El documento resume las ideas principales del libro "Dependencia y desarrollo en América Latina" de Fernando Henrique Cardoso y Enzo Faletto. Los autores proponen un análisis integrado que articula los aspectos estructurales sociales, procesos económicos y dinámica política para lograr el desarrollo. También examinan cómo las concepciones de sociedades tradicionales y modernas influyeron en América Latina y cómo el desarrollo depende de la interacción de grupos sociales.
1. UNIVERSIDAD DE EL SALVADOR
FACULTAD DE JURISPRUDENCIA Y CIENCIAS SOCIALES
ESCUELA DE RELACIONES INTERNACIONALES
CATEDRA: REALIDAD POLITICA DE AMERICA LATINA
CATEDRATICO: DR. ANTONIO MARTÍNEZ URIBE
Tomado de:
Dependencia y desarrollo en América Latina
Fernando Henrique Cardoso
Enzo Faletto
Siglo XXI, Editores S.A. Buenos Aires, 1977
Ciudad Universitaria, viernes 17 de mayo de 2013.
2.
3.
Los autores plantean como solución el análisis
integrado,
el
cual
articula
los
aspectos
estructurales sociales, procesos económicos y la
dinámica política.
La integración exige esa
articulación para que exista reciprocidad entre las
estructuras y los procesos con el fin de lograr un
desarrollo efectivo.
Las implicaciones históricas de las concepciones
de sociedades tradicionales y modernas fueron las
pautas de los sistemas político, social y
económico de los países de Europa Occidental y
Estados Unidos los que determinan y anticipan el
futuro de las sociedades subdesarrolladas.
4.
El desarrollo es el resultado de la interacción de
grupos y clases sociales, cuya oposición,
conciliación o superación da vida al sistema
socioeconómico.
“El “proceso de desarrollo” consiste en llevar a
cabo, las diversas etapas que caracterizaron las
transformaciones
sociales
de
los
países
desarrollados”.
5. “Se trata de buscar una perspectiva que
permita
vincular
concretamente
los
componentes económicos y sociales del
desarrollo en el análisis de la actuación de los
grupos sociales. La estructura social y política se
va modificando en la medida en que distintas
clases y grupos sociales logran imponer sus
intereses, su fuerza y su dominación al conjunto
de la sociedad, con el fin de desarrollar una
forma económica compatible con sus intereses
y objetivos”. Pag. 10.
6.
Es preciso, pues, redefinir la “situación de
subdesarrollo” tomando en consideración su
significado histórico particular, poniendo en duda
los enfoques que la presentan como un posible
“modelo”
de
ordenación
de
variables
económicas y sociales.
En este sentido, hay que distinguir la situación de
los países subdesarrollados con respecto a los que
carecen de desarrollo, y diferenciar luego los
diversos modos de subdesarrollo según las
particulares relaciones que esos países mantienen
con los centros económica y políticamente
hegemónicos.
7.
“La situación de "subdesarrollo nacional y supone
un modo de ser que a la vez depende de
vinculaciones de subordinación al exterior y de la
reorientación del comportamiento social, político y
económico en función de “intereses nacionales”;
esto caracteriza a las sociedades nacionales
subdesarrolladas no sólo desde el punto de vista
económico, sino también desde la perspectiva del
comportamiento y la estructuración de los grupos
sociales. De ahí que la finalidad del análisis
integrado del proceso de desarrollo nacional
consista
en
determinar
las
vinculaciones
económicas y político-sociales que tienen lugar en
el ámbito de la nación”.
8.
El tipo de vinculación de las economías nacionales
periféricas a las distintas fases del proceso
capitalista, con los diversos modos de dominación
que este supone implica que la integración a la
nueva fase se realiza a través de una estructura
social y económica que, si bien modificada,
procede de la situación anterior. Serán distintos el
modo y las posibilidades de desarrollo que se
vincula al sector exportador internacional con un
producto de alto consumo, según el periodo de
capitalismo predominante competitivo o en el
periodo predominante monopolista.
9. CONCLUSIONES
El análisis integrado que los autores proponen
articula lo estructural y los procesos en lo social,
económico y político. Cada uno de estos
aspectos tiene cierta autonomía pero son parte
una de otra, que genera integración,
articulación lo que permite una reciprocidad
entre las estructuras y los procesos. Ya que no
podemos
desvincular
el
crecimiento
económico de un país sino se ve reflejado en el
desarrollo del mismo, sería un crecimiento
económico estéril.
10. La concepción del cambio social según el
autor, está relacionado con el efecto de
demostración, que se refiere a la participación
de las masas en el campo político, para lograr
los cambios sociales.
La estructura y el proceso de acuerdo con el
autor requieren de una perspectiva en donde
los grupos de dominación económicos y los
grupos sociales busquen un punto de
intersección recíproco con el fin de imponer
sus intereses y objetivos.
11.
Definitivamente que sí, la historia del pensamiento
latinoamericano se ha conformado en relación a Europa; sin
embargo, hay una decisiva y creciente presencia del
pensamiento de los Estados Unidos de América.
En este
pensamiento se nos ha formado para concebirnos como
sociedades sin ideologías, modelos consumistas, globalización
al servicio de las transnacionales, hasta llegar a pensar que la
política es innecesaria, ya que no hay alternativas, que siempre
deben de existir los ricos para que ayuden a los pobres.
La colonialidad del poder es el patrón de poder hegemónico
que sigue imperando hoy día, esa generación de dependencia
entre centro y periferia no nos permitirá dar ese salto de
cantidad y calidad que los países latinoamericanos
necesitamos, si bien, ya hay algunas sociedades que están
haciendo un esfuerzo de convertirnos en un bloque regional
solidario, hay otras que lo consideran como una amenaza,
especialmente ideológica.