
Esta nueva cartilla CUENTA CONMIGO 4 orienta los aprendiza-
jes desde la educación parvularia hasta cuarto básico, con su-
gerencias entretenidas y simples para estimular el pensamien-
to y el dominio del lenguaje. Incluimos una selección de textos
literarios para que todos los niños y niñas de Chile tengan la
oportunidad que sus padres y familias les lean cada noche y los
inviten a soñar y aprender.
¡Esta es la guía para que sus hijas e hijos sientan que cuenten
con usted, y para que usted sepa que cuenta con nosotros!
Afectuosamente,
Yasna Provoste Campillay
Ministra de Educación
Guía de Aprendizaje •3
4. Índice
APRENDER A LEER, ESCRIBIR Y CALCULAR 5
Guía de aprendizajes
La Matemática 8
El Lenguaje: Lectura 15
El Lenguaje: Escritura 21
Para leer en familia 25
Adivina, adivina… ¿Qué será? 26
Rimas, canciones y poemas 27
Cuentos: Para leer y contar 33
Completación de estudios para adultos 55
4 Cuenta Conmigo
5. APRENDER A LEER, ESCRIBIR Y CALCULAR
T odos los niños y niñas son diferentes y tienen ritmos de apren-
dizaje distintos: más rápidos o más lentos, pero TODOS pue-
den aprender. Cuando su hija o hijo ingresa a un establecimiento
escolar, sabe mucho acerca de su familia, del lugar donde vive, del
mundo que lo rodea, y tiene gustos determinados. Por ejemplo,
a su hija le gustan los números y el dibujo, pero su hijo prefiere la
lectura y la música.
En la escuela se inicia un aprendizaje muy importante: apren-
der a leer, escribir y calcular, conocimientos a través de los cuales
podrá acceder a todos los demás. Cada familiar -madre, padre,
abuelas y abuelos, hermanas y hermanos- puede ayudar al niño
y niña a aprender día a día en un ambiente de cariño y de alegría
por sus avances.
LO PRIMERO ES HABLAR Y ESCUCHAR
Cada ser humano necesita comunicarse desde que nace. En el
hogar aprendemos a hablar y escuchar, y así podemos conocer-
nos mejor a nosotros mismos y a otros, entender el mundo que
nos rodea y desarrollar el pensamiento.
Las conversaciones y lecturas familiares permiten a los más pe-
queños ir conociendo el mundo de las palabras y los números,
y entendiendo cada vez mejor sus significados y sus relaciones.
Cuando usted habla con su hija o hijo, escucha y responde con
afecto sus preguntas, ideas y opiniones, estará ayudando a que
sus futuros aprendizajes escolares sean mejores.
Guía de Aprendizaje •5
6. LUEGO… APRENDEMOS A LEER Y ESCRIBIR
La mayoría de las personas aprende a leer y escribir en la es-
cuela, en un proceso gradual, en el que se van conociendo las le-
tras, sonidos, palabras y oraciones; los números, signos y símbolos;
cuentos, poemas, problemas para resolver, etc.
Las imágenes, palabras, números y signos matemáticos que
encontramos en folletos publicitarios, revistas, dia-
rios, cuentas de servicios, textos escolares o libros
diversos, son puertas de entrada a la lectura y a la
escritura, y permiten descubrir que hablar y escu-
char, y leer y escribir, son como las dos caras de
una moneda.
Disfrutar en familia de bellas ilustraciones y variadas lecturas;
buscar información sobre plantas, animales, insectos; calcular
cuánto dinero se necesita para comprar un helado para cada uno,
son actividades que nos ayudan a entender de manera práctica
por qué la lectura y la escritura son necesarias para la vida.
LA MATEMÁTICA
Cada día, en el hogar, la escuela o el trabajo, debemos realizar
variados cálculos matemáticos (mentales o escritos) para solucio-
nar temas o problemas que nos preocupan. Por ejemplo, revisar
un vuelto, medir ingredientes de una receta, comparar precios,
medir y cortar, calcular el gasto semanal en locomoción, ubicar-
nos en un plano para encontrar un lugar.
El lenguaje de la matemática utiliza números, figuras, signos
y símbolos, los que permiten resolver problemas. La lectura y la
6 Cuenta Conmigo
7. escritura también están presentes en la matemática, porque hay
que leer los problemas para entenderlos y luego escribir y desa-
rrollar los pasos utilizados para encontrar las soluciones.
Cómo aprender matemática
El aprendizaje de la matemática, como todo aprendizaje, es un
proceso gradual, ya que los nuevos conocimientos se apoyan en
los anteriores. Por ejemplo, primero se aprenden los números del
1 al 9, porque esa es la base para aprender los siguientes y sus
combinaciones.
En el hogar existen muchas oportunidades para aprender y
desarrollar los conocimientos matemáticos básicos. Por ejemplo,
saber la hora de un programa favorito; ver en el calendario cuán-
tos días faltan para un cumpleaños; comprar los ingredientes para
hacer un postre.
PARA AYUDAR A SUS NIÑAS Y NIÑOS a aprender matemática,
invítelos a jugar con números y formas, y a plantearse preguntas y
problemas que los hagan pensar y encontrar soluciones.
Guía de Aprendizaje •7
9. Si su hija o hijo está terminando Kinder
• Dice en orden los números del 1 al 20.
• Cuenta correctamente un grupo de hasta 20 objetos.
• Identifica números en su entorno y puede copiarlos.
• Reconoce que la cantidad de objetos de un conjunto dismi-
nuye o aumenta si se quitan o agregan objetos.
• Describe y compara objetos o formas geométricas en cuan-
to a su forma, tamaño, longitud y grosor.
• Ubica objetos que están arriba de, debajo de, delante de o
atrás de otro objeto.
• Ubica correctamente los objetos que están a su lado dere-
cho o izquierdo.
Entonces, usted puede:
æ Preguntarle qué número viene después del 3, del 7, etc.; ju-
gar a lanzar un dado para reconocer en qué número cayó.
æ Pedirle que cuente lápices, los cubiertos que se deben po-
ner en la mesa, el número de calcetines lavados, los árboles
de la plaza o del jardín.
æ Aprovechar la calle para reconocer los números en calles y
microbuses; pedirle que anote un teléfono o una dirección.
æ Sacar frutas de un frutero y preguntarle si ahora hay más o
menos que antes.
æ Ayudarlo a comparar y descubrir figuras geométricas en su
entorno (ruedas, baldosas, azulejos).
æ Pedir que diga qué objetos están a la derecha o a la izquier-
da, o arriba-abajo, detrás-delante.
Guía de Aprendizaje •9
10. Si su hija o hijo está terminando 1º Básico
• Dice correctamente los números del 1 al 100, uno tras otro.
• Cuenta correctamente las cantidades de dinero o grupos de
hasta 100 objetos, agrupando de a 2, 5 ó 10.
• Reconoce los números del 0 al 100 en su entorno (letreros,
avisos), puede escribirlos y entiende la cantidad que repre-
sentan.
• Estima cantidades de objetos (hasta 100) y comprueba su
estimación contándolos.
• Resuelve problemas de sumas y restas (entre 0 y 100), usan-
do objetos o dibujos.
• Representa elementos de su entorno combinando figuras
geométricas.
• Sigue correctamente una trayectoria a partir de instruccio-
nes verbales o de un plano simple.
Entonces, usted puede:
æ Pedir que diga los números de 10 en 10, luego sigue usted y
se van turnando.
æ Decir que forme pilas de a 5 para contar láminas repetidas o
las matitas de un almácigo.
æ Pedir que agrupe monedas según su valor ($1, $5, $10, $50
y $100).
æ En un viaje en micro o un paseo al parque, preguntarle
cuántas personas cree que hay, sin contarlas; luego, cuenta
y comprueba.
æ Ayudarle en la confección de una maqueta de la casa o de la
escuela con cajas de fósforo vacías.
Es muy importante que nuestras niñas y niños estudien en
un lugar sin ruido ni TV, para que se concentren mejor.
10 Cuenta Conmigo
11. SI SU HIJA O HIJO ESTÁ TERMINANDO 2º BÁSICO
• Dice correctamente tramos de números entre 1 y 1000, de 1
en 1, de 10 en 10, de 100 en 100.
• Cuenta correctamente cantidades de dinero en monedas
de $1, $5, $10, $50 y $100.
• Reconoce los números de 3 cifras que hay en su entorno,
puede escribirlos y entiende lo que representan.
• Estima cantidades de dinero, longitudes en metros y centí-
metros. Resuelve problemas utilizando sumas y restas.
• Arma figuras geométricas usando otras figuras.
• Dibuja e identifica objetos vistos desde distintas posicio-
nes.
• Describe la ubicación y trayectos de personas u objetos o
los dibuja mediante un plano simple.
Entonces, usted puede:
æ Jugar a decir cifras como 130, 230, 330… ó 523, 533, 543…
y pedirle que agrupe y cuente un conjunto de monedas.
æ Plantearle problemas como: ¿Nos alcanza con $2.000 para
comprar 3 cuadernos? ¿Cuánto vuelto nos darán si paga-
mos 2 pasteles de $230 con $1.000?
æ Pedir que arme figuras geométricas usando 2 triángulos de
papel (cuadrado, romboide).
æ Pedir que dibuje un vaso visto de lado y desde arriba o bien,
un esquema de cómo llegar desde la entrada de la escuela
a su sala, de su casa a la de un familiar, etc.
Demuestre siempre su interés por lo que niñas y niños están
haciendo, y escuche y responda sus preguntas con cariño
Guía de Aprendizaje • 11
12. SI SU HIJA O HIJO ESTÁ TERMINANDO 3º BÁSICO
• Dice correctamente tramos de números entre 0 y 1.000.000,
de 1.000 en 1.000, de 10.000 en 10.000 y de 100.000 en
100.000.
• Cuenta correctamente cantidades de dinero representadas
con billetes de $1.000, $2.000, $5.000 y $10.000, haciendo
agrupaciones y utilizando sumas y multiplicaciones.
• Registra e interpreta información representada en tablas.
• Estima cantidades de objetos y medidas de longitud y peso.
Confirma su estimación contando, midiendo o calculando.
• Reconoce características de los triángulos; usando algunos
cuerpos geométricos, arma otros.
• Resuelve problemas en que se utiliza la multiplicación.
Entonces, usted puede:
æ Decir cifras como 12.000, 13.000, y pedirle que continúe. Y
cifras mayores, como 125.000, 225.000, 325.000…
æ Instalar un pequeño almacén para jugar a comprar y ven-
der.
æ Reunir a la familia y jugar Monopolio, Metrópolis o La gran
ciudad, que utilizan cifras mayores.
æ Ayudarlo a usar tablas de sus textos escolares, a comparar
distancias y a registrar su altura 4 veces al año para ver cómo
crece.
æ Usando cubos, pedir que arme figuras geométricas.
Valore todos los esfuerzos y premie sus lo-
gros. Aproveche los errores como una ocasión
para que aprendan mejor y sin temores.
12 Cuenta Conmigo
13. SI SU HIJA O HIJO ESTÁ TERMINANDO 4º BÁSICO
• Dice correctamente tramos de números entre 0 y 1.000.000,
de 1 en 1, de 10 en 10, de 100 en 100 y de 1.000 en 1.000.
• Cuenta correctamente cantidades de dinero representadas
con monedas y billetes de $100, $500, $1.000, $2.000, $5.000
y $10.000, haciendo agrupaciones y utilizando sumas y mul-
tiplicaciones.
• Interpreta la información que aparece en tablas y gráficos
de barras.
• Hace estimaciones en torno al tiempo (horas y minutos), y
confirma su estimación midiendo o calculando (con sumas,
restas y multiplicaciones).
• Reconoce características de figuras geométricas de 4 lados,
como cuadrados, rectángulos y rombos.
Entonces, usted puede:
æ Solicitar que cuente un rango mayor de números tanto de
monedas como de billetes ($2.000, $2.350, $3.995…).
æ Pedir que diga cifras a partir de 600.050. ¿Qué número si-
gue?
æ Utilizar una cuenta de servicio (agua) y ayudarlo a interpre-
tar el gráfico de barras para ver en qué meses se consumió
más o menos agua.
æ Ayudarle a hacer un gráfico del tiempo en que ven TV o
leen.
æ Preguntar por las diferencias entre un cuadrado y un rectán-
gulo o un cuadrado y un rombo.
Utilice diarios y revistas, porque encontrará
muchos números y cantidades útiles para jugar
y aprender.
Guía de Aprendizaje • 13
14. Ayude a niñas y niños a organizar el tiempo
para estudiar, hacer tareas, jugar y compartir
con la familia y con personas de su edad.
14 Cuenta Conmigo
15. El lenguaje: Lectura
Saber leer significa poder descifrar correctamente las palabras es-
critas y comprender el significado de esas palabras.
Guía de Aprendizaje • 15
16. SI SU HIJA O HIJO ESTÁ TERMINANDO KINDER
• Escucha con atención narraciones contadas o leídas por un
adulto.
• Dice o canta trabalenguas, adivinanzas, canciones y rondas.
• Reconoce palabras que riman (mariposa-preciosa).
• Muestra interés por saber qué dicen los libros, revistas o dia-
rios y pregunta por letras o palabras específicas.
• Reconoce las vocales en distintas palabras.
• Asocia algunas letras con su sonido y puede agrupar pala-
bras que comienzan con la misma letra.
• Lee algunas palabras significativas como su nombre, el de
algún familiar o el de la calle en que vive.
Entonces, usted puede:
æ Contarle o leerle cada día un poema, una ronda, una can-
ción, un cuento.
æ Leerle las mismas historias, porque disfruta las repeticiones.
æ Pedirle que haga rimas con palabras sencillas (gato-pato).
æ Mostrarle las vocales iniciales de una palabra (avión, auto,
ala) o las que aparecen dentro de las palabras (panadería,
mariposa, uva).
æ Pedirle que recite una poesía y aplaudir sus logros.
æ Describirle una foto o dibujo y pedir que le cuente qué otras
cosas hay allí.
Pregunte siempre cómo le fue y escuche lo
que le cuenta, sin interrumpir ni criticar.
16 Cuenta Conmigo
17. SI SU HIJA O HIJO ESTÁ TERMINANDO 1º BÁSICO
• Conoce todas las letras del alfabeto en sus diversas combi-
naciones y sus secuencias.
• Distingue diferentes tipos de materiales escritos (diarios, re-
vistas, avisos, cartas, etc.).
• Lee en voz alta palabras y oraciones y entiende su significa-
do.
• Lee nombres de calles, títulos de cuentos, adivinanzas y
otros textos.
• Comprende lo que lee y lo cuenta con sus propias palabras.
Entonces, usted puede:
æ Leerle textos en voz alta y pedir que lea a
coro con usted.
æ Pedir que le cuente qué pasó al principio o al final de un
cuento.
æ Organizar momentos de lectura familiar, con turnos para
leer.
æ Pedir su ayuda para medir las cantidades de una receta (ta-
zas, cucharadas), hacer una lista de compras o anotar las re-
glas de un juego.
æ Recortar palabras (nombres de animales, personas, objetos)
de diarios y revistas y pedir que haga el dibujo correspon-
diente.
Dedique 15 minutos diarios a la lectura
en voz alta de noticias, textos literarios
u otros. Será un momento familiar gra-
to y entretenido.
Guía de Aprendizaje • 17
18. SI SU HIJA O HIJO ESTÁ TERMINANDO 2º BÁSICO
• Lee textos sencillos en voz alta y con expresión, usando en-
tonación adecuada para las preguntas, exclamaciones y afir-
maciones.
• Sigue instrucciones sencillas (receta de cocina, reglas de un
juego).
• Disfruta leyendo textos que responden a sus gustos o inte-
reses.
• Demuestra que comprende lo que lee al contarlo, comen-
tarlo o dramatizarlo. También puede describir características
de personajes, el lugar en que ocurre una historia y los he-
chos más importantes.
• Al hablar y escribir, incorpora nuevas
palabras que ha aprendido en sus lec-
turas.
Entonces, usted puede:
æ Pedirle que lea o recite en voz alta un texto que le guste y
aplaudir sus avances.
æ Jugar en familia algunos juegos que requieren entender re-
glas sencillas; pedir su ayuda para realizar una receta preferi-
da.
æ Leer un cuento de 1 página en conjunto y preguntar sobre
los hechos importantes, qué personajes aparecen y cuál le
gustó más.
Si en la escuela hay una biblioteca,
es posible que pueda pedir un libro
para leer en casa el fin de semana.
18 Cuenta Conmigo
19. SI SU HIJA O HIJO ESTÁ TERMINANDO 3º BÁSICO
• Lee textos más largos, como cuentos sencillos y partes de
novelas infantiles.
• Descubre el significado de una palabra que no conoce, a
partir de las otras palabras del texto.
• Lee con distintos propósitos (entretenerse, investigar, infor-
marse…).
• Identifica las ideas más importantes de los textos que lee.
• Saca conclusiones y opina acerca de lo que lee.
Entonces, usted puede:
æ Tener en casa o pedir en la biblioteca de la escuela o de la
comuna, algunos libros de cuentos o poemas, que puedan
ser leídos en familia.
æ Ayudarle a entender y buscar en un diccionario el significa-
do de palabras nuevas y pedir que las use en otras oracio-
nes.
æ Pedirle que describa algunas características de personajes.
æ Ayudarle a ubicar en un mapa un país, una ciudad, una ca-
lle.
Dedique algunos momentos para que
cada uno cuente qué leyó, una anécdota
divertida o una tarea interesante.
Guía de Aprendizaje • 19
20. SI SU HIJA O HIJO ESTÁ TERMINANDO 4º BÁSICO
• Lee textos cada vez más largos, como cuentos, novelas para
niños, etc. Reconoce las ideas más importantes y también
los detalles de lo leído.
• Utiliza estrategias que facilitan una mejor lectura.
• Lee por iniciativa propia diversos textos de su interés y com-
parte los conocimientos que adquiere a través de la lectu-
ra.
• Reconoce emociones y valores de los personajes de los tex-
tos que lee.
• Demuestra su comprensión de lo que lee a través de
expresiones artísticas (dibujos, obras de teatro,
etc.) y comenta sus lecturas con otros.
Entonces, usted puede:
æ Leerle y pedir que le lea a usted, cuentos,
capítulos de novelas, noticias del diario.
æ Comentar sobre sus lecturas, autores y personajes: cuáles le
han interesado más y por qué.
æ Reconocer y describir emociones y valores de los personajes
y de seres reales de su entorno.
En la biblioteca que está cerca de su casa
o de la escuela hay libros entretenidos
para los niños y para usted.
¡Recuerde que en muchas bibliotecas
hay computadores e Internet!
20 Cuenta Conmigo
21. El lenguaje: Escritura
Saber escribir significa hacer las letras correctamente para formar
palabras, y crear nuevos textos para ser leídos por uno mismo o
por otros.
Guía de Aprendizaje • 21
22. Usted puede apoyar el aprendizaje de la escritura a
través de:
æ Tener en el hogar hojas sueltas, cuadernos y lápices para que
“juegue a escribir” letras y palabras, haga dibujos y pinte.
æ Disponer de algunos materiales (revistas, diarios) que le per-
mitan descubrir, recortar, pegar, pintar y copiar o escribir le-
tras y palabras.
æ Pedir que escriba, según su edad, letras, palabras, frases, pe-
queños cuentos o poemas, que lea en voz alta lo que escri-
bió y que lo muestre a otras personas para ver si entienden
lo que quiso decir.
æ Leer en conjunto lo que escribió y felicitar por los avances.
æ Pedir que le escriba una carta a un ser querido que vive le-
jos.
æ Ayudarlo a corregir sus errores con cariño, porque está
aprendiendo.
æ Apoyar en el uso y consulta de libros; por ejemplo, enseñar-
le que las palabras se buscan en el diccionario por orden
alfabético.
æ Mantener un “diario mural” (de cartón, cholguán, cartulina,
plumavit) para que cada uno ponga sus textos escritos, listas
de compras, recados, etc.
22 Cuenta Conmigo
23. SI SU HIJA O HIJO ESTÁ TERMINANDO KINDER
• Toma correctamente el lápiz para dibujar o pintar.
• Reconoce las expresiones: izquierda, derecha, arriba, abajo,
delante y atrás.
• Traza líneas curvas y rectas.
• Copia letras, signos y símbolos.
SI SU HIJA O HIJO ESTÁ TERMINANDO 1º BÁSICO
• Utiliza con cierta destreza lápices, tijeras, plumones, para
trazar recorridos, recortar, pintar, hacer guirnaldas, etc.
• Escribe algunas letras, palabras y líneas, que pueden ser leí-
das por otros.
• Escribe en forma pareja y deja espacios entre letras y entre
palabras.
SI SU HIJA O HIJO ESTÁ TERMINANDO 2º BÁSICO
• Escribe correctamente todas las letras del alfabeto.
• Une adecuadamente las letras y separa unas palabras de
otras.
• Escribe textos simples de varias líneas, como saludos, reca-
dos e invitaciones.
• Al escribir, sabe a quién le escribe y qué va a decir.
• Presenta su texto en forma ordenada y fácil de leer para los
demás.
• Con ayuda, puede corregir los errores ortográficos de sus
textos escritos.
• Respeta normas ortográficas básicas, como el uso de pun-
tos, mayúsculas y de la letra b en las combinaciones mb
(cambio), br (abrazo) y bl (blanco).
Guía de Aprendizaje • 23
24. SI SU HIJA O HIJO ESTÁ TERMINANDO 3º BÁSICO
• Escribe con letra clara para que sus textos puedan ser leídos
por otros.
• Escribe frases, oraciones y textos sencillos, como títulos, avi-
sos, versos, pequeñas cartas, listas de invitados o de útiles
escolares, etc.
• Escribe respetando normas ortográficas, como uso del pun-
to seguido y punto aparte, signos de interrogación y excla-
mación y uso correcto de letras b, v, j, g, r y rr.
SI SU HIJA O HIJO ESTÁ TERMINANDO 4º BÁSICO
• Escribe variados tipos de textos, como cartas, noticias, cuen-
tos, diálogos, informes de tareas o proyectos que ha realiza-
do, descripciones de personas, objetos y lugares, etc.
• Planifica lo que va a escribir, determinando a quién le escri-
birá, sobre qué y para qué.
• Escribe textos de varios párrafos, claros y comprensibles
para otros.
• Revisa los textos que escribe, preocupándose del contenido
y de la forma (ortografía, gramática y caligrafía). Si es nece-
sario, los corrige y reescribe.
• Usa correctamente el acento y la coma en los textos que
escribe.
Cada familia y grupo familiar es muy importante
para la educación de sus niñas y niños, quienes re-
quieren tanto de su apoyo como el de la escuela
para avanzar con éxito en sus aprendizajes.
24 Cuenta Conmigo
26. Adivina, adivina… ¿Qué será?
Un roble con doce ganchos, Yo tengo calor y frío
cada gancho con su nido, y no frío sin calor
cada nido con sus huevos, y sin ser ni mar ni río,
cada huevo con su nombre. peces en mí he visto yo.
El año La sartén
Soy santa y no bautizada Llevo mi casa en los hombros,
y llevo conmigo el día, camino con una pata,
soy muy gorda y colorada y voy dejando mi huella,
y tengo la sangre fría. como una cinta de plata.
La sandía El caracol
Tiene yemas y no es huevo,
tiene copa y no es sombrero,
tiene hojas sin ser libro.
El árbol
Libro por libro,
hoja por hoja,
¿cuál es la planta Todos pasan sobre mí
que da fruto en la hoja? y yo no paso por nadie;
todos preguntan por mí,
yo no pregunto por nadie.
La tuna
El camino
Doy al cielo resplandor
cuando deja de llover:
abanico de colores
que nunca podrás coger.
El arcoiris
26 Cuenta Conmigo
27. Rimas, Canciones y Poemas
DEBAJO DE UN BOTÓN
Debajo de un botón, ton, ton,
que tiró Martín, tin, tin,
había un ratón, ton, ton,
era chiquitín, tin, tin.
Era chiquitín, tin, tin,
ese ratón, ton, ton,
debajo del botón, ton, ton,
que tiró Martín, tin, tin.
LA NARANJITA
Naranjita de oro,
de oro y de sol;
pepita de plata,
diente de león.
Un niño goloso
la iba a comer
y la naranjita
se puso a correr.
Rodar y rodar
y el gatito negro
la vino a pillar.
Guía de Aprendizaje • 27
28. Pajarito tan bonito
Pajarito tan bonito,
¿dónde vas?
A la era verdadera
pin pon fuera.
Este niñito compró un huevito
Este niñito compró un huevito;
este lo puso a asar,
este le echó la sal,
este lo revolvió
y este perro viejo y gordo
se lo comió.
La gallina Francolina
La gallina Francolina
puso un huevo en la cocina.
Puso uno, puso dos,
puso tres, puso cuatro,
puso cinco, puso seis,
puso siete, puso ocho
y comió pan de bizcocho.
28 Cuenta Conmigo
29. Los elefantes Los pollitos dicen
Un elefante se balanceaba Los pollitos dicen
sobre la tela de una araña. pío, pío, pío,
Como veía que resistía, cuando tienen hambre,
fue a buscar otro elefante. cuando tienen frío.
Dos elefantes se balanceaban La gallina busca
sobre la tela de una araña. el maíz y el trigo,
Como veían que resistía, les da la comida
fueron a buscar otro elefante. y les presta abrigo.
Tres elefantes se balanceaban…
Caballito blanco
Caballito blanco,
llévame de aquí,
llévame a mi pueblo
donde yo nací.
Tengo, tengo, tengo,
tú no tienes nada,
tengo tres ovejas
en una manada.
Una me da leche,
otra me da lana,
otra mantequilla
para la semana.
Guía de Aprendizaje • 29
30. Canción
Fryda Schultz de Mantovani
(Argentina)
Se apagaron las estrellas.
la luna duerme…
para que no se caiga,
¿quién la sostiene?
En el agua del río
puede caerse.
¡Cuidado, luna!
que el río tiene
piedritas de colores,
algas y peces.
Te morderían toda
para comerte…
¡Cuidado, luna!
¿Quién te sostiene?
Si te quedas dormida
vas a caerte.
30 Cuenta Conmigo
31. Mis tres secretos
Vicente Ortiz
Hay gente que sabe mucho
y dice cosas brillantes,
pero yo sé algunas cosas
que nadie supo antes.
Mi primer conocimiento
es un secreto muy grande,
porque descubrí que el sol
es un damasco gigante.
Yo descubrí que la luna
es una fuente de leche
donde beben los planetas
cada vez que amanece.
Y también que las estrellas
son pececitos de fuego
que hicieron su dormitorio
para dormir en el cielo.
Esos son mis tres secretos
y no hay otro que los sepa,
porque solo yo he volado
en la cola de un cometa.
Guía de Aprendizaje • 31
32. El ave Arrullo
Gloria Curihuinca1 Robinson Saavedra (Chile)
Un canto bonito Arrorró mi niña,
escucho yo. Un canto arrorró mi rosa
de ave y belleza. que te trae el sueño
Palpitar de un canto. una mariposa.
Arrorró mi niña,
arrorró mi sol.
¡Duérmete en la cuna
La plaza y el tiempo de mi corazón!
Ángel Leviman2
Eras muy joven.
Pasaron las primaveras,
llegaron los inviernos,
con ellos la tristeza.
1
4º Básico, escuela Fray Camilo Henríquez, San Joaquín, Santiago.
2
4º Básico, escuela Fray Camilo Henríquez, San Joaquín, Santiago.
32 Cuenta Conmigo
34. LA HORMIGUITA Y EL
RATÓN PÉREZ
(Cuento tradicional)
H abía una vez una hormiguita muy linda y trabajadora, que
todos los días salía a barrer las hojas de su vereda.
Un día encontró una moneda grande de color dorado y la reco-
gió. Terminó de barrer y entró muy contenta a su casa, pensando
qué podría hacer con esa moneda nuevecita.
Se sentó en la silla mecedora y entre balanceo y balanceo se
puso a pensar.
De tanto pensar, se quedó dormida y soñó que iba a la farmacia.
La señora María estaba abriendo unas cajas de color plateado, lle-
nas de unas maravillosas cajitas con pintura para los labios y pin-
tura para los ojos. La hormiguita se despertó y dijo en voz alta:
-¡Ya sé lo que voy a comprar con esta moneda!
Se lavó la cara, se peinó y salió muy apurada. Cuando llegó a
la farmacia, la señora María estaba ordenando muchas cajitas de
todos colores.
-¡Hola, Hormiguita! ¿Estás enferma? Aquí tenemos remedios
para todo.
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35. -Buenas tardes, señora María. No, no estoy enferma. Lo que
pasa es que encontré una moneda frente a mi casa y quiero com-
prar un brillo para mis labios y un lápiz verde para mis ojos.
-Aquí tienes, Hormiguita. Te vas a ver muy bonita.
-Adiós y muchas gracias -dijo la Hormiguita. Me voy volando,
porque voy a pasar a la librería también.
La librería estaba abierta y después de mucho mirar y pregun-
tar, compró un hermoso lápiz con tinta dorada y muchas hojas de
papel adornado con flores.
Llegó a su casa y puso el espejo en el patio para tener mucha
luz. Se pintó y después se puso un vestido de color verde con una
cinta roja.
Estaba tan contenta, que se asomó a la ventana para ver a todos
los que pasaban y también para que todos pudieran ver lo feliz y
bonita que estaba.
Cuentos para leer y contar 35
36. Pasó un caballo blanco, con una manchita negra en la frente y
le dijo:
-Buenos días, Hormiguita, ¿quieres casarte conmigo?
-Primero quiero escuchar cómo es tu canto -dijo la Hormigui-
ta.
- ¡Hiiiiiiiiiiiiii! -relinchó el caballo.
-¡No, no, no, no, no! ¡Sigue tu camino, que me asustas y me
espantas!
Y el caballo se fue muy triste, caminando a paso lento.
Pasó un chancho muy elegante.
-Buenos días, Hormiguita, ¿quieres casarte conmigo?
-Primero quiero escuchar cómo es tu canto -dijo la Hormigui-
ta.
-Oinc, oinc, -dijo el chancho, mientras agitaba su colita de pura
felicidad.
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37. -¡No, no, no, no, no! ¡Sigue tu camino que me asustas y me
espantas!
Y el chanchito se fue muy triste, con las orejas caídas y la colita
enrollada.
Por la vereda del frente venía un perro peludo.
-Buenos días, Hormiguita, ¿quieres casarte conmigo?
-Primero quiero escuchar cómo es tu canto -dijo la Hormiguita.
-¡Guau, guau, guau! -ladró el perro.
-¡No, no, no, no, no! ¡Sigue tu camino que me asustas y me
espantas!
Y el perro peludo se fue enojado, con cara de estar persiguien-
do a un gato.
A lo lejos, la Hormiguita vio venir una mancha de todos colo-
res. Cuando estuvo más cerca, se dio cuenta que era un gallo con
una gran cola de plumas verdes.
-Buenos días, Hormiguita, ¿quieres casarte conmigo?
-Primero quiero escuchar cómo es tu canto -dijo la Hormiguita.
-Quiquiquí, quiquiriquí, -cantó feliz el gallo, como si estuviera
amaneciendo.
-¡No, no, no, no, no! ¡Sigue tu camino que me asustas y me
espantas!
Y el gallo dio unos pequeños picotazos a las malezas y se fue
muy orgulloso.
Estaba haciéndose tarde. La Hormiguita iba a cerrar la ventana,
cuando vio que venía un ratón muy elegante, con un sombrero que
tenía una pluma roja.
-Buenos días, Hormiguita, ¿quieres casarte conmigo?
-Primero quiero escuchar cómo es tu canto -dijo la Hormiguita.
-Iii, iii, iii, -susurró el ratoncito.
-¡Este canto sí que me gusta mucho! ¿Cuál es tu nombre?
Cuentos para leer y contar 37
38. -Me llamo Ratón Pérez y hace poco que llegué del campo.
-Bueno, Ratón Pérez, acepto y me caso contigo.
La Hormiguita fue a buscar el lápiz y el papel que había com-
prado.
-Mira, Ratón Pérez, tengo un lápiz de tinta dorada y hojas
adornadas con flores. ¿Escribamos las invitaciones para nuestros
amigos y amigas?
El Ratón dijo que sí y juntos hicieron una lista con los nombres
y escribieron las invitaciones a su casamiento. En la fiesta todos
estaban contentos, pero los que estaban más felices eran la Hor-
miguita y el Ratón Pérez, que bailaron toda la noche.
Y este cuento pasó por un zapatito roto
y por una matita de porotos
y mañana te cuento otro.
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39. EL BURRO CARGADO
(Cultura atacameña)
U n burro cargado con un saco de cuta (sal) tuvo una vez que
pasar un río. Al llegar al medio del río tropezó y cayó al puri
(agua). Cuando se levantó, su carga se había puesto mucho más li-
viana, pues una gran parte de la cuta se había
deshecho en el puri.
“Bueno es saberlo para otra vez”, se dijo el
burro, que se llenó de alegría.
Al día siguiente tuvo el burro que con-
ducir un saco de esponjas que no era muy
pesado. Al pasar de nuevo el río, se echó inten-
cionalmente en el puri, creyendo así alivianar su
carga, pero estaba muy equivocado.
Las esponjas chuparon tanta puri, y se
pusieron tan pesadas, que el burro a
duras penas pudo levantarse y con-
tinuar su camino.
Cuentos para leer y contar 39
40. EL CARACOL Y
EL GUSANO
U n día de verano, un caracol asomó sus cachitos y miró el cami-
no plateado que había dejado durante la noche.
-Miren, -dijo en voz alta para que todos lo escucharan- aunque
anoche caminé tanto, ahora podría correr varias cuadras.
Estiró su cuerpo y sus cachitos crecieron y crecieron. Después
volvió a guardarse en su casita, porque a esa hora barrían el jardín
y no quería que le llegara un escobazo.
Casi se había quedado dormido, cuando sintió que alguien es-
taba llorando cerca de él.
-Vaya -dijo con voz muy suave-, ¿quién anda por aquí?
-Soy yo -dijo un gusanito. Un terremoto derrumbó mi casa y
salí volando por el aire. Estoy muy asustado y no puedo encontrar
a mi familia.
-Bueno, bueno -dijo el caracol- no tengas miedo, porque yo te
voy a acompañar y estoy seguro de que encontraremos a tu fami-
lia.
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41. Estiró uno de sus cachitos para hacerle un ca-
riño en la cabeza y cerró los ojos para pensar.
-A ver, a ver, veamos qué puede haber pa-
sado -dijo el caracol. Hmmm, si hubiera
habido un terremoto, yo también lo ha-
bría sentido, aunque como los caracoles
tenemos la casa puesta, estamos muy
protegidos…
-Señor caracol, ¿usted cree que
vamos a encontrar a mi familia?
Cuentos para leer y contar 41
42. -Sí, por supuesto -respondió el caracol- haciéndole otro ca-
riñito. Hmmm... Cuando salí anoche, encontré una montaña de
tierra, porque el señor jardinero iba a plantar un árbol… Creo que
él rompió tu casa sin darse cuenta.
-¿Y qué podemos hacer ahora? -preguntó el gusanito.
-Bueno -dijo el caracol- creo que tu familia debe estar en esa
montaña. Sígueme, pero ten cuidado de no perderte, porque yo
camino muy rápido…
Por fin llegaron a la inmensa montaña y el caracol y el gusanito
se pusieron muy contentos.
-¡Mami, mami, aquí estoy con el señor Caracol! -gritó muy
fuerte el gusanito, para que su familia lo escuchara.
Y enterró su cabeza y corrió por la montaña de aquí para allá
y de allá para acá, hasta que encontró unas huellas de pies de gu-
sano.
-¡Mami, papi, soy yo! ¡Estoy aquí!
Y toda su familia salió a recibirlo y abrazarlo,
porque por fin se habían encontrado.
El gusanito les contó que el señor
Caracol lo había ayudado a llegar
hasta allí, y toda la familia Gusánez
salió para abrazarlo y darle las gracias.
-Estoy muy contento de que por fin se
hayan reunido -dijo el Caracol- pero ustedes
habrían hecho lo mismo… En este jardín to-
dos somos buenos vecinos.
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43. PERICO DE
LOS
PALOTES
(Cuento tradicional)
H ace muchos años vivía una viuda con su hija en medio de
un bosque. Amasó gran cantidad de harina para hacer pan y
como le sobró masa, hizo cinco empanadas. Las sacó del horno y
las dejó sobre la mesa, para que se enfriaran.
-En un rato más serán otras –dijo la mujer.
Ella quería decir que estarían menos calientes y podrían co-
merlas, pero su hija estaba escuchando y pensó: “Bueno, si van a
ser otras, las voy a comer ahora”.
Cuando llegó la hora de almorzar, la madre llamó a su hija:
-Lía, trae las empanadas, ahora estoy segura de que serán
otras.
La hija fue a ver, pero solo encontró la fuente vacía.
-No, todavía no son otras.
-¿Cómo? ¿Ninguna de ellas? –dijo la madre.
-No, ninguna.
-Bueno, aunque no sean otras, igual las comeremos ahora.
Cuentos para leer y contar 43
44. -No es posible, me las he comido todas y tú no podrás comer-
las mientras no sean otras.
La madre movió la cabeza y tomó la sopa que había hecho el
día anterior. Se sentó cerca de la puerta y se puso a hilar la lana de
sus ovejas. Mientras hilaba, cantaba:
“Mi hija se comió cinco empanadas,
cinco empanadas,
ella solita”.
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45. Ese día el rey había salido a recorrer los campos y escuchó a
la mujer cantando. Como no entendió lo que decía, se acercó a la
casa y le dijo:
-Buenos días, yo soy el rey y quiero saber qué cantabas.
A la madre de Lía le dio vergüenza decir que su hija se había
comido cinco empanadas y volvió a cantar, diciendo:
“Mi hija hiló hoy cinco madejas,
cinco madejas,
ella solita”.
-Vaya -dijo el rey- no sabía que alguien
fuera capaz de hilar tanto. Buena señora,
necesito una esposa y me casaré con tu hija.
Pero cuando sea reina, el último mes del año
tendrá que hilar cinco madejas cada día. Si no lo hace, la encerraré
en la torre.
Se casaron y vivían muy felices. El último mes del año cumplió
su palabra y la dejó en una habitación, con un cesto de lana para
hilar.
Lía había sido muy floja y nunca había aprendido a hilar. Sin
saber qué hacer, se sentó en una pequeña silla y se puso a llorar.
De pronto oyó unos golpes en la puerta y fue a abrir. Se quedó
muy sorprendida al encontrar un enano negro con una larga cola,
que le preguntó:
-¿Por qué lloras con tanta pena, señora reina?
La reina Lía le contó su problema.
-Yo te voy a ayudar –dijo el enano. Vendré a tu ventana cada
mañana a buscar la lana y la traeré hilada por la noche.
-¿Y cómo podré pagarte?
-Muy sencillo. Cada noche te preguntaré mi nombre y si no
has adivinado al terminar el mes, te llevaré a mi reino debajo de
la tierra.
Cuentos para leer y contar 45
46. Desde ese día, el enano llegaba en la mañana y regresaba en la
noche con todas las madejas hiladas.
Cada noche le preguntaba: “¿Cómo me llamo?”
-¿Te llamas Nariz Negra?
-No -contestaba el enano, moviendo su cola.
-¿Te llamas Gruñón?
-No –contestaba. Y se iba muy contento, porque estaba seguro
de que la reina nunca podría adivinar su nombre.
Cuando llegaba el rey a visitarla, se alegraba mucho al ver que
siempre estaban todas las madejas hiladas.
Durante el día la reina Lía imaginaba diferentes nombres, pero
nunca adivinaba.
Llegó el penúltimo día y el enano le preguntó:
-¿Sabes cuál es mi nombre? Solo queda un día y si no adivinas,
te llevaré conmigo.
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47. La pobre reina estaba aterrorizada. En la noche llegó el rey y le
dijo que esa noche iba a quedarse a comer con ella.
De pronto dejó de comer y se puso a reír.
-¿Por qué te ríes? –le preguntó la reina, temblando de miedo.
-Deja que me ría. Hoy fui al bosque a cazar y encontré un gran
horno abandonado. Oí una canción y me acerqué a mirar. Aden-
tro había un enano hilando y mientras hilaba, cantaba:
No tengo nombre
ni tengo motes,
pero me dicen
Perico de los Palotes.
Cuando la reina escuchó esta historia, casi se desmayó de ale-
gría, pero no le dijo nada al rey.
Al día siguiente, el enano golpeó su puerta. Ella abrió y vio que
sonreía mucho más que las otras noches.
-¿Cómo me llamo?
-¿Te llamas Lunar? –contestó la reina, fingiendo que estaba
muy asustada.
-No, no, por supuesto que no.
-¿Te llamas Cola Larga?
-¡Claro que no!
Y cuando ya estaba estirando sus brazos hacia la reina, ella
cantó:
No tienes nombres
ni tienes motes.
Te llamas
Perico de los Palotes.
Cuando el enano escuchó la canción, lanzó un grito de furia y
desapareció para siempre.
Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.
Cuentos para leer y contar 47
48. EL GALLITO
DE LA
CRESTA DE ORO
(Cuento ruso)
H ace muchos años, un matrimonio de ancianos vivía en una
pequeña cabaña. Eran muy pobres y su único alimento eran
las bellotas que caían de las encinas del bosque.
Las llevaban a su casa y las cocían en una olla de fierro. Un día
cayó una bellota al piso y rodó hasta entrar por un hoyo entre las
tablas.
Después de un tiempo, la mujer descubrió que había comenza-
do a crecer un pequeño árbol y le dijo a su marido:
-Igor, mira, está naciendo una encina. Así no tendremos que
salir al bosque cuando queramos recoger bellotas.
El marido sacó las tablas del piso y el árbol creció hasta que
llegó al techo. Entonces, hicieron una abertura para que pudiera
seguir creciendo.
La encina creció y creció y Lena le pidió a su marido que su-
biera al árbol a buscar bellotas.
48
49. El anciano tomó un canasto y comenzó a trepar. Subía y subía
y no encontraba ninguna bellota. De repente, se dio cuenta que
había llegado al cielo y bajó del árbol, pisando con mucho cuida-
do sobre una nube.
Comenzó a caminar y encontró dos piedras para moler y un
gallito que tenía la cresta de oro. Tomó las piedras y el gallito y
bajó por el árbol con mucho cuidado.
Cuentos para leer y contar 49
50. Cuando llegó a la casa, le contó a su mujer que había llegado
al cielo, pero que no había encontrado ninguna bellota. Su mujer
quedó muy asombrada, pero también triste, porque estaba espe-
rándolo con la olla puesta en el fuego. Entonces, el anciano le
mostró las dos piedras de moler y el gallito con la cresta de oro.
Lena tomó las piedras y las frotó una contra otra, para ver si
eran buenas para moler. Y entonces aparecieron panes, pasteles,
jamones y otros alimentos que ellos ya habían olvidado que exis-
tían.
Desde ese día ya nunca más tuvieron hambre y solo iban al
bosque cuando necesitaban leña para calentarse.
Un día pasó un rey y les pidió que lo alojaran esa noche, porque
había una tempestad de nieve y su caballo ya no podía encontrar
el camino. Los ancianos se alegraron de recibir una visita y poder
conversar con alguien.
Igor frotó las piedras y sobre la mesa aparecieron numerosos
platos y fuentes con toda clase de comidas exquisitas. El rey esta-
ba maravillado y no podía creer lo que veía.
-Amables ancianos, véndanme esas piedras y les pagaré lo que
me pidan, -dijo el rey.
-No, –contestaron ambos- es lo único que tenemos y no ne-
cesitamos dinero.
El rey se molestó, pero no dijo nada. Al amanecer, mientras
los ancianos dormían, tomó las piedras y, sin hacer ruido, salió y
montó en su caballo, alejándose rápidamente.
Cuando el marido y su mujer despertaron, se dieron cuenta del
robo y se pusieron muy tristes.
Mientras lloraban, sucedió lo más sorprendente, porque el ga-
llito que nunca había lanzado ni un “quiquiriquí”, les habló:
-No se preocupen ni tengan pena. Yo iré donde el rey y regre-
saré con las piedras, para que nunca les vuelva a faltar la comida.
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51. El gallito partió al palacio y, al llegar, golpeó la puerta, dicien-
do:
-¡Quiquiriquí! Soy el gallito de la cresta de oro y vengo a pe-
dirle al rey que nos devuelva las piedras mágicas.
El rey se puso furioso y enseguida mandó a sus soldados apre-
sar al gallito y que lo ahogaran en un gran pozo.
-¡Pico, pico, salva al gallo! ¡Pico, pico, bebe el agua! –cantó el
gallito.
Cuentos para leer y contar 51
52. El agua del pozo desapareció y el gallito volvió a donde estaba
el rey.
-¡Quiquiriquí! Soy el gallito de la cresta de oro y vengo a pe-
dirle al rey que nos devuelva las piedras mágicas que nos robó.
El rey, cada vez más furioso, mandó a sus soldados que pusie-
ran al gallito dentro del horno.
-¡Pico, pico, salva al gallo! ¡Pico, pico,
bota el agua! –cantó el gallito.
El horno se apagó y el gallito de nue-
vo volvió al palacio. Se paró en medio de
la sala y volvió a cantar:
-¡Quiquiriquí! Soy el gallito de la cresta
de oro y vengo a pedirle al rey que nos de-
vuelva las piedras mágicas que nos robó.
El rey había organizado un gran banquete para otros reyes y
príncipes que venían de tierras lejanas. Estaban todos en el gran
salón alrededor de una mesa gigantesca, llena de fuentes con co-
midas deliciosas.
Al escuchar hablar al gallito, los invitados creyeron que el cas-
tillo estaba embrujado y salieron huyendo. El rey corrió detrás de
ellos para tranquilizarlos, pero todo fue inútil.
-No regresaremos nunca más –dijeron a coro los reyes y prín-
cipes. Además, si has robado algo, debes devolverlo, porque si no
vas a recibir un castigo.
Sin esperar un segundo, y aprovechando el descuido del rey, el
gallito tomó las dos piedras y se fue volando hasta la cabaña de
los ancianos.
Cuando los ancianos lo vieron llegar, se alegraron mucho, por-
que creían que el rey lo tenía prisionero. Los tres se abrazaron,
felices de estar nuevamente juntos.
52
53. Dándole las gracias, Igor frotó las
piedras y pidió un gran plato de trigo
para el gallito de la cresta de oro. Y cuen-
tan que todavía viven felices en su pequeña casa
del bosque, acompañados por los cantos de los
pajaritos y el alegre “Quiquiriquí”
del gallito al amanecer.
Cuentos para leer y contar 53
Cuentos para leer y contar
55. Si usted u otro adulto desea
completar sus estudios
Educación Básica de Adultos: Se puede ingresar desde los 15 años.
Educación Media: Se puede ingresar desde los 18 años.
Requisito: Certificado de estudios del último curso aprobado, el que
se pide en las Secretarías Regionales Ministeriales de Educación.
El Ministerio de Educación ofrece las siguientes opciones:
MODALIDAD REGULAR: Para quienes pueden asistir a clases regular-
mente. Se imparte en los Centros de Educación Integrada de Adultos
(CEIA), y algunas escuelas y liceos.
• Educación Básica: Tiene una duración de hasta 3 años:
- Primer Nivel: 1° a 4° básico en un año
- Segundo Nivel: 5° y 6° básico en un año
- Tercer Nivel: 7° y 8° básico en un año
• Educación Media:
- Científico-Humanística: Se hace en 2 ó 4 años.
- Técnico-Profesional: Dura 3 años y permite obtener un
título técnico-profesional de nivel medio.
• Educación Básica y Media con Formación para el Trabajo: Tiene
un área de formación general, un área de capacitación en oficios
y una de actividades complementarias o de desarrollo personal
(artesanía, teatro, gimnasia, folclore y otras).
• Educación Fundamental de Adultos: Para mayores de 15 años
con menos de cuatro años de escolaridad; pueden obtener la
aprobación de 4º básico y certificación en un oficio.
Cuentos para leer y contar 55
56. • Educación Técnica Elemental de Adultos: Para mayores de 15
años con menos de 2º año de Educación Media aprobado; pue-
den cursar de 5º básico a 2º medio y obtener un certificado en un
oficio.
MODALIDAD FLEXIBLE: Para quienes no pueden asistir regularmente
a clases. Los cursos están a cargo de instituciones educativas selec-
cionadas por el Ministerio de Educación.
Informaciones acerca de cualquier modalidad de educación para
adultos en:
• Oficina de Informaciones 600 MINEDUC
Fono (02) 600 600 2626 con costo de llamada local,
desde cualquier lugar del país.
• Sitios web
www.mineduc.cl/adultos/index.htm
www.chilecalifica.cl
• Secretarías Regionales Ministeriales de Educación
• Departamentos Provinciales de Educación
• Departamentos de Educación de las Municipalidades
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