El documento discute si es posible perder la salvación. Presenta varios pasajes bíblicos que sugieren que la salvación se puede perder si una persona deliberadamente se aparta de Dios y rehúsa arrepentirse, a pesar de las advertencias. Sin embargo, Dios da poder y victoria sobre el pecado a través de Cristo para que los creyentes se mantengan firmes.
Santa Luisa de Marillac nos muestra: Los escollos a evitar
Es posible perder la salvación? Análisis bíblico
1. ¿ Es posible perder la salvación?
Hay muchos textos que confirman que nada nos puede separar del amor de Cristo:
Romanos 8:35-39
¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o
espada? Como está escrito: Por causa de ti somos muertos todo el tiempo; Somos contados como ovejas de
matadero. Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Por lo cual
estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,
ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús
Señor nuestro.
Juan 10.27 29
"Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las
arrebatará de mi mano. Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi
Padre".
Vemos aquí que es imposible que alguien quite de la mano de Dios a una oveja (un cristiano) suya y que estamos
seguros en las manos de Dios.
Pero ¿qué si la oveja, por su propia voluntad no quiere oir su voz y por descuido, decide salir de la mano de Dios?
¿Podrá hacerlo?
Ilustración:
Un hombre estaba pescando en un pequeño bote. Mientras pescaba, se levantó una fuerte tormenta que le llevó
mar adentro y él cayó al agua. Aunque era un buen nadador, después de haber nadado por largo rato entre las
grandes olas del mar, se le agotaron las fuerzas. Comenzó a pensar: Me voy a ahogar. Jamás volveré a ver a mi
esposa e hijos. Sé que hoy llorarán mucho cuando vean que regreso y luego sabrán que he muerto.
Pensando en su muerte sintió mucho miedo, pero ¿qué podía hacer él? ¡Prácticamente se le habían acabado las
fuerzas!. Un instante después escuchó un zumbido. ¡Era un barco! Con las pocas fuerzas que le quedaban, se puso a
gritar tan fuerte como pudo. Uno de los marineros que estaba en cubierta oyó los gritos y vio al hombre en el agua.
Rápidamente dió aviso al capitán de que había un hombre ahogándose. Así que se acercaron al hombre y le tiraron
un salvavidas atado a una cuerda. El hombre se esforzó, lo agarró, y lo puso bajo sus brazos. Entre varios marineros
lo subieron a bordo. ¡De nuevo algo sólido bajo sus pies! ¿Pensaría ahora en que iba a morir? Claro que no. Ya no
pensaba en que iba a morir, más bien se regocijaba en que fue rescatado de las aguas. Ahora, imaginemos que
después de varios días, el hombre que fue salvado de la furia del mar decide saltar del barco porque ya no le gusta
estar allí. ¿Qué le sucederá? Fue salvado cuando lo rescataron. ¿Puede perder esa salvación? ¿Puede ahogarse
ahora? ¡Claro que sí! Se ahogará –a menos que sea recogido por otro barco–, o quizás se lo comerá un tiburón
perdiendo así su salvación.
Podemos decir: "No, la salvación no se pierde".
Es como este hombre que fue rescatado ¿Ese hombre ya no puede ahogarse?
De la misma manera somos cuando llegamos a Cristo nos convertimos haciéndonos creyente pero nos podemos
“bajar del barco”
También podemos decir: "el hecho de que se desviaron comprueba que en verdad nunca eran hijos verdaderos de
Dios".
¿Verdad? ¿Qué de nuestro amigo que fue rescatado del mar, pero luego decidió saltar del barco y entrar en el mar
de nuevo? ¿Será que el mero hecho de que él saltó del barco comprueba que en verdad nunca estaba en el barco?
Estudiemos la Biblia:
Apocalipsis 3.5
Cristo, hablando a cristianos, dice: "El que venciere será vestido de vestiduras blancas; y no borraré su nombre del
libro de la vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre, y delante de sus ángeles" ().
Juan 15.5,7:
"Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados
de mí nada podéis hacer. El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen,
y los echan en el fuego, y arden".
Antes que una rama pueda ser cortada de un árbol, tiene que estar conectada. De la misma manera, uno tiene que
primeramente ser conectado a Cristo (ser cristiano) para poder ser cortado de Cristo. Aquí dice claramente que los
que no permanecen en Cristo serán cortados, serán echados fuera, se secarán, y los echarán en el fuego.
2. Mateo 18.15,17
"Por tanto, si tu hermano peca contra ti, ve y repréndele estando tú y él solos; si te oyere, has ganado a tu
hermano. Mas si no te oyere, toma aún contigo a uno o dos, para que en boca de dos o tres testigos conste toda
palabra. Si no los oyere a ellos, dilo a la iglesia; y si no oyere a la iglesia, tenle por gentil y publicano".
El Señor no quiere que ninguno que le ha conocido se aparte de él. Pero él no quita del cristiano el libre albedrío. El
libre albedrío es un privilegio, dado a los hombres por mandato divino. El cristiano aún es libre para escoger. Dios no
rehúsa permitir que el cristiano escoja salir de su mano. Si el cristiano decide apartarse, nosotros tenemos el deber
de amonestarlo para tratar de ayudarlo a que vuelva al redil.
1ª Corintios 6:7-10
7. Así que, por cierto es ya una falta en vosotros que tengáis pleitos entre vosotros mismos. ¿Por qué no sufrís más
bien el agravio? ¿Por qué no sufrís más bien el ser defraudados?
8. Pero vosotros cometéis el agravio, y defraudáis, y esto a los hermanos.
9. ¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni l os
adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones,
10. ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios.
Dios no tolera el pecado. Si el que se aparta no quiere volver, Dios ya lo considera como pecador, y mandó que
nosotros hagamos lo mismo. Aunque una vez fue rescatado del mar del pecado, esta persona ha vuelto a entrar en
el mar y no quiere salir. Ha perdido su salvación.
Ezequiel 33.13, 18
"Cuando yo dijere al justo: De cierto vivirás, y él confiado en su justicia hiciere iniquidad, todas sus justicias no serán
recordadas, sino que morirá por su iniquidad que hizo.... Cuando el justo se apartare de su justicia, e hiciere
iniquidad, morirá por ello" ().
2 Pedro 2.20,22
"Ciertamente, si habiéndose ellos escapado de las contaminaciones del mundo, por el conocimiento del Señor y
Salvador Jesucristo, enredándose otra vez en ellas son vencidos, su postrer estado viene a ser peor que el primero.
Porque mejor les hubiera sido no haber conocido el camino de la justicia, que después de haberlo conocido,
volverse atrás del santo mandamiento que les fue dado. Pero les ha acontecido lo del verdadero proverbio: El perro
vuelve a su vómito, y la puerca lavada a revolcarse en el cieno" ().
Que sea posible que perdamos la salvación no quiere decir que la vallamos a perder:
1 Corintios 10.13
"No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más
de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar".
1 Corintios 15.57
"Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo" .
1 Juan 4.4
"Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que está en vosotros, que el que está en el
mundo" .
Isaías 41.10
"No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré,
siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia" .
2 Corintios 2.14
"Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús, y por medio de nosotros manifiesta en todo
lugar el olor de su conocimiento".
¡Qué promesas tan maravillosas! ¡Qué victoria nos es disponible en Cristo Jesús! ¡Cuántas gracias debemos al que
nos ha rescatado del mar del pecado!
¡Cuán poderoso es Cristo! Frente a la posibilidad de caer de la gracia, él
Judas 24
"es poderoso para guardaros sin caída, y presentaros sin mancha delante de su gloria con gran alegría"
1 Corintios 10.12
Aprovéchate del poder de Cristo para ser guardado de caer en pecado. No pienses que ya que eres cristiano no te es
posible caer de su gracia. Escucha la advertencia que nos da Cristo: "Así que, el que piensa estar firme, mire que no
caiga" .
3. Conclusiones:
No podemos añadir nada a la Escritura diciendo que la salvación no se pierde. ¡Gloria a Dios, nadie puede
arrebatarnos de la mano de Dios!
Pero tengamos mucho cuidado cómo vivimos porque Dios mismo quitará nuestro nombre del libro de la vida si
rehusamos obedecer su voluntad para nuestras vidas.
Apocalipsis 22.18,19
"Yo testifico a todo aquel que oye las palabras de la profecía de este libro: Si alguno añadiere a estas cosas, Dios
traerá sobre él las plagas que están escritas en este libro. Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta
profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida, y de la santa ciudad y de las cosas que están escritas en este libro"
Juan 8.31
"Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis
verdaderamente mis discípulos".
Colosenses 1.21,23
"Y a vosotros también ... os ha reconciliado ... para presentaros santos y sin mancha e irreprensibles delante de él; si
en verdad permanecéis fundados y firmes en la fe, y sin moveros de la esperanza del evangelio que habéis oído" .
Hebreos 3.6
"Pero Cristo como hijo sobre su casa, la cual casa somos nosotros, si retenemos firme hasta el fin la confianza y el
gloriarnos en la esperanza".
Santiago 5.19,20
"Hermanos, si alguno de entre vosotros se ha extraviado de la verdad, y alguno le hace volver, sepa que el que
haga volver al pecador del error de su camino, salvará de muerte un alma, y cubrirá multitud de pecados".
Mateo 24.11,13
"Y muchos falsos profetas se levantarán, y engañarán a muchos; y por haberse multiplicado la maldad, el amor de
muchos se enfriará. Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo"
2 Pedro 3.17
"Así que vosotros, oh amados, sabiéndolo de antemano, guardaos, no sea que arrastrados por el e rror de los inicuos,
caigáis de vuestra firmeza".
Hebreos 2.1,3
"Por tanto, es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que hemos oído, no sea que nos deslicemos.
Porque si la palabra dicha por medio de los ángeles fue firme, y toda transgresión y desobediencia recibió justa
retribución, ¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande?"
Romanos 14:13-15
Así que, ya no nos juzguemos más los unos a los otros, sino más bien decidid no poner tropiezo u ocasión de caer al
hermano. Yo sé, y confío en el Señor Jesús, que nada es inmundo en sí mismo; mas para el que piensa que algo es
inmundo, para él lo es. Pero si por causa de la comida tu hermano es contristado, ya no andas conforme al amor. No
hagas que por la comida tuya se pierda aquel por quien Cristo murió.
1 Corintios 8:11:
Y por el conocimiento tuyo, se perderá el hermano débil por quien Cristo murió.
Hebreos 6:4-6
Porque es imposible que los que una vez fueron iluminados y gustaron el don celestial, y fueron hechos partícipes
del Espíritu Santo. Y asimismo gustaron la buena palabra de Dios, y las virtudes del siglo venidero, Y recayeron, sean
otra vez renovados para arrepentimiento, crucificando de nuevo para sí mismos al Hijo de Dios, y exponiéndole á
vituperio.
Aquí el escritor dice IMPOSIBLE QUE SEAN OTRA VEZ RENOVADOS, claro que para el que ande mal al parecer no le
importa cambiar lo que la palabra de Dios dice.
Hebreos 10:25-31
No dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis
que aquel día se acerca. Porque si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la
verdad, ya no queda má s sacrificio por los pecados, sino una horrenda expectación de juicio, y de hervor de fuego
que ha de devorar a los adversarios. El que viola la ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres testigos muere
irremisiblemente. ¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por
inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu de gracia? Pues conocemos al
que dijo: Mía es la venganza, yo daré el pago, dice el Señor. Y otra vez: El Señor juzgará a su pueblo.¡Horrenda cosa
es caer en manos del Dios vivo!
4. 1 Timoteo 1:18-20
1:18 Este mandamiento, hijo Timoteo, te encargo, para que conforme a las profecías que se hicieron antes en cuanto
a ti, milites por ellas la buena milicia,
1:19 manteniendo la fe y buena conciencia, desechando la cual naufragaron en cuanto a la fe algunos,
1:20 de los cuales son Himeneo y Alejandro, a quienes entregué a Satanás para que aprendan a no blasfemar.
¿Se puede naufragar en la fe?
Ahora si un cristiano se devuelve al mundo de donde una vez lo saco el Señor, ¿qué dice la Biblia acerca de estos?
2ª Pedro 2:1-22
Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán
encubiertamente herejías destructoras, y aun negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos
destrucción repentina. Y muchos seguirán sus disoluciones, por causa de los cuales el camino de la verdad será
blasfemado, y por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas. Sobre los tales ya de largo tiempo la
condenación no se tarda, y su perdición no se duerme. Porque si Dios no perdonó a los ángeles que pecaron, sino
que arrojándolos al infierno los entregó a prisiones de oscuridad, para ser reservados al jui cio; y si no perdonó al
mundo antiguo, sino que guardó a Noé, pregonero de justicia, con otras siete personas, trayendo el diluvio sobre el
mundo de los impíos; y si condenó por destrucción a las ciudades de Sodoma y de Gomorra, reduciéndolas a ceniza y
poniéndolas de ejemplo a los que habían de vivir impíamente, y libró al justo Lot, abrumado por la nefanda
conducta de los malvados (porque este justo, que moraba entre ellos, afligía cada día su alma justa, viendo y oyendo
los hechos inicuos de ellos), sabe el Señor librar de tentación a los piadosos, y reservar a los injustos para ser
castigados en el día del juicio; y mayormente a aquellos que, siguiendo la carne, andan en concupiscencia e
inmundicia, y desprecian el señorío. Atrevidos y contumaces, no temen decir mal de las potestades superiores,
mientras que los ángeles, que son mayores en fuerza y en potencia, no pronuncian juicio de maldición contra ellas
delante del Señor. Pero éstos, hablando mal de cosas que no entienden, como animales irracionales, nacidos para
presa y destrucción, perecerán en su propia perdición, recibiendo el galardón de su injusticia, ya que tienen por
delicia el gozar de deleites cada día. Estos son inmundicias y manchas, quienes aun mientras comen con vosotros, se
recrean en sus errores. Tienen los ojos llenos de adulterio, no se sacian de pecar, seducen a las almas inconstantes,
tienen el corazón habituado a la codicia, y son hijos de maldición. Han dejado el camino recto, y se han extraviado
siguiendo el camino de Balaam hijo de Beor, el cual amó el premio de la maldad, y fue reprendido por su iniquidad;
pues una muda bestia de carga, hablando con voz de hombre, refrenó la locura del profeta. Estos son fuentes sin
agua, y nubes empujadas por la tormenta; para los cuales la más densa oscuridad está reservada para siempre.
Pues hablando palabras infladas y vanas, seducen con concupiscencias de la carne y disoluciones a los que
verdaderamente habían huido de los que viven en error. Les prometen libertad, y son ellos mismos esclavos de
corrupción. Porque el que es vencido por alguno es hecho esclavo del que lo venció. Ciertamente, si habiéndose
ellos escapado de las contaminaciones del mundo, por el conocimiento del Señor y Salvador Jesucristo,
enredándose otra vez en ellas son vencidos, su postrer estado viene a ser peor que el primero. Porque mejor les
hubiera sido no haber conocido el camino de la justicia, que después de haberlo conocido, volverse atrás del santo
mandamiento que les fue dado. Pero les ha acontecido lo del verdadero proverbio: El perro vuelve a su vómito, y la
puerca lavada a revolcarse en el cieno.
Si la salvación no se pierde, ¿entonces por qué la Biblia dice lo que ya leímos?
¿Por qué el libro de Apocalipsis en el capítulo 2 y versículo 10 dice?: "...Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la
corona de la vida..."
O, ¿por qué Jesús dijo?: "...Y Jesús le dijo: Ninguno que poniendo su mano al arado mira atrás, es apto para el
reino de Dios..." (Lucas 9:62)
5. No debemos de sentirnos tan seguros pues recordemos lo que el apóstol nos recomienda (1Corintios 10:12) "...Así
que, el que piensa estar firme, mire no caiga..."
Sobre todo recuerda que:
2 Corintios 13:8 dice: "...Porque ninguna cosas podemos contra la verdad, sino por la verdad..."
La salvación si se puede perder si nos descuidamos y le fallamos a Dios. A menos que estemos leyendo diferente
Biblia o viviendo una vida diferente.