La actividad del carboneo en el bosque andino alrededor de La Cocha está dañando el ecosistema y reduciendo el caudal de la laguna. Se talan especies nativas como el mate, el tancho y el encino para producir carbón, pero estas especies tardan mucho en regenerarse, afectando el bosque y la laguna a largo plazo. Aunque se han propuesto proyectos alternativos, la gente sigue dependiendo de la extracción de carbón para subsistir. Se necesitan mayores esfuerzos para concientizar a las comunidades sobre
1. IEM Ciudadela de Pasto
Filosofía de la naturaleza-Impacto Ambiental
El carboneo, la problemática ambiental que está atacando La Cocha
Miércoles, 8 Agosto, 2018
Por: Ingrid García
Por impacto ambiental se entiende el efecto que produce una determinada acción humana sobre el
medio ambiente en sus distintos aspectos. Esta alteración puede ser originada por una actividad
económica, un proyecto de ingeniería, un programa, un plan, una ley o una disposición administrativa
con implicancias ambientales. En este sentido lo que hay que tener en claro es que el término impacto
no significa en absoluto negatividad, ya que las respuestas del ecosistema pueden ser tanto positivas
como negativas. Por tanto, el impacto ambiental es el efecto que las acciones del hombre o de la
naturaleza causan en el ambiente natural y social. Pueden ser positivas y negativas. El petróleo es la
sangre de la madre tierra.
El carbón se extrae de especies maderables que se encuentran en áreas protegidas, como el bosque
andino, que a su vez es el principal regenerador del caudal de La Cocha, es una de las problemáticas más
actuales en esta zona de Nariño. Cabe resaltar que La Cocha está catalogada como humedal Ramsar, una
convención utilizada a nivel mundial, para denominar fuentes hídricas que requieren conservación y uso
racional. La actividad del carboneo, según lo explica, Germán Bastidas, profesional especializado de la
Subdirección de Conocimiento y Evaluación Ambiental de Corponariño, consiste básicamente en la tala
de especies nativas del bosque andino, las cuales son apiladas en fosas y cubiertas con ramas, que
posteriormente son quemadas por periodos de tiempo de 8 a 15 horas, hasta que la madera queda
resumida en carbón para comercializar. “Recordemos que la actividad del carboneo es catalogada como
un delito ambiental, porque atenta contra especies nativas de áreas protegidas”, puntualiza.
El ingeniero señala que las especies afectadas son el mate, el tancho, el encino y el amarillo, árboles
nativos de la región que además son de lento crecimiento, lo que significa que el bosque no se regenera
a corto plazo, causando afectaciones al ecosistema, y a largo plazo a la laguna, la cual se ve reducida en
su caudal. “Se han hecho ingentes esfuerzos, pero hace falta mayor articulación entre las entidades para
generar un proyecto que termine con esta actividad, o se generen otras fuentes de ingresos para estas
personas. Casi todos los días en operativos con la Policía se está decomisando carbón, mensualmente se
recogen entre 150 a 300 bultos”. Asegura Bastidas.
“La gente ve al bosque como una alcancía, y quieren aprovecharse de él”, agrega el funcionario de
Corponariño. En el corregimiento de El Encano confluyen comunidades campesinas e indígenas, estas
últimas, pertenecientes al pueblo Quillasinga. “La actividad del carboneo lastimosamente es practicada
por ambas poblaciones. Ha habido propuestas para cambiar la actividad económica, pero falta más
seguimiento a los procesos. Consideramos que la situación ya no se resuelve con proyectos productivos,
o estufas ecológicas, pues los carboneros están exigiendo otras alternativas”, comenta Camilo Rodríguez,
gobernador indígena. Las alternativas propuestas por los carboneros, según lo manifestó el
representante de la comunidad indígena, consisten en la adecuación de las viviendas para el
aprovechamiento turístico y el apoyo a la conservación. Sobre esta misma premisa coincide Concepción
Matabanchoy, líder ambiental del corregimiento de El Encano, quien llama la atención de sus vecinos
campesinos, para que entiendan que la actividad del carboneo afecta directamente su vida y la herencia
que van a dejar a las generaciones venideras. “Ha sido difícil hacerle entender a la población que, si
acabamos con la naturaleza, acabamos con nuestra propia vida. Ha habido muchos proyectos, pero la
gente se ha vuelto dependiente de ellos, y cuando el proyecto se acaba, vuelven a la labor de extracción
2. del carbón”, sostiene. Para Concepción, ‘la protectora de la Laguna de la Cocha’, como la conocen en el
país por su asiduo trabajo en este territorio, que la llevó a ser Mujer Cafam en el año 2005, es importante
que los jóvenes sean formados como guías ambientales, para venderle al turista la riqueza que tiene el
corregimiento. “Soy madre de un docente que trabaja en la vereda Santa Isabel, y él les enseña a los
niños el amor por la naturaleza y el trabajo con artesanías, para que ellos puedan tener ingresos y
visualicen que hay otras alternativas en La Cocha, que no sea la depredación del bosque”.
‘La Cocha’ significa ‘laguna’ en quechua.Para el ingeniero de Corponariño, Germán Bastidas, otra de las
soluciones tiene ver con la concientización de las comunidades que habitan las ciudades y áreas
urbanas, pues si se genera el carboneo es porque existe la demanda del producto. “En Pasto todavía hay
muchos restaurantes que utilizan el carbón. Hemos hecho el llamado a muchas personas, para que
empiecen a hacer el cambio al combustible”, afirma.
Pero como si esto fuera poco, a la problemática del carboneo se suman otras actividades que generan
afectación al bosque y al humedal. “Tenemos el cultivo de trucha a gran escala, la ampliación de la
frontera agrícola con los cultivos de papa y cebolla que están invadiendo el Bosque, la cría de ganado y
las aguas residuales”, expone Camilo Rodríguez, gobernador indígena del corregimiento de El Encano.
Ante este panorama, entidades como Corponariño y la misma Alcaldía de Pasto, encaminaron proyectos
para generar alternativas productivas a las familias que se dedican a la actividad del carboneo. Sin
embargo, estas medidas no han sido suficientes, pues aunque esta problemática se presenta en menor
medida, aún persiste en la región.
El ciclo esencial: el agua proviene de las cuencas hidrográficas. Una cuenca hidrográfica es una unidad
en el territorio en la que el agua que cae por precipitación se reúne y escurre a un punto común que
fluye a un río, lago o mar. Algunas de las más importantes en el país son la del río Patía, en el Pacífico; la
del Atrato, en el Caribe, y la del río Arauca, en el Orinoco. Muchas de estas cuencas se encuentran
dentro de las áreas protegidas del país, donde están los recursos naturales que son la base para el
desarrollo económico, social y cultural de las comunidades, como es el caso de los ecosistemas de
páramo.
Pequeñas acciones producen grandes cambios: si cada uno de los integrantes de una familia se
comprometiera con una labor específica que garantice el uso responsable del agua, podríamos notar
cambios en unos cuantos años. Aquí les dejamos algunas recomendaciones muy sencillas con las que se
puede contribuir.
• Utilizar dispositivos ahorradores en todas las llaves de agua.
• No echar desechos de comida en los desagües. Por ejemplo, el aceite de cocina que queda después de
freír debe pasarse a una bolsa plástica y dejarlo con la basura orgánica.
• Si es posible, recoger agua lluvia que pueda usarse para actividades en casa como lavar el trapero, regar
las matas o lavar el carro.
• Cerrar las llaves de agua durante las actividades de higiene personal. No exceder el tiempo bajo la
ducha.
Actividad
1. ¿Qué entendemos por filosofía de la naturaleza?, escribe tu opinión.
2. ¿Podríamos realizar una filosofía desde el cuidado ambiental? justifica tu respuesta.
3. Escribe una alegoría (poema de exaltación) para los elementos naturales que se dan en la guía
4. Determina el vocabulario desconocido, dale un significado que sea trascendental.
5. El agua qué símbolo es, qué otros símbolos debemos reconocer?, escribe algunos y da su
descripción.