El documento presenta una historia inventada sobre el Juicio de Paris. Cuenta que en la boda de Tetis y Peleo, Atenea cautivó a todos con su belleza, despertando la envidia de Hera y Afrodita. Luego, Eris llevó una manzana dorada para "la más bella", desatando una disputa entre Atenea, Hera y Afrodita. Zeus eligió a Paris para que decidiera, ofreciéndole cada diosa un regalo. Aunque Paris eligió a Afrodita, Zeus intervino para dar
1. ATENEA
La diosa por la cual me decidí fue Atenea también nombrada Minerva para los
romanos.
La elegí, ya que me parece una diosa con mucho fuerza de voluntad, que no
necesita un hombre a su lado para ser feliz ni para que la protegiera. Ella misma se
bastaba para protegerse y luchar contra viento y marea con quien o con aquello que
hiciera falta.
Y también que su vida, fue una vida llena de hazañas, ya que nada más la sacaron
de la cabeza de Zeus, su padre, ella ya soltó un grito de guerra e iba vestida con el
casco y la lanza (sus atributos).
Mi trabajo consistirá en transcribir la historia de la manzana dorada, la cual tendrá
un desarrollo y un final distinto.
Historia mítica:
Sucedió durante la celebración de boda de Tetis y Peleo, cuando de repente
apareció Eris la diosa de la discordia y como regalo de boda para los novios les dió
una manzana de oro dejando el recado de : "Para la más bella".
Hera, Afrodita y Atenea, se sintieron identificadas y reclamaban la manzana. Pero
Zeus que se hallaba en el enlace, decidió sabiamente después de recapacitar que lo
debía elegir alguien que fuera imparcial y ese no era otro que Paris, hijo de Príamo.
Y para eso cada diosa debía ofrecerle algún regalo a cambio. Cuando cada diosa le
ofreció su don. Este eligió a Afrodita ya que le ofrecía a la mujer más bella (Helena
de Troya), aunque no sabía que por culpa de esta elección desencadenaría la
famosa GUERRA DE TROYA.
http://historiaybiografias.com/discordia_manzana/
https://euclides59.wordpress.com/2014/01/13/el-juicio-de-paris-en-la-pintura-la-boda-de-tetis-y-peleo/
Historia inventada:
Érase una vez, hace muchísimos muchísimos siglos, más de los que nos podemos
imaginar, un bonito día donde el sol brillaba espléndidamente y los pájaros
cantaban armoniosamente, era el día de la boda de Tetis y Peleo, una historia que
comenzó con la negativa de Tetis a enamorarse de Peleo. Esta era una nereida, es
decir, se podía cambiar de forma cuando ella quisiera. Una vez Peleo la amarró y
2. Tetis para intentar deshacerse de él se convirtió en un calamar, pero Peleo no la
soltó de ninguna manera y este cuando ella volvió a su forma de mujer la tomó por
la fuerza. Al final, eligieron a Peleo, ya que era un hombre inteligente y valiente para
Tetis, aunque esta ni lo deseaba ni le prestaba el mínimo interés.
A pesar de todo, era la boda del año, en la cual estaban invitados todo el mundo
tanto ninfas como diosas, dioses y los hijos de estos. Solo una persona fue
considerada persona "non grata" en la boda y no era otra que Eris la diosa de la
discordia.
Iban todos con sus mejores galas, pero la que más impactó fue Atenea, incluso por
encima de la novia, ya que nadie la había visto nunca sin su casco y su lanza. Pero
en este caso se había puesto un vestido con tirantes de un color pastel que hacía
resplandecer sus ojos azules y un recogido estilo heleno que dejaba ver
perfectamente su hermosa cara. Todos los hombres casados o no, mayores o
jóvenes la deseaban, y encima para ellos era además un reto ya que Atenea se
había decidido a mantenerse virgen hasta su muerte.
Fue tal la sorpresa, que Hera y Afrodita la odiaron en el mismo instante. Hera
porque su marido Zeus, padre de Atenea, solo le prestaba atención a Atenea y
Afrodita porque en esta ocasión, Atenea la había derogado de su puesto como diosa
de la belleza.
Una vez estuvieron ya desposados Tetis y Peleo, comenzó el convite, en el que
había ambrosía como entrante que era una mezcla cruda de agua, miel, aceite de
oliva, queso y cebada seguidamente del plato principal que era ternera y cordero
junto a néctar, una bebida dulce hecha con miel fermentada.
Al acabar, todos se sintieron bastante llenos y tras un rato de conversación junto
con algunas copas de vino, cuando ya estaban animados, los novios abrieron el
baile armonizado por unas liras que sonaban como los ángeles.
Una vez hubo acabado el baile nupcial, todos se pusieron en pie y continuaron con
la fiesta. Bailaron como si no hubiera un mañana, Atenea estaba en su salsa, todos
los hombres allí presentes deseaban estar un rato a solas con ella bailando,para ver
si la convencían de tener algo con ellos, pero ella era un alma libre y no le hacía
falta a nadie para divertirse y pasar un buen rato. De repente, se notó un aire frío
que puso la piel de gallina a todos los allí presentes. Era Eris, la diosa de la
discordia que traía un regalo el cual era una manzana con un recado: “Para la más
bella”. Se sentía rechazada y repudiada por todos y quería vengarse por dejarla
3. fuera de la boda y no había nada mejor que estropear la boda de una forma
indirecta.
Atenea, se sintió aludida al escuchar el mensaje que traía la manzana y fue a por
ella sin pensarlo un momento, ella se sentía la más bella del lugar ese día y para
ella era justo que fuera para ella.
Luego, fue Hera a recoger la manzana, pensaba que al ser la mujer de Zeus, dios
del Olimpo, le correspondía recoger esa manzana.
Y por último pero no menos importante, estaba Afrodita, que al ser considerada la
diosa de la belleza, suponía que aquel regalo iba dirigido a ella.
Pero una vez llegaron las tres al lugar en el cual se encontraba la manzana de oro,
se miraron con unas miradas, que si estas matasen ninguna habría podido obtener
la manzana. Al ver esto, a Zeus le vino una visión y vaticinó que las tres diosas
ocasionarían una gran disputa y eso conllevaría estropear la boda y también que
una elección érronea podría desencadenar en una guerra.
Por lo que Zeus, se llevó a las tres diosas y pensó en Paris para hacer de mediador.
Este al principio se negó, ya que sería ponerse en contra a dos grandes diosas, que
en un momento dado podrían perjudicarle en algún momento de su vida. Pero Zeus
le aseguró que si le ayudaba, este haría jurar a las diosas que no fueran elegidas
que no tomarían represalias en contra de Paris.
Al Paris aceptar, cada diosa le tenía que dar algo como presente para que el
pudiera elegir.
La primera fue Hera, la cual le ofreció a Paris todo el poder que él quisiera, ya que al
ser la mujer del dios del Olimpo, no habría inconveniente. Lo que ella no sabía es
que esta ofrenda a Paris, molestaría tanto a Zeus que sentenciaría el juicio.
Seguidamente la siguiente en ofrecer alguna ofrenda a Paris fue Afrodita, la cual le
ofreció a la mujer más bella de la tierra. De momento, esta era la ofrenda que más
había entusiasmado a Paris y la que tenía todas para ganar.
Y por último, estaba Atenea, ella era una diosa que no era nada materialista, y no
pensaba darle nada a Paris que no estuviera en su mano, como habían hecho las
demás, ya que Hera dependía de Zeus para darle el poder, y Afrodita dependía de
la situación civil y social en la que se encontraría la mujer más hermosa de todas.
Por eso le ofreció la sabiduría, algo que ella sí le podía conceder.
Paris, habló con Zeus y le dijo que pensaba elegir a Afrodita porque era la que más
le aportaba con su ofrenda, a él le daba igual la sabiduría y el poder, este lo único
4. que quería era a una mujer hermosa con la cual compartir buenos momentos y
pasar el resto de sus días con ella. Zeus pretendió hacerle cambiar de opinión para
que eligiera a Atenea, haciéndole ver que a través de la sabiduría podría enamorar
a la mujer más bella sin necesidad de hacer uso de ninguna fechoría, pero Paris era
un muchacho impaciente y aquello que deseaba lo quería en el momento.
Cuando Paris fue a entregar la manzana a Afrodita, Zeus se metió en la cabeza de
Paris, y este inconscientemente le dió la manzana a Atenea.
Zeus tenía predisposición con su hija Atenea, y de esta manera ayudaba a Atenea a
conseguir la manzana y a su vez perjudicaba a Hera, por ofrecerle algo que no
dependía de ella sino de él y a Afrodita por no querer casarse con un hombre que
Zeus había buscado para ella.
Después del juicio, Paris se sintió despojado porque ya se había hecho ilusiones por
conocer a la mujer más bella y que esta fuera suya para siempre. Por otro lado,
Afrodita y Hera odiaron a Atenea eternamente por ser la hija predilecta de Zeus y
que hubiera permitido amañar el juicio y a Zeus por utilizar su poder para interceder
por Atenea, cuando se suponía que se había elegido a Paris para que fuera
objetivo.
Al ganar Atenea, no hubo Guerra en Troya, como vaticinó Zeus. La vida transcurrió
con normalidad, aunque Zeus y Atenea se ganaron unos cuantos enemigos.