Este poema de Pedro Calderón de la Barca explora cómo todos sueñan sobre su situación en la vida, ya sea ricos, pobres, aquellos que aspiran o ofenden, aunque nadie entiende realmente su propia existencia. El poema concluye que la vida es como un frenesí y una ilusión, y que incluso los mayores logros son pequeños, porque toda la vida es como un sueño.