1. MONÓLOGO
Me presento, mi nombre es José Maximiliano Revueltas Sánchez, generalmente me conocen
como José Revueltas, nací el 20 de Noviembre de 1914 en Durango, soy hijo de Gregorio
Revueltas Gutiérrez y de Romana Sánchez Arias, muchos dicen que provengo de una familia
de artistas por mis hermanos, Silvestre como músico y Rosaura como actriz y Fermín como
pintor, sin embargo, eso no evitó que tuviéramos problemas económicos con el fallecimiento
de mi padre, a su vez este suceso también provocó que dejara mis estudios inconclusos al
mudarnos a la Ciudad de México.
Con el paso del tiempo comencé a tener un interés por la política que logró involucrarme en
el “Partido Comunista” desde los 16 años, durante mi estancia en el partido, cumplí los roles
de ensayista y crítico político , realicé un viaje a Moscú como delegado del partido y fui profesor
de Derecho en la escuela nocturna para obreros pero a pesar de ello, fui expulsado en dos
ocasiones a causa de mis críticas a las prácticas burócratas y el análisis “El ensayo de un
proletariado sin cabeza” esto no me detuvo para fundar la “Liga Leninista Espartaco” y el
“Partido Popular”, esto tampoco los detuvo para expulsarme de ambos por mis críticas a los
errores de “la izquierda”, con toda esta experiencia política , en su mayoría se refieren a mi
como un militante comunista y solo puedo decir que me generé una idea de que el marxismo
era una liberación social. En medio de todo este ajetreo me casé dos veces, mi primer
matrimonio fue con Olivia Peralta con quien tuve a Andrea, Olivia y Román Revueltas, mi
segundo matrimonio fue con María Teresa Reyes, con ella no tuve hijos.
Al ser tachado como un rebelde desde mi juventud, algunos me reconocen por participar en el
movimiento estudiantil y en el movimiento ferrocarrilero lo que me daría una entrada directa a
la correccional de Lecumberri aunque no fue nuevo considerando que anteriormente me
apresaron dos ocasiones en las Islas Marías, una historia que relato en “Los Muros de Agua”
publicado en 1941; dato mi estancia en el Palacio Negro en 1967 y el premio Nacional de
Literatura que entregaron en 1945, fui ante los ojos de Octavio Paz uno de los mejores
escritores de su generación y uno de los hombres más puros de México, mi deceso se da el
14 de Abril de 1967 en la Ciudad de México.
2. SOBRE MUROS DE AGUA…
En este libro se puede apreciar el horror en toda la extensión de la palabra, tener la idea de
compartir esto con el mundo surge al tomar em cuenta una frase de Tolsoi ya que según
Revueltas, es toda una lección “no negarse jamás a ver, no cerrar los ojos ante el horror ni
volverse de espaldas por más pavoroso que nos parezca” con la introducción de porqué el
horror es necesario para todas las realidades de un buen escritor y cómo su calidad se mide
por ésta da inicio a “Los muros de agua”; en la obra se data la historia de Ernesto, Marco,
Santos ,Prudencio y Rosario quienes pierden la esperanza al suscitar más de una desdicha
dentro de la correccional de Las Islas Marías, cosas tan simples como “la ley fuga” en el que,
el convicto Gallegos perdió la vida, las burlas de los oficiales cada que vendían la credibilidad
por algunos cigarrillos y obligarlos a trabajos forzados de las islas.
Claramente son encarcelados por sus ideales y activismo político por lo que los denominan
“los comunistas”, algunos pensarían que sus experiencias fueron igual que otros residentes de
esta correccional, pero en mi opinión fue aún más desdichada considerando que la historia se
desarrolla en la primera mitad del siglo XX, donde toda la ideología fuera de los planes
gubernamentales era resultado de ser un rebelde.
Llegar a relacionar esta historia con el horror a tal grado de contener una introducción de una
visita a un reclusorio, el cómo buscaba el horror en los pacientes, me es necesario poner este
aspecto ya que para mi este escritor es algo inusual con las ocurrencias que llega a tener: una
mente abierta ante toda la situación siempre conlleva consecuencias que no siempre serán
satisfactorias, pero serán igual o más útiles para generar un criterio el cual esté dispuesta a
defender.
Este es un libro que recomiendo por dará conocer una perspectiva de realismo frío, pero sin
dramatizar por las tragedias para comprender lo que realmente estamos pasando, ya que no
solo en el siglo XX ha habido censura en la política, el horror sigue presente y posiblemente
con mayor intensidad sin embargo es más horroroso el no detenernos a mirar esa realidad que
nos rodea.