El documento presenta un guión para una Hora Santa con el tema de los jóvenes como testigos de la fe en el mundo. Incluye oraciones para pedir por la juventud, momentos de adoración, contrición, meditación y reflexión basada en las palabras de San Pío sobre la oración, espera y confianza en Dios. El objetivo es crear un espacio para un encuentro profundo entre los jóvenes y Dios a través de la oración y meditación.

1. Guión para Hora Santa Junio
Tema: Los jóvenes como testigos de la fe en el mundo
Reglas (no leer esto en voz alta)
1. Silencio. No recites mecánicamente las oraciones o revises en silencio el estrés de tu vida. Mantén un
silencio y una calma en tu exterior e interior.
2. Atención. No es una mera hora de lectura; leer debería ser un punto de entrada a la oración.
3. Actitud. Recuerda que somos un equipo y lo que hace uno lo hace en nombre de todos. Tengamos
nuestra mejor actitud como grupo.
4. Sigue el guión. No hace falta improvisar, por eso nos preparamos haciendo este documento.
5. Buena disposición. Siéntate, ponte de pie o arrodíllate, pero con respeto. Consejo rápido: si sientes
somnolencia, ¡ponte de pie!
7:00 Misa
7:30 Exposición del Santísimo Sacramento
Cantemos al amor de los amores
D A7 Bm
Cantemos al Amor de los amores,
G Em A7
cantemos al Señor.
D Em
Dios-está-aquí,
D G
venid adoradores
F#m Bm C#7 F#m
adore mos a Cristo Redentor.
D B Em
Gloria a Cristo Jesús
A D
Cielos y tierra
A7
bendecid al Señor.
D F#
Honor y Gloria a Ti
G Em
Rey de la Glo ria
D A7
Amor por siempre a Ti
Em D A7 D
Dios del Amor.

2. Unamos nuestra voz a los cantares
del coro Celestial.
Dios está aquí,
el Dios de los altares.
Alabemos con gozo angelical.
Cantemos al Amor de los amores,
cantemos sin cesar.
Dios está aquí,
venid adoradores.
Adoremos a Cristo en el Altar.
7:30-7:35 – Inicio (Equipo y 1 lector)
Hemos preparado ésta Hora Santa como un momento de adoración y meditación. Te invitamos a participar de
ella cantando con nosotros, ayudándonos en las lecturas y meditando en silencio durante los diferentes
momentos que viviremos. Ten una buena disposición para escuchar a Dios, quién hoy te hablará y siéntete libre
de permanecer sentado, de pie o de rodillas según te diga tu corazón.
Oración para pedir por la juventud del mundo.
Señor, te pedimos por todos los jóvenes del mundo. Te pedimos que sean jóvenes con deseos de búsqueda, con
deseos de encontrar el sentido de sus vidas.
A los jóvenes Señor, tú los amaste siempre, fueron tus preferidos, tus amigos los que compartieron tu mesa y tu
misma suerte.
Jóvenes que miraste con compasión y ternura.
Jóvenes a quienes les dijiste: “a ti te digo levántate”.
Jóvenes a quienes preguntaste: “¿Qué quieres que haga por ti?”.
Jóvenes a quienes llamaste para ver dónde vivías.
Jóvenes entusiastas que hoy están en peligro por todo lo que la sociedad les ofrece.
Jóvenes confundidos y presionados por lo que la sociedad exige.
Jóvenes con deseos de realizar sus sueños y jóvenes al borde de la muerte.
Jóvenes con una meta clara y jóvenes desorientados.
Señor Jesús, tú que los amas con un amor preferente, no permitas que se dejen llevar por ideologías mundanas
y mezquinas y por los placeres de este mundo. Ayúdalos a descubrir lo más importante y esencial que hay en sus
vidas, que hay en la vida.
Libera, ¡oh, Señor Jesús! de todos sus vicios, de sus inseguridades y temores, de sus fantasías que no les
permiten ver, vivir y asumir la realidad en que viven.
Haz que descubran su tesoro escondido ese que tú has puesto en cada uno de ellos, que puedan descubrir el
sello del amor, con el que están impregnados sus corazones, que descubran cada día que fueron, creados para
amar y ser amados.
Señor, haz que puedan vencer todas sus dificultades y puedan emprender caminos nuevos, ayudando a construir
un mundo distinto, con amor, con fraternidad, con solidaridad, con justicia y paz.

3. Señor Jesús, sabemos que nunca los dejarás solos, sabemos que siempre, aunque no se den cuenta, aunque no
perciban tu amor, tu presencia, tú estás siempre caminando a su lado, en medio de sus problemas y sus
preocupaciones, en medio también de sus alegrías y
esperanzas, viviendo y luchando, con cada uno de ellos.
Gracias Señor Jesús, permíteles abrir su corazón para escucharte, para darte una respuesta, para acoger tu
propuesta de seguirte y compartir contigo el servicio, la donación y el amor, la capacidad de darse por los demás
sin esperar nada a cambio.
Gracias Señor Jesús por ser amigo, por enseñarnos a amar de tal forma, hasta dar la vida por los demás hasta
el extremo.
Gracias Señor Jesús, no dejes de llamar a los jóvenes, ellos están dispuestos, sólo llámalos. Sigue tocando la
puerta de sus corazones. Ellos también te esperan. Bendícelos cada día Señor.
Señor Jesús, hoy en nombre de todos los jóvenes del mundo, quiero pedirte por ellos. Te ruego que cada uno,
desde el lugar donde se encuentre, siempre encuentre un momento para glorificarte y alabarte, que a pesar de
todos los ruidos que en el mundo existen, sepa distinguir lo bueno de lo malo, sepa que tú estás a su lado en
toda ocasión y que siga tu bendición para que el maligno no gane su corazón.
Amén.
7:35-7:45 – Adoración (2 lectores)
Lector 1 Equipo
Tal vez hace mucho tiempo que no estás un rato a solas con Jesús, o quizás ésta sea la primera vez que te
dispones a rezar frente a Jesús expuesto en el Santísimo Sacramento. Por eso pensamos en ofrecerte una
pequeña guía que puede servirte como orientación.
Lo primero que te sugerimos es que te arrodilles, toma unos minutos para escucharte, escucha tu respiración..
aquí está, date cuenta que en cada aliento está Él. Reconoce toda su grandeza como verdadero Hijo de Dios
hecho hombre, piensa en todo el amor que te ha manifestado a lo largo de tu vida, pídele que sea él quien
disponga de tu corazón para poder escucharlo y aceptar lo que Él quiere decirte hoy.

4. Venimos a adorar
D Em A D F#m Bm
El Rey del universo y Señor de la creación
Em G A
se viene a hacer presente en medio de nosotros.
D Em A D F#m Bm
El Santo Sacramento, Jesús Eucaristía
Em G A
rodeado de sus ángeles ya está presente aquí.
D F#m
Nos ponemos de rodillas
G A
y el corazón alzamos,
D F#m
nos llenamos de alegría
G A
y venimos a adorar. (x2)
G D G D F#m
A Cristo, Cristo, ¡Oh Cristo!,
G A D D7
gracias por estar aquí.
G A F#m Bm G A D
Qué alegría el poder estar contigo.
Adoración - Lector 2
Ahora puedes ponerte más cómodo, puedes sentarte, mantenerte arrodillado o como te sientas mejor en
presencia de Él.
Imagina que estás con Él, que está delante tuyo.
[silencio 1minuto aproximadamente. Leer pausado.]
Ahora te proponemos que repitas después de nosotros, la siguiente oración
Señor, Dios mío, me acerco a tu Sacramento[pausa]
para ofrecerte la adoración de mi alma,[pausa]
las aspiraciones de mi corazón.[pausa]
Te aclamo Hijo del Padre, Dios como El,[pausa]
sabio, bueno, poderoso y Salvador.[pausa]
Tú, mi Rey divino, me conoces, me amas;[pausa]
eres mi amigo que se me confía,[pausa]

5. mi guía que me dirige,[pausa]
mi padre que me sonríe,[pausa]
mi protector que me guarda,[pausa]
mi maestro que me enseña.[pausa]
Tú eres mi Dios-Verdad que irradias luz[pausa]
sobre mi inteligencia;[pausa]
mi Dios-Amor[pausa]
que haces amar a mi corazón.[pausa]
Te adoro con María, tu Madre Inmaculada,[pausa]
Reina y Señora mía,[pausa]
con todos los santos y ángeles
y te pido[pausa]
que remedies todas nuestras necesidades,[pausa]
aumentes el número de adoradores[pausa]
y des la paz verdadera al mundo.[pausa]
Gloria (Martín Valverde, No litúrgico)
Em B7
Gloria, Gloria (x2)
C D
a Jesús el Señor,
G Em
al Cordero de Dios.
Am Bm Em
Al nombre sobre todo nombre. (x2)
7:45-7:55 – Contrición, arrepentimiento, pedir perdón,
proponer reparación. (1 lector)
Postrado ante Ti, que tanto me has amado, lleno de confusión y de arrepentimiento, invoco Tu perdón y Tu
Misericordia.
Respondemos todos: Oh, Jesús, ¡ten piedad de mí!
● Por el mal uso que hice de los dones naturales recibidos: mi vida, mis energías, mi tiempo, mis sentidos,
mi inteligencia, mi lengua. R/
● Por las desobediencias, pequeñas y grandes a Tu ley, R/.
● Por los deberes descuidados o mal cumplidos, R/.
● Por el bien que pude hacer y no hice, R/.
● Porque dejé triunfar muchas veces en mí las malas inclinaciones del orgullo, de la vanidad y del egoísmo,
R/.
● Porque no practiqué el mandamiento de caridad, como Tú lo ordenaste, R/.
● Porque dejé estériles en mí tantas gracias, R/.
● Por la tibieza con que practiqué mi vida de piedad, R/.
● Por la indiferencia y frialdad con que respondí a los dones de Tu amor, R/.

6. ● Por haber preferido muchas veces a las criaturas y las satisfacciones humanas, en lugar de Ti y de tus
consolaciones, R/.
● Por la poca fidelidad y generosidad con que he vivido mi consagración, R/.
● Por la falta de fe y abandono en tu amor, R/.
● Por la falta de dedicación a las almas y a la Iglesia, R/.
● Por mis rebeliones y mi poco amor a Tu Voluntad y a Tu cruz, R/.
Del libro del profeta Ezequiel:
"Les rociaré con agua pura, y quedarán limpios. De todas sus impurezas y de todos sus ídolos los purificaré. Les
daré un nuevo corazón, y pondré en ustedes un espíritu nuevo. Les quitaré ese corazón de piedra que ahora
tienen, y les pondré un corazón de carne. Pondré mi Espíritu en ustedes y haré que sigan mis preceptos y
obedezcan mis leyes."
II Crónicas 7:14
G D
Si mi pueblo sobre el cual se invoca mi
C G
nombre, se humilla;
G D C G
orando y buscaaando mi rostro se humilla.
C G D
Y se vuelven de sus malos caminos,
C G
yo oiré desde los cieeeelos.
C G D
Les perdonaré a todos sus pecados
C G
y sanaré su tieeeerra.
G D C G
Mis ojos estarán abiertos, mis oídos atentos,
D C
A la oración que se haga en este lugaaar
G
elegido.
C G D
Pues ahora yo he escogido esta casa y la he
C G
santificaaaaado,
C G D
Para que en ella esté mi nombre escrito.
C G
Y mi corazón por sieeeeeempreee.

7. 7:55-8:00 – Meditación (1 lector)
Reflexión sobre palabras de San Pío
Decía San Pío de Pietrelcina: “Reza, espera y no te preocupes. La preocupación es inútil. Dios es misericordioso
y escuchará tu oración.
La oración es la mejor arma que tenemos; es la llave al corazón de Dios. Debes hablarle a Jesús, no solo con tus
labios sino con tu corazón. En realidad, en algunas ocasiones debes hablarle solo con el corazón.”
En esta hora santa, nos reunimos como jóvenes ante el Santísimo Sacramento, buscando un encuentro profundo
con Dios. Siguiendo las palabras de San Pío, queremos recordar que rezar, esperar y confiar sin preocupaciones
son claves en nuestra vida cotidiana.
En primer lugar, la oración se convierte en un diálogo íntimo y auténtico con Dios. Como jóvenes, tenemos tantas
cosas en nuestra mente y corazón: sueños, inquietudes, desafíos y esperanzas. En esta hora santa, abrimos
nuestro ser a la presencia de Jesús y le hablamos sin reservas.
Mientras rezamos, también aprendemos la virtud de la paciencia. Como jóvenes, a menudo buscamos
respuestas inmediatas y resultados rápidos. Sin embargo, en esta hora santa, recordamos que Dios tiene un plan
perfecto para nuestras vidas. A veces, las respuestas pueden tardar en llegar y puede haber momentos de
incertidumbre. Pero confiamos en que Dios está trabajando en nosotros y en nuestra historia personal. Nos
animamos a ser pacientes y a esperar con confianza en que Él nos guiará en el camino correcto.
Además, en este momento de adoración, reconocemos que la preocupación es una carga innecesaria. A menudo
nos preocupamos por nuestro futuro, nuestras decisiones, nuestras relaciones y nuestras metas. Sin embargo,
San Pio nos enseña que preocuparse no cambia las cosas. En lugar de ello, nos invita a confiar en la
misericordia de Dios. Él tiene un plan para nosotros, y podemos entregarle nuestras preocupaciones y confiar en
que Él guiará cada paso de nuestro camino.
En esta hora santa, queremos sumergirnos en la presencia viva de Jesús, quien entiende nuestras alegrías y
desafíos. Le ofrecemos nuestras esperanzas y sueños, nuestras luchas y temores. Reconocemos que Él camina
a nuestro lado, dispuesto a escucharnos y ayudarnos a encontrar nuestro propósito y significado en la vida.
Reflexiona sobre la preocupación en tu vida: ¿Con qué frecuencia te encuentras preocupado/a por el futuro, por
situaciones que escapan a tu control? ¿Has experimentado el agotamiento y la inutilidad de la preocupación
constante?
Pausa
Considera el amor y la misericordia de Dios: ¿Confías en que Dios está siempre dispuesto a escuchar tus
oraciones y responder de acuerdo con su sabiduría perfecta? ¿Cómo te sientes al saber que tienes un Padre
amoroso que está cuidando de ti?
Pausa

8. He venido
E A E A
He venido a buscarte una vez mas Señor
E A B7
He venido a ofrecerte lo que soy
E A G#m C#m
He venido a adorarte y a escuchar tu voz
A B7 E E7
He venido de nuevo mi Señor
A B7 G#m C#m
Te agradecemos que nos des un día más
A B7 E E7
Y que nos vuelvas a escuchar
A B7 G#m C#m
Te agradecemos que nos des un día más
A B7 E
Y que nos vuelvas a escuchar
E A E A
Como el agua de río que regresa al mar
E A B7
Como el sol que calienta una vez mas
E A G#m C#m
Caminamos en busca de tu inmenso amor
A B7 E E7
He venido de nuevo mi Señor
Canto: Te entrego
D G
Haz lo que quieras conmigo.
D A
Haz lo que quieras de mi.
Em Bm
Hoy yo te ofrezco mi vida,
Em A
hoy yo me rindo ante ti.
D G
Haz lo que quieras conmigo.
D A
Haz lo que quieras de mi.
G D
Hoy yo te ofrezco mi vida,
G A
hoy yo me rindo ante ti.
D A
Te entrego, todo lo que soy
Bm
todo lo que tengo
F#m G
todo lo que quiero y todo lo que sueño
Em A
a ti, Señor Jesús. (x2)
D
Te entrego...
8:00-8:10 – Acción de gracias a Dios (1 lector)
Señor: Te damos gracias, porque eres el Amor Infinito.
Te agradezco, mi Dios, porque Tú eres el Amor y te agradezco por los dones de Tu amor. Y ya que los dones
más preciados, los de la vida eterna, nos los diste por Jesús, es también por El, con El y en El que quiero elevar
hasta ti mi adoración.
En unión con Jesús te agradezco, Dios Padre, por todas las gracias personales que me has concedido. Tú me
diste la vida, sacándome de la nada y me la conservaste día a día hasta este momento. Pero Tú Me has dado
otra vida más valiosa, la de la gracia, que me hace partícipe de Tu misma vida divina y, después de la primera
gracia con la que me santificaste en el día del bautismo, ¡cuántas gracias me han sido concedidas, que
conservaron, aumentaron y, tal vez, reconquistaron la vida sobrenatural!

9. Pienso en los dones de tu amor de los que tanto he gozado:
● En la Iglesia, que me has dado para que sea mi maestra y guía hacia la eternidad.
● En los Sacerdotes, que me han otorgado los dones de Tu amor.
● En los perdones continuadamente renovados.
● En la Eucaristía, que ha sido para mí, alimento, sostén y consuelo.
● En la Virgen, que es mi buena Madre, mi consoladora, mi ayuda, mi especial protectora en cada instante
de mi vida.
● En el Paraíso, que me has preparado y que con Tu gracia espero alcanzar.
Contemplo mi vida sembrada de alegrías y dolores y comprendo que todo en ella ha sido amor. Todo, oh mi Dios,
porque de Tu Corazón amante no puede salir nada que no sea gracia y amor.
Por todo ésto, decimos juntos: R/: Te doy gracias, Dios mío.
● Por las alegrías que me has permitido gozar, así como por los dolores y las pruebas con que has
sembrado mi camino, R/.
● Por las gracias conocidas y por las desconocidas, R/.
● Por los favores del pasado y los del futuro, R/.
● Por todo lo que has hecho en mí y por mí, y por todo lo que todavía querrás hacer en el futuro, R/.
● Sobre todo, por haberme llamado al conocimiento de Tu Amor y a consagrarme a él, R/.
● Por la luz y la alegría Tuyas, que estoy tan lejos de merecer, R/.
● Por la luz y la alegría que el conocimiento de Tu Amor trajo a mi vida, R/.
● Por la posesión de Tu amor que Te hace mío y a mí me hace Tuyo, R/.
Porque tú eres bueno
D D7 G A
Porque tú eres bueno porque para siempre, tu
D D7 G A
misericordia es, cada mañana al despertar sé
D F#m Bm G
que en ti puedo confiar, me sostienes con tu
A7 D
gran fidelidad.
Porque tú eres bueno porque tu justicia,
justicia eterna es. Y en ella yo me deleitaré en
tu verdad caminaré por tus sendas
de justicia guíame.
Te doy gracias
D Bm
Te doy gracias, Jesús, por haberme encontrado,
G A A7 D-A7
por haberme salvado, te doy gracias, Jesús.
D Bm
Hoy ya sé el camino y hacia Él me dirijo, es la
G A A7
senda bendita que representa El Hijo (2)
Mi amor era pequeño, pero ya lo he encontrado
y ese pequeño amor, hoy se ha agigantado (2)
Hoy Jesús es mi guía, él controla mi vida
y no hay ser terreno que mi cariño mida (2)
8:10-8:25 – Petición a Dios (2 lectores)
Antes de alejarme de este Santo Sagrario, oh Jesús mío, quiero elevar una ferviente oración por todos los
jóvenes del mundo. Reconociendo las riquezas infinitas de Tu Corazón divino, te presento los deseos que arden
en lo más profundo de tu ser.

10. Tu primer deseo, Jesús, es la salvación de las almas y el establecimiento del Reino del Amor Infinito en toda la
tierra. Te suplico, Señor, que derrames Tu amor sobre todos los jóvenes, para que puedan conocer y
experimentar Tu amor transformador. Permíteles descubrir su identidad y propósito en Ti, y guíalos hacia una
vida de santidad y plenitud.
Te pido especialmente por aquellos jóvenes que enfrentan desafíos, confusión y desesperanza. Ilumina sus
caminos, fortalécelos en su fe y bríndales la esperanza que necesitan para superar las dificultades. Que
encuentren en Ti, Jesús, un refugio seguro y una fuente inagotable de amor y paz.
Te ruego, Jesús, que suscites líderes juveniles valientes y apasionados que sean testigos de Tu amor en medio
del mundo. Que sean instrumentos de transformación en sus comunidades, llevando esperanza, compasión y
justicia a quienes más lo necesitan. Capacítalos para que sean portadores de Tu mensaje de amor y
reconciliación.
Señor, encomiendo a todos los jóvenes a Tu cuidado amoroso. Guíalos en sus decisiones, protégelos de los
peligros y ayúdalos a vivir según Tu voluntad. Llénalos de esperanza, alegría y valentía para enfrentar los
desafíos de la vida y ser portadores de Tu amor en el mundo.
Que esta hora santa sea un momento de intercesión ferviente por todos los jóvenes. Confiados en Tu
misericordia, te pedimos que bendigas y transformes sus vidas, para que sean una generación encendida en
fuego por Tu amor, llevando Tu luz a todos los rincones del mundo.
Amén.
Redes
D C G A
Redes al hombro, sol bajo, cierto extraño se embarcó, con su mirada a lo alto con el viento se alejó,
después de haber navegado solitario se encontró, muy pocos peces quedaron atrapados en su amor.
A G A
Quiero ir contigo, espérame Señor, aún no terminó espera por favor, escucha el canto que nace de mi
voz.
D G A A
Te quiero, Señor yo te quiero, te quiero, eterno viajero.
Con su mirada de niño, izó velas y marcho, y un ave vino y me dijo que en su rostro había dolor, es
noche él duerme cansado otro día terminó, tal vez mañana a su lado pescador me vuelva yo.
Yo nunca dejo de pensar en el extraño que embarcó.
8:25-8:30 Resolución (1 adulto del equipo)
[Leer pausado][pausa]
A aquellos jóvenes que se encuentran en situaciones difíciles: los que no tienen trabajo o no pueden
tener mejores empleos[pausa], a los que han sufrido abusos[pausa], a los que han sufrido
discriminación a causa de prejuicios económicos o étnicos[pausa], los que tienen luchas internas

11. acerca de su identidad sexual[pausa], alos recién llegados[pausa], a aquellos que están teniendo
problemas en su matrimonio[pausa], a los que buscan sabiduría y guía en la crianza de sus hijos[pausa],
a los que tienen dificultad en hacer o guardar compromisos[pausa], a los que aún no tienen claro por
qué están aquí[pausa], a los que tienen a un familiar enfermo en casa[pausa] , a los que han sufrido una
perdida irremediable[pausa], a los que sienten que no pueden más[pausa], a los que no saben a dónde
va su camino[pausa], a los que tienen problemas con adicciones y no saben cómo salir[pausa], a los que
tienen discusiones constantes con sus padres[pausa] , a todos y cada uno…. Queremos que sepan que
no están solos.
A lo largo de sus vidas, continúen con sus esperanzas y sus sueños.[pausa] Apoyarles es una de las
labores de la comunidad cristiana, ayudarlos a vivir sus vidas en Cristo Jesús. No duden en poner a
Jesús en el centro de sus vidas, como el foco principal de todo lo que elijan en la vida.
A los adultos que tienen un joven en su familia o en su trabajo o como vecinos , apóyenlos, ustedes
estuvieron antes ahí y también fue difícil[pausa] no olviden su juventud, porque somos nosotros los que
podemos apoyarles y guiarles por el camino de Jesús. [pausa]
A todos nosotros, como nos dijo el Santo Padre Francisco, "Construyan vuestras vidas basados en ese
modelo que no los decepciona... abran el Evangelio y descubran que Jesucristo quiere ser su amigo (cf. Jn
15:14). Él quiere ser su compañero en cada etapa de la travesía de la vida (cf. Lc 24:13:35). Él quiere ser la
senda, el camino para sus ansiedades, dudas, esperanzas y sueños de felicidad (cf. Jn 14:6). Él quiere ser
su Dios (cf. Mat 16:13-17)".
Hoy en oración
D
Hoy en oracion
G D
quiero preguntar, Señor,
G D
quiero escuchar tu voz ,
G A
tus palabras con tu amor.
D
Ser como eres Tú,
G D
servidor de los demás,
G D
dime cómo, en qué lugar
G A D D7
te hago falta más.
G A F#m Bm
Dime, Señor, en qué te puedo servir
G A D D7

12. déjame conocer tu voluntad
G A F#m Bm
Dime, Señor, en ti yo quiero vivir
G A D INTRO
quiero de ti aprender saber amar.
Hoy quiero seguir
tus caminos junto al mar,
tu palabra, tu verdad
ser imagen de ti.
Ser como eres tú,
servidor de los demás,
dime cómo, en qué lugar
te hago falta más.

13. Otros cantos:
El amor de Cristo
D A Bm F#m
Si el amor es ya tan grande que brota del corazón
G D E7 A-A7
para liberar al hombre de toda opresión,
D A Bm F#m
si en tus manos hay justicia, si en tus labios la verdad,
G D E7 A-D
si el camino has encontrado a la libertad.
D F#m G D
El amor de Cristo está en tu corazón
G D E-E7 A-A7
y su Santo Espíritu que Él nos prometió.
D F#m G D
Deja que te mueva, escucha su voz
G D E-E7 A-D
y te hará testigo fiel de su grande amor
Si al que llora has consolado, si al que sufre, dado amor y si siempre has encontrado en el pobre a
Dios; y si sientes la esperanza que comienza a germinar con un mundo de alegría, un mundo de paz.
Hijo de Dios
Intro: G Bm E Am D7 G C-D-G
G Bm
Quiero levantar mis manos,
E Am
quiero levantar mi voz,
E Am D7~ G
ofreciendo a ti mi vida en santidad y amor,
C Cm
Padre solo a ti te ofrezco,
Bm
mi vida y mi corazón
C D C~ D7 G
y me postro en tu presencia en adoración.
G Bm Dm G C Cm
Hijo de Dios (Hijo de Dios), recibe hoy (recibe
G Em Am D7 G
hoy), toda la Gloria, la honra y honor. (x2)

14. Abba Padre
D Bm
Una vez más, me acerco a ti,
Em G A
con libertad en adoración.
D Bm
Tú eres mi Dios, tu hijo soy,
G Em G A
Mi comunión contigo es una dulce bendición.
D G
Abba Padre. (x2)
D Bm G A
Estar contigo es una dulce bendición.
D G F#m Bm
Abba Padre te amo Señor.
G D
Quiero estar en comunión (2),
Em F#m G A D
Quiero estar contigo.
Ahora es tiempo
D G D
Ahora es tiempo de alabar a Dios en la
G A7
presencia del consolador
G D G D
Concéntrate en él, empieza a cantar.
C Em A7
Su presencia con poder descenderá.
D G A7 D
¡Gloria a Dios! ¡Oh gloria a Dios! (x2)
El mora en la alabanza de su pueblo
Se goza al oír nuestro clamor
¡Gloria a Dios! ¡Oh gloria a Dios! (x4)

15. HUERFANITOS para la otra hora santa
De Fer:
USTEDES SON EL AHORA DE DIOS
(Una voz en off lleva toda la meditación y reflexión de la oración.)
El Papa Francisco reconoce a los jóvenes como el presente, el AHORA DE DIOS (64). Los jóvenes estamos
enriqueciendo el mundo con nuestras aportaciones. También reconoce que los fieles de la Iglesia no siempre
tienen la actitud de Jesús ya que, en lugar de escuchar a los jóvenes, tendemos a dar respuestas
preconfeccionadas y recetas preparadas, sin dejar que los jóvenes planteen su novedad, sin aceptar su
provocación (65). ¿Cuál es nuestro ahora? Para descubrirlo y rezarlo, os voy a invitar a que os dirijáis de forma
tranquila a diferentes puntos de la Iglesia señalados con una interrogación. En ellos encontrareis un texto que
explica lo que nos pasa a los jóvenes, cómo es nuestro mundo, nuestra sociedad. Encontrareis también unas
cuartillas de papel y bolígrafos. Cuando hayáis leído unos cuantos, escribiréis un hecho relacionado con alguno
de los textos. Algún hecho que te haya pasado esta semana o recientemente, o que al leer te ha venido a la
memoria alguien conocido al que has identificado con el texto. Una vez lo tengáis, volvéis a vuestro sitio para
reflexionarlo y orarlo frente a Jesús. Podemos dejar los papeles a los pies del altar.

16. Las experiencias dolorosas se superan y se les da nuevo significado únicamente en la medida en que
no se evade la realidad y no se niega lo sucedido. Los dos discípulos de Emaús son el prototipo de
quienes piensan que porque huyen de un lugar el problema se supera, o porque niegan una realidad lo
acontecido deja de existir. Aquel forastero funciona como voz clarificadora que les va explicando cómo
deberían haber entendido lo sucedido en Jerusalén: es cierto que ahí habían asesinado a Jesús, pero
también ahí él mismo había entregado su vida; en esa ciudad lo habían calumniado los jefes religiosos,
pero también, según Lucas, había sido ahí, concretamente en el perímetro del templo, el espacio
privilegiado de su enseñanza; ahí estaba el poder religioso y político que los humillaba
permanentemente, pero también desde la cruz, ahí en Jerusalén, Jesús había declarado que ya desde
ahora se podía vivir con la frente en alto participando de las primicias del Reino de libertad y justicia que
proclamado en su ministerio como un tiempo de gracia para todos, especialmente. para quienes más
sufrían. Por esto y para esto, tienen que regresar aquellos discipu los a Jerusalén. habia
¿Qué podemos hacer para comprender más y aprender de las experiencias, incluidas las dolorosas?
La actitud para compartir lo que se tiene y lo que se es, además de una señal de madurez humana, es
de autenticidad cristiana. No es ninguna casualidad que el relato de Emaús culmine mostrando que es
precisa libmente en el gesto de fraccionar el pan para repartirlo con el que descubren que aquel
forastero es el Resucitado (v. 35). Quizá Lucas blocon quiere relacionar la Resurrección con la
celebración de la Fracción del Pan o Eucaristía; con mucha seguridad quería recordarles a sus
comunidades que la Resurrección no debería prolongar unas relaciones en las que unos dan y otros
reciben, pues esto promueve una falsa tranquilidad de conciencia y normaliza casi siempre la injusticia;
quería invitarlos a que, con la fortaleza que les daba la celebra- ción de la Cena del Señor, se
dispusieran a compartir como hermanos, sin generar eternas dependencias, eliminando la relación
entre un bienhechor poderoso y un necesitado débil, que siempre termina contradiciendo la meta de
fraternidad que había deseado y enseñado Jesús. Compartir tendría que ser el gesto de quienes nos
decimos cristianos; es el punto de partida y el punto de llegada de toda celebra- ción de fe. MUMOD AT
20 AVIORITHA
¿Sabemos compartir? ¿Qué nos impide compartir cristianamente? ¿Qué podría- mos hacer para que la
Resurrección nos ayude a ser más compartidos?
De Carlos
Hora Santa basada en el Evangelio segun san Juan 6 1-15
[silencio 1minuto aproximadamente. Leer pausado.]
Ahora te invitamos a que te detengas a pensar en los siguientes episodios:

17. ● El que dio los panes y los pescados era un muchacho. Le dio lo que tenía, no era mucho, pero era todo lo
que tenía.
● Eran muchos lo que tenían hambre (5000 hombres), por eso se entiende la reflexión de Andrés: "¿Qué es
esto para tanta gente?"
● Jesús toma lo que el muchacho le entrega y da de comer a todos y sobran pedazos todavía. Jesús hace
un signo maravilloso a partir de la generosidad de un joven.
[silencio 1minuto aproximadamente. Leer pausado.]
Te proponemos ahora, que te preguntes…
● ¿Ves el hambre de la gente de este tiempo? Hambre material, de justicia, de Dios, de paz, de amor, de
compasión… ¿O estás cerrado en tus propios problemas?
● ¿Crees que Jesús puede hacer algo para saciar el hambre de la gente?
● ¿Te das cuenta de que tienes muchos "panes" que puedes darle a Jesús para que Él los multiplique? No
importa la edad que tengas, si eres joven o estás
● ¿Serías capaz de ofrecerle a Jesús tu vida en serio para que Él pueda contar contigo?