El documento habla sobre el maltrato animal y cómo este está relacionado con la violencia social. Explica que el maltrato animal puede ser causado por factores como falta de educación, cultura, negocio, perversidad o castigo excesivo. También describe diferentes tipos de maltrato como abandono, peleas de animales, circos y cría de perros. Brevemente menciona las leyes sobre maltrato animal en España, Argentina y Colombia.
2. Maltrato Animal
Antesala De La Violencia Social
El maltrato animal es, a la vez, un factor que predispone a la
violencia social y, al mismo tiempo, una consecuencia de la
misma. Forma parte de la cascada de la violencia que nos va
alcanzando a todos como individuos y como sociedad. La
violencia es “un acto intencional que puede ser único o
recurrente y cíclico, dirigido a dominar, controlar, agredir o
lastimar a otros. Casi siempre es ejercida por las personas de mayor jerarquía, es decir, las
que tienen el poder en una relación, pero también se puede ejercer sobre objetos, animales o
contra sí mismo”.
La violencia inhibe el desarrollo de las personas y puede causar daños irreversibles, adopta
diferentes formas de expresión que pueden variar desde una ofensa verbal hasta el
homicidio. La crueldad es “una respuesta emocional de indiferencia o la obtención de
placer en el sufrimiento o dolor de otros, o la acción que innecesariamente causa tal
sufrimiento; ha sido considerada un disturbio sicológico. La crueldad de los niños, que
incluye a los animales, es un signo clínico relacionado a desórdenes antisociales y de
conducta”.
En las familias en las que hay violencia, ésta es más frecuentemente dirigida hacia los más
débiles, lo que incluye ancianos, mujeres, niños y animales de compañía. El maltrato hacia
los animales es tolerado por aquellos que lo observan; se minimizan sus causas y sus
efectos, y los padres, maestros y comunidades que no dan importancia al abuso animal en
realidad incuban una bomba de tiempo.
Debe hacerse énfasis en que la detección, prevención y
tratamiento de la violencia hacia los animales es un acto
de humanidad en sí mismo. Los animales son criaturas
que se encuentran, en relación al ser humano, en un
nivel de inferioridad dentro de la escala evolutiva; esto
3. nos hace responsables de su bienestar, ya que tener supremacía lleva consigo una
obligación, una responsabilidad, que es la de cumplir como guardián de las especies
inferiores en términos intelectuales. Si realmente queremos combatir la violencia, una parte
de nuestra lucha consiste también en erradicar el maltrato a otros seres vivos.
Una persona que abusa de un animal no siente empatía hacia otros seres vivos y tiene
mayor riesgo de generar violencia hacia otras personas. La Asociación Siquiátrica
Americana lo considera como uno de los diagnósticos para determinar desórdenes de
conducta. Si un niño nos habla sobre el maltrato a su animal de compañía, podría estar
hablándonos también de su propio sufrimiento.
Amenazar con lastimar al animal de compañía puede ser una forma de violencia sicológica
que se utiliza contra el niño para que se “porte bien” o como
una forma de mantener en secreto algún tipo de abuso al que
éste está siendo sometido. Según los especialistas,
protagonizar u observar actos de crueldad pude llegar a ser
tan traumático como ser víctima de abuso físico y, por lo
tanto, es altamente probable que el niño presente un alto riesgo de convertirse en padre
abusivo, quien a su vez puede producir otra generación de niños violentos.
Algunas de las características que pueden presentar los niños y jóvenes que abusan de los
animales son: sentirse indefensos y bajo el control de otros; usan a los animales como
víctimas para demostrar su autoridad y poder; emplean a los animales como chivos
expiatorios por el enojo que sienten hacia otras figuras de autoridad que los maltratan; ; son
discriminados de algún modo; reciben castigos severos; tienen baja autoestima; sienten
gran recelo contra la sociedad; tienen bajas calificaciones y están aislados socialmente.
Algunas características del contexto familiar de quienes abusan o maltratan animales son:
adultos que fueron abusados sexualmente en la infancia; adolescentes que presentan una
relación con sus padres, familia y compañeros más negativa que los no maltratadores El
abuso hacia los animales es más frecuente en hogares en los que existen otras formas de
violencia, el alcohol o abuso de drogas.
4. La crueldad origina violencia, y la violencia, delincuencia. En un estudio hecho en Estados
Unidos se comprobó que no todos los maltratadores de
animales se convierten en asesinos en serie, pero todos
los asesinos en serie tienen antecedentes de maltrato a
animales La gran mayoría de los niños puede vivir una
etapa en la cual pueden lastimar insectos como parte de
la exploración del mundo; sin embargo, con el correcto
asesoramiento de sus padres, consiguen comprender
que los animales son sensibles al dolor.
La educación que se les da a los niños les ayuda a establecer sus valores y patrones de
comportamiento. Ellos adquieren sus principios morales y éticos imitando a los modelos
que tienen a su alrededor. Tomando en consideración todo lo anterior, solamente podemos
llegar a la conclusión de la imperiosa necesidad que existe del esfuerzo integrado de padres,
profesores, trabajadores sociales, veterinarios, pediatras, asociaciones de protección animal
y sicólogos para prevenir el maltrato a los animales y su posterior transformación en
violencia social.
CAUSAS DEL MALTRATO ANIMAL.
Abandono. Tipo de maltrato animal.
Podemos mencionar varias causas del maltrato animal. Aunque son
distintas, tienen un mismo origen: la acción humana.
Falta de educación.
Una poca o nula educación sobre respeto y conciencia animal desde
pequeños, puede llevar a realizar actos con dolo como parte del morbo
o del sentimiento de superioridad ante una criatura indefensa que por sus características o
condiciones, no puede defenderse.
5. Ser indiferentes ante acciones de maltrato producidas por otra gente o justificar tales actos,
también tiene lugar en esta categoría.
Cultura.
Algunas tradiciones humanas vienen acompañadas de sangre o sufrimiento animal, como El
toro júbilo, El giro del perro o Patos al agua, por poner algunos ejemplos. Muchos
consideran que las corridas de toros, que forman parte de la cultura de España desde el
siglo XVIII, son crueles e innecesarias.
Negocio.
Dar prioridad a las ganancias sobre el bienestar de los
animales es otra causa de maltrato. La venta de pieles o
huesos, la crianza de perros, las peleas clandestinas, entre
muchas otras actividades, son llevadas a cabo en todas
partes del mundo.
Perversidad.
Últimamente han circulado vídeos en las redes donde individuos cometen actos denigrantes
hacia diferentes tipos de animales. Tales hechos no tienen ningún fin más que la
perversidad y el morbo tanto del productor como del espectador. Otros, para evitar ser
juzgados por la sociedad, buscan la satisfacción en el sufrimiento de los animales en
lugares aislados o remotos.
Castigo y corrección.
Como parte de un entrenamiento a las mascotas o
corrección al comportamiento general de los animales,
se puede incurrir a golpes o castigos innecesarios que
pueden perjudicarlos.
6. ¿Cuáles son los tipos de maltrato animal?
Animales de circo.
La violencia o el maltrato animal no solo se refiere a
golpes ni a intencionados actos despiadados. Esto puede
adquirir muchas formas diferentes, e incluso, disfrazarse
como algo normal. Generarles angustia, terror o estrés
también constituyen actos de maltrato.
Como parte de este amplio abanico de posibilidades, la legislación de bienestar animal no
intenta definirla dentro de un marco exclusivo, sino que la explica como cualquier acto u
omisión que cause daños innecesarios o irrazonables a un animal. Con dicha declaración
generalizada, se pueden tratar diversos tipos de situaciones en diferentes contextos.
Peleas clandestinas.
Se le llama deporte, pero de entrada, muchos se oponen a este término para dirigirse a las
peleas entre animales. Las más comunes son las peleas de perros y de gallos, donde estas
últimas, incluso, son parte de fiestas tradicionales en países como México.
De principio a fin, es decir, desde la preparación, en los enfrentamientos y hasta en los
tratos posteriores, hay violencia. Antes de las batallas los animales son equipados con
elementos punzocortantes o son mutilados de partes corporales para evitar que el oponente
lo sostenga de esas áreas para ganar.
Circos.
Este es uno de los ejemplos donde el humano muchas
veces no percibe el sufrimiento animal. Se comprobó
que detrás de los actos circenses con animales,
especialmente salvajes, hay maltrato y sufrimiento
generado por entrenadores y cuidadores.
Látigos, varas de metal con puntas de gancho, descargas eléctricas, entre otros instrumentos
de tortura, son utilizados en los animales para que obedezcan órdenes a cambio de comida.
7. Leones, tigres, osos, elefantes, cebras, etc., etc., son privados de la vida natural para
enfrentar condiciones de encierro y violencia donde deben ejecutar movimientos y adquirir
posturas completamente anormales para su condición.
Abandono.
Esto abarca abandono tanto lejos de casa como
dentro del mismo hogar. Un tipo común de
abandono es alejar al animal lo suficiente como
para que no recuerde cómo llegar a casa. Otro,
es que se les limite su libertad con cadenas o
dentro de espacios muy reducidos y hacinados,
sin alimento, agua limpia o un techo que los
proteja del clima.
Cría de perros.
Gran parte de la sociedad invita a adoptar perros en vez de comprar. Este pensamiento
surgió después de revelarse el negocio de la cruel crianza de perros donde las hembras
reproductoras viven en condiciones deplorables y su salud es llevada a límites extremos.
La mayoría de los criaderos son insalubres y los canes carecen de atenciones básicas como
veterinarios, comida, agua y lugares donde desechar sus necesidades. Los cachorros son
muy propensos a enfermedades y al ser separados de sus madres a temprana edad, sufren
miedo, inseguridad y numerosos problemas de comportamiento.
Irresponsable acumulación de animales.
Esto proviene algunas veces de personas con buena intención de salvar criaturas callejeras,
lesionadas o maltratadas. El problema es que albergan más animales de lo que sus
posibilidades económicas pueden permitir. Es una situación compleja donde entran temas
como la salud mental de la persona, el bienestar animal y humano y la seguridad pública.
Los perros de asociaciones y casas hogares, deben ser parte de una serie de lineamientos
donde tanto personas como animales convivan en un entorno salubre, con personal
8. capacitado ante cualquier eventualidad y con la posibilidad de poder ofrecer a todos los
animales una atención adecuada donde se cubran sus necesidades más básicas. Esto aplica
también para hogares cuyos propietarios cuenten con un número elevado de animales (de
acuerdo a las leyes de cada región), pues la proliferación de enfermedades, parásitos, olores
emanados, ruido y otras cuestiones, pueden perturbar y poner en peligro a los habitantes
cercanos.
9. Maltrato animal en España
En España, aún no existe una ley marco a nivel nacional
que habla específicamente sobre el bienestar animal y
tampoco se reconoce, dentro de la estructura jurídica
española, los derechos de los animales. No obstante, el
maltrato animal en el código civil español aparece tratado
como un delito en los artículos 337 y 337 bis.
El primero (337), determina que podrá ser condenado a
pena de "tres meses y un día a un año de prisión e
inhabilitación especial de un año y un día a tres años para
el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales y para la
tenencia de animales, el que por cualquier medio o procedimiento maltrate
injustificadamente, causándole lesiones que menoscaben gravemente su salud o
sometiéndole a explotación sexual a: a) un animal doméstico o amansado, b) un animal de
los que habitualmente están domesticados, c) un animal que temporal o permanentemente
vive bajo control humano, o d) cualquier animal que no viva en estado salvaje."
Ya el artículo 337 bis, que en realidad viene a complementar el anterior texto, agrega que el
abandono de animales en vía pública también puede ser considerado un tipo de maltrato
animal. Pero el principal problema es que ambos artículos limitan su definición y sanciones
al maltrato contra animales domésticos o domesticados, no alcanzando a todas aquellas
especies que viven en estado salvaje.
Maltrato animal en Argentina
A pesar de la cultura muy arraigada de la explotación
comercial de la carne y del cuero (especialmente la
vacuna), Argentina suele ser considerada como un país de
vanguardia en materia de protección legal a los animales.
10. En 1891, se publicaría la primera ley nacional que condenaba los malos tratamientos hacia
animales, así como establecía sanciones económicas o pena de encarcelamiento para
quienes incumplieran este decreto.
En 1954, su Congreso Nacional aprobaría en la Ley 14.346, que sigue vigente y define que
podrá ser "reprimido con prisión de quince días a un año, el que infligiere malos tratos o
hiciere víctima de actos de crueldad a los animales". Además de prohibir el sacrificio de
perros y gatos en toda la provincia de Buenos Aires, dicha ley detalla qué acciones y
contextos son considerados maltrato y crueldad contra los animales en el territorio nacional.
Según el artículo 2 de la Ley 14.346, los siguientes actos son considerados maltrato animal
en Argentina:
Maltrato animal en Colombia
En 2016, se ha aprobado en Colombia la ley 1774, que establece las consecuencias jurídicas
del maltrato animal, modificando la hasta entonces vigente ley 84/1989 del Código Civil
Colombiano. Los actos de crueldad, maltrato o violencia en contra animales domésticos,
amansados o exóticos vertebrados, se reconocen como delitos y los infractores pueden ser
condenados a pena en prisión de 12 a 36 meses.
Su texto define las responsabilidades de los
tutores al adoptar a un animal, entre las que se
encuentra la obligación de proveerle condiciones
dignas y salubres de vida, así como proveerle un
lugar seguro donde no sea víctima de miedo o
estrés. También expresa claramente las obligaciones del Estado para garantizar el bienestar
animal, haciendo valer las leyes que los protegen y promoviendo políticas públicas que
fomenten la tenencia responsable.
Además de reforzar las penas aplicables a casos de maltrato, dicha ley significa un
importantísimo avance en el camino hacia la aprobación de los derechos de los animales, ya
que por primera vez, los animales empiezan a ser considerados jurídicamente como seres
dotados de sentimientos, y no como objetos o bienes en Colombia.