1. EL ÁRBOL QUE NO TENÍA HOJAS
(Adaptación del libro de Fernando Alonso Alonso)
Narrador: Había una vez un bosque,
(
) tan diferente tan diferente
que no tenía ni una sola hoja
que ponerse en la frente.
Todo el día lloraba y lloraba,
y las lágrimas …
por las ramas se derramaban.
Árbol 1
(
)
Narrador:
(
)
- ¿Por qué seré tan raro?
¡No me sale ni una hoja!
¡Ni cuando es de noche
ni cuando es de día!.
¡Tendré que quedarme rameado
como los cuernos de un ciervo
enojado!
Un día que los niños lo vieron
se quedaron con él
y le dijeron:
Niños:
- ¡Que bosque tan diferente!
- Sus árboles no tienen hojas
ni siquiera en la frente.
- Cuando llegue el otoño no podrás
tirar
ni una sola hoja que pueda volar.
Narrador:
(
)
El pobre bosque volvió a llorar
y sus ramas que miraban al cielo,
hacia el suelo las tuvo que bajar.
2. Árbol 2:
(
)
- ¿Porqué seré tan diferente,
tan raro y tan sorprendente?.
¡Si solo una hoja tuviera
la cuidaría en primavera
y cuando el viento de otoño llegara
la dejaría caer para que volara…!
Narrador:
De repente se oyó un ruido
Atronador…
¡Era el viento ventoso
que soplaba muy airoso!.
(
)
Árbol 3
(
)
Narrador:
(
)
- ¡Eh, eh! ¡Señor viento,
señor viento!.
Sóplame un poquito, sóplame un
momento
y déme alguna hojita
que sea muy fresquita.
Y el viento le contestó:
Viento:
(
)
- Yo hojas no te puedo dar
solo te puedo soplar.
Narrador:
(
)
Y el árbol triste quedó
porque ni una hoja le salió.
Después vino el sol, solito,
que en otoño calienta un poquito.
3. Árbol 4:
(
)
- ¡Eh, eh! ¡Señor sol, señor sol!
¡Deme alguna hoja, que sea
verdirroja!
Narrador:
(
)
Y el sol le contestó:
Sol:
(
- Yo hojas no te puedo dar,
solo te puedo calentar.
)
Narrador:
(
)
Y el árbol triste quedó
porque ni una hoja le salió.
Más tarde vino la nube gris,
con gotas de lluvias mil,
y el arbolito le dijo así…
Árbol 5:
(
)
¡Eh, eh! ¡ Señora nube, señora nube!
- Déme algunas hojitas,
como gotas, redonditas.
Narrador:
(
)
Y la nube le contestó:
Nube:
(
- Yo hojas no te puedo dar
solo te puedo mojar.
)
Narrador:
(
)
Y el árbol triste se quedó
porque ni una hoja le salió.
Tan triste y triste quedó
que siete lágrimas soltó.
4. El arco iris al pasar
al verlo triste y llorar
se le movió el corazón
y le cantó esta canción:
(poner grabación de la canción)
Arco iris:
(grabación)
Narrador:
(
)
“Arbolito alégrate,
que yo te ayudaré.
mis colores te daré,
y muy guapo te pondré”
(melodía de Campanitas del lugar)
Los niños del colegio
al oír la melodía,
se pusieron a trabajar.
Cogieron papel y lápiz,
tijeras y pegamento,
y cantando y recortando
con hojas de colores
el árbol iban llenando…
De todos los colores había:
verdes, rojas, amarillas…
De todos los colores
que el arco iris lucía.
Los niños cantan y mientras tanto decoran los
árboles
Narrador:
(
)
Cuando llegó el viento
y al árbol le vio tan guapo
5. no pudo soplarle
ni siquiera un rato.
Viento:
(
)
- Arbolito, que guapo estás.
No te soplaré, tus hojas no quiero
quitar.
Narrador:
(
)
Cuando llegó el sol
y vio al árbol tan adornado
se quedó asombrado.
Sol:
(
)
- Arbolito, que guapo estás.
No te calentaré,
tus hojas no quiero quemar.
Narrador:
(
)
Nube:
(
)
Narrador:
(
)
Cuando llegó la nube gris
y vio al árbol tan feliz le dijo:
Arbolito, arbolito,
que guapo estás.
No te mojaré,
tus hojas no quiero empapar.
Y aquí acaba la historia
del bosque tristón
que ni una hoja tenía
y que al cantarla su canción
su problema tuvo solución.
TODOS: ¡FELIZ NAVIDAD