La autora recuerda su infancia en la España de los años 70, cuando la mayoría de las mujeres crecían siendo criadas por madres amas de casa que no trabajaban fuera del hogar, a menudo por imposición de los padres o esposos. Ahora, las mujeres trabajadoras ven el matrimonio como una prisión y hay más mujeres solteras, divorciadas o madres solas. Sin embargo, existen también mujeres pioneras bien pagadas en diferentes sectores laborales.