La empresa manufacturera escogida utiliza materia prima que es ensamblada, verificada y etiquetada antes de ser empaquetada y enviada a los clientes. Sin embargo, para ahorrar tiempo y materiales, se recomienda realizar la inspección de calidad antes del proceso de etiquetado, de modo que los productos defectuosos puedan corregirse y volver a pasar la revisión de calidad antes de continuar con el proceso.