El documento describe los sistemas antiguos de clasificación de instrumentos musicales. El más antiguo es chino y data del siglo IV a.C., agrupando instrumentos según su material. Otras clasificaciones chinas posteriores ordenaron los instrumentos de forma diferente. Más tarde, en la dinastía Ming se reconocieron tres grupos basados en cómo se usan los instrumentos musicales.
1. Sistemas antiguos de clasificación
El más antiguo esquema de clasificación de instrumentos musicales es chino y data
del siglo cuarto antes de Cristo. Agrupa a los instrumentos de acuerdo a como están
constituidos. Están, en un grupo, todos los instrumentos hechos de piedra, todos los
hechos de madera .Sistema de 8-pliegues de pa yin ("8 sonidos"), de la misma fuente, se
produjo poco a poco y con el tiempo el legendario Emperador Shun (3 º milenio aC) se
cree que se han presentado en el siguiente orden: metal (mentón), piedra (shih), seda (ssu),
bambú (chu), calabaza (p'ao), arcilla (t'u), cuero (ko) y madera (mu) clases, y en
correspondencia con las 8 temporadas 8 y los vientos de la cultura china, el otoño y el
oeste, otoño-invierno y NW, verano y al sur, la primavera y el este, invierno-primavera y
NE, verano otoño-y SW, invierno y al norte, y primavera-verano y SE, respectivamente
(Kartomi, 1990).
Sin embargo, el Chou-Li (Programas de Chou), un tratado anónimo compilado de fuentes
anteriores en aproximadamente el siglo II a.C, tenía el siguiente orden: metal, piedra, arcilla,
cuero, seda, madera, calabaza, y el bambú. El mismo orden se presentó en el Tso Chuan
(Comentario de Tso), atribuido a Tso Chiu-Ming, probablemente compilada en el siglo
cuarto antes de Cristo (Kartomi, 1990).
Mucho más tarde, de la dinastía Ming (1300-1600) el erudito Chu Tsai Yu reconoció tres
grupos: los instrumentos que utilizan la fuerza muscular o la utilizan para el
acompañamiento musical, los que se soplan, y los que son rítmicos, un esquema que fue
probablemente el primero de tipo académico, las otras son taxonomías tradicionales
anteriores, folclóricas. (Margaret Kartomi de 2011, Upward and Downward Classifications of
Musical Instruments-musicology.ff,cuni.cz)
Más usualmente, los instrumentos se clasifican de acuerdo a cómo se produce inicialmente
el sonido (independientemente del post-procesamiento, es decir, una guitarra eléctrica
sigue siendo una instrumento de cuerda con independencia de los efectos de pedales
computacionales analógicos o digitales que se le agreguen cuando el aparato procesador
de señal recibe dicha señal acústica).
Sensores[editar]
Un elemento imprescindible para la toma de medidas es el sensor que se encarga de
transformar la variación de la magnitud a medir en una señal eléctrica. Los sensores se
pueden dividir en:
2. Pasivos: los que necesitan un aporte de energía externa.
Resistivos: son los que transforman la variación de la magnitud a medir en una
variación de su resistencia eléctrica. Un ejemplo puede ser un termistor, que sirve
para medir temperaturas.
Capacitivos: son los que transforman la variación de la magnitud a medir en una
variación de la capacidad de un condensador. Un ejemplo es un condensador con un
material en el dieléctrico que cambie su conductividad ante la presencia de ciertas
sustancias.
Inductivos: son los que transforman la variación de la magnitud a medir en una
variación de la inductancia de una bobina. Un ejemplo puede ser una bobina con el
núcleo móvil, que puede servir para medir desplazamientos.
Activos: los que son capaces de generar su propia energía. A veces también se les
llama sensores generadores. Un ejemplo puede ser un transistor en el que la puerta se
sustituye por una membrana permeable sólo a algunas sustancias (IsFET), que puede
servir para medir concentraciones.
Nota: Walt Kester de Analog Devices da una clasificación opuesta a la mencionada
anteriormente, como ejemplo un termistor seria un sensor pasivo (necesita de un aporte de
energía) y un termopar seria activo (no necesita aporte de energía externa).
Otros ejemplos son: termopar, fotorresistencia, fotodiodo, fototransistor, condensador de
placas móviles, sensor de efecto Hall, etc.
A veces también se puede aprovechar una característica no deseada de un elemento, como la
dependencia de la temperatura en los semiconductores, para usar estos elementos como
sensores.
Acondicionadores[editar]
La señal de salida de un sensor no suele ser válida para su procesado. Por lo general requiere
de una amplificación para adaptar sus niveles a los del resto de la circuitería. Un ejemplo de
amplificador es el amplificador de instrumentación, que es muy inmune a cierto tipo de ruido.
No sólo hay que adaptar niveles, también puede que la salida del sensor no sea lineal o
incluso que ésta dependa de las condiciones de funcionamiento (como la temperatura
ambiente o la tensión de alimentación) por lo que hay que linealizar el sensor y compensar sus
variaciones. La compensación puede ser hardware o software, en este último caso ya no es
parte del acondicionador.
3. Otras veces la información de la señal no está en su nivel de tensión, puede que esté en su
frecuencia, su corriente o en algún otro parámetro, por lo que también se pueden
necesitar demoduladores, filtros o convertidores corriente-tensión.
Conclusión
no siempre mantiene esa división (aunque los instrumentos de cuerdas pulsadas se
distingan de los de cuerda frotada en las partituras), pero hay una distinción entre los
instrumentos de viento con una caña (instrumentos de viento-madera) y los instrumentos
de viento en general, donde el aire se pone en movimiento directamente sobre los labios
(Instrumento de viento-metal).
Esta clasificación clásica se aplica en el contexto de la orquesta sinfónica, tanto en lo que
se refiere a la orquestación y el análisis musical como a la dirección. La asignación mutua
entre ambas clasificaciones es la siguiente:
Los instrumentos de cuerda de la orquesta sinfónica son todos cordófonos
Los instrumentos de viento son todos aerófonos
Los instrumentos de percusión se reparten entre los grupos membranófonos e
idiófonos
Los instrumentos de teclado pueden ser cordófonos, aerófonos, idiófonos o
electrófonos
El único electrófono admitido como parte de la orquesta sinfónica son las Ondas
Martenot
4. En el mismo contexto, la subdivisión usual de los instrumentos de viento se establece entre
los siguientes grupos: el de los Instrumentos de madera, que independientemente del
material de que están construidos incluye a los aerófonos de bisel (flautas), de lengüeta
simple (clarinetes), de lengüeta doble (oboes) y de lengüeta libre (acordeón), y el de
losInstrumentos de metal, que comprende a los aerófonos de embocadura.
Fuera del contexto de la orquesta sinfónica podemos observar que los estudios formales
de música (p.ej. en los conservatorios) comprenden instrumentos fuera de la orquesta
como la guitarra (un cordófono) o el saxofón (un aerófono de lengüeta simple).
Hay, sin embargo, problemas con este sistema. Se ha visto que algunas pocas veces los
instrumentos no occidentales no se ajustan muy cuidadosamente a la última clasificación
Los instrumentos de viento son aquellos que contienen un volumen gaseoso capaz de
producir sonido al ser convenientemente excitado. El cuerpo sonoro es el volumen gaseoso y
no el recipiente que lo contiene; el recipiente tiene la importancia de definir la forma del
volumen gaseoso por lo que el sonido que emita tendrá distintas características auditivas.
Clasificación[editar]
Los instrumentos de viento se pueden clasificar en 2 categorías. Estas categorías se dividen
atendiendo a cómo se produce el timbre:
1. Instrumentos de metal o metales. El timbre suele ser fuerte, brillante y con sonido
metálico. El sonido en estos instrumentos se produce por la vibración de los labios en
una boquilla metálica en forma de copa, que produce la frecuencia acústica.
2. Instrumentos de madera o maderas. El timbre de estos instrumentos es más suave y
melodioso que el de los metales. El sonido se produce soplando sobre un agujero
(embocadura de bisel) o haciendo vibrar una caña de lengüeta doble o simple. El
instrumento es el que contiene el elemento que oscila. En el caso de las flautas no
tienen una caña diferenciada, pero aun así tienen un borde o cámara en donde el aire
se sopla para producir las oscilaciones, que desde un punto de vista acústico es algo
equivalente a una caña.
Clasificación formal de los instrumentos de viento[editar]
Los instrumentos de viento o tubos sonoros pueden clasificarse en función de cuatro criterios
distintos:
5. Según su forma[editar]
Los tubos pueden ser cónicos, cilíndricos o prismáticos:
Cónicos: saxofón, fagot, fliscorno, tuba...
Cilíndricos: flauta travesera, clarinete, oboe...
Prismáticos: instrumentos primitivos y algunos tubos de órgano.
Según el modo de excitación de la columna del aire[editar]
Los tubos se clasifican en tubos de embocadura, de lengüeta (simple o doble) y de boquilla:
Embocadura
Directa: Flauta travesera.
Indirecta: Flauta de pico y tubos de órgano
Lengüeta
Libre: Acordeón, armónica.
Batiente:
Simple: clarinete, saxofón, tubos del órgano.
Doble: oboe, fagot.
Boquilla: trompeta, trompa, trombón, tuba...
Según la obtención de la escala[editar]
Tubos con orificios: los instrumentos de viento madera.
Tubos de longitud variable:
Vara: trombón.
Pistones: trompeta.
Válvulas: trompa, tuba.
6. Instrumentos de cuerda Los instrumentos de cuerda o cordófonos son instrumentos
musicales que producen sonidos por medio de las vibraciones de una o más cuerdas,
7. usualmente amplificadas por medio de una caja de resonancia. Estas cuerdas están tensadas
entre dos puntos del instrumento y se hacen sonar pulsando, frotando o percutiendo la cuerda.
Instrumentos musicales de cuerda en el Museo de Arte Popular de la Ciudad de México.
En la orquesta clásica, se llama «cuerdas» al conjunto de instrumentos de cuerda frotada
formado por los grupos de violines (normalmente divididos en violines primeros y segundos),
violas, violonchelos y contrabajos. Lo mismo sucede con la orquesta de cuerdas, que está
conformada por los mismos instrumentos. De forma similar se habla de un trío, cuarteto o
quinteto de cuerdas, cuando se trata de agrupaciones de violín, viola y violonchelo; 2 violines,
viola y violonchelo; o 2 violines, viola, violonchelo y contrabajo respectivamente.
Al grupo de instrumentos de cuerda pulsada pertenecen los instrumentos en que las cuerdas
se pulsan con los dedos, con las uñas o con un plectro o puntilla sujetado entre los dedos, que
suele ser de plástico (aunque también existen ejemplares de madera).
Es importante resaltar aquí el particular caso del contrabajo, que es un instrumento que
participa tanto de la condición de instrumento de cuerda frotada como de la de un instrumento
de cuerda pulsada, pues en el rockabilly y en el jazz suele utilizarse por lo general de esta
última forma. Su sonido se produce por la vibración de las cuerdas al ser frotadas con un arco,
aunque puede también producirse pulsándolas con las yemas de los dedos, al modo del bajo
eléctrico o el tololoche, técnica que recibe el nombre de pizzicato o pellizco. Un buen ejemplo
claro de la interpretación simultánea de este instrumento pulsando y frotando sus cuerdas es
la ejecución que de él hace el cubano Israel López "Cachao" en su interpretación a dúo con
Bebo Valdés de la tonada "La Comparsa", en la cinta "Calle cincuenta y cuatro", del español
Fernando Trueba. Un gran contrabajista en la actualidad es Charlie Haden y antes lo
fue Charles Mingus
8. Instrumentos de percusiónUn instrumento de percusión es un tipo de instrumento
musical cuyo sonido se origina al ser golpeado o agitado. Es, quizá, la forma más antigua de
instrumento musical.
La percusión se distingue por la variedad de timbres que es capaz de producir y por su
facilidad de adaptación con otros instrumentos musicales. Cabe destacar que puede
obtenerse una gran variedad de sonidos según las baquetas o mazos que se usan para
golpear algunos de los instrumentos de percusión.
Un instrumento de percusión puede ser usado para crear patrones de ritmos (batería, tam-
tam entre otros) o bien para emitir notas musicales (xilófono). Suele acompañar a otros con el
fin de crear y mantener el ritmo.
Clasificación[editar]
Atabaque.
Timbales.
Los instrumentos de percusión pueden clasificarse en dos categorías según la afinación:
De altura definida (afinados): Los que producen notas identificables. Es decir, aquellos
cuya altura de sonido está determinada.
Algunos son: el timbal, el xilófono, el vibráfono, la campana, la campana tubular,
9. los tambores metálicos de Trinidad o la Lira, que es como un xilófono pero con láminas de
metal.
De altura indefinida (no afinados): Los que producen notas no son identificables, es decir
,producen notas de una alturaindeterminada.
Entre ellos están: el bombo, la caja, el cajón, el afuche, las castañuelas, las claves,
el cencerro, el címbalo, el güiro, la matraca, lazambomba, el vibraslap, la quijada, la batería,
la tuntaina o las maracas.
En las orquestas se suele diferenciar entre:
Percusión de parche
Percusión de láminas
Pequeña percusión
Según otro criterio, se pueden clasificar en cuatro categorías que son:
Membranófonos , que utilizan una membrana tensada o un poco suelta.
Micrófonos, que añaden timbre al sonido del golpe.
Idiófonos, que suenan por sí mismos, como el triángulo.
Placófono, placas metálicas que entrechocan.
Esta clasificación tampoco es estricta, por ejemplo, la pandereta es un membranófono y un
idiófono porque tiene ambos, en la piel y en los cascabeles.
10. Instrumentos electrófonos
Un instrumento electrónico es un dispositivo formado por una combinación de
elementos electrónicos, tales como válvulas termoiónicas, transistores o circuitos
integrados, entre otros muchos, y que, combinados adecuadamente,permiten la
realización de funciones diversas, como la medición de parámetros físicos, generación
de señales de distintas frecuencias, detección de estas mismas señales y, en fin, todas
aquellas funciones susceptibles de ser procesadas mediante señales eléctricas.
Sensores[editar]
Un elemento imprescindible para la toma de medidas es el sensor que se encarga de
transformar la variación de la magnitud a medir en una señal eléctrica. Los sensores se
pueden dividir en:
Pasivos: los que necesitan un aporte de energía externa.
Resistivos: son los que transforman la variación de la magnitud a medir en una
variación de su resistencia eléctrica. Un ejemplo puede ser un termistor, que sirve
para medir temperaturas.
Capacitivos: son los que transforman la variación de la magnitud a medir en una
variación de la capacidad de un condensador. Un ejemplo es un condensador con un
material en el dieléctrico que cambie su conductividad ante la presencia de ciertas
sustancias.
Inductivos: son los que transforman la variación de la magnitud a medir en una
variación de la inductancia de una bobina. Un ejemplo puede ser una bobina con el
núcleo móvil, que puede servir para medir desplazamientos.
Activos: los que son capaces de generar su propia energía. A veces también se les
llama sensores generadores. Un ejemplo puede ser un transistor en el que la puerta se
sustituye por una membrana permeable sólo a algunas sustancias (IsFET), que puede
servir para medir concentraciones.
11. Nota: Walt Kester de Analog Devices da una clasificación opuesta a la mencionada
anteriormente, como ejemplo un termistor seria un sensor pasivo (necesita de un aporte de
energía) y un termopar seria activo (no necesita aporte de energía externa).
Otros ejemplos son: termopar, fotorresistencia, fotodiodo, fototransistor, condensador de
placas móviles, sensor de efecto Hall, etc.
A veces también se puede aprovechar una característica no deseada de un elemento, como la
dependencia de la temperatura en los semiconductores, para usar estos elementos como
sensores.
Acondicionadores[editar]
La señal de salida de un sensor no suele ser válida para su procesado. Por lo general requiere
de una amplificación para adaptar sus niveles a los del resto de la circuitería. Un ejemplo de
amplificador es el amplificador de instrumentación, que es muy inmune a cierto tipo de ruido.
No sólo hay que adaptar niveles, también puede que la salida del sensor no sea lineal o
incluso que ésta dependa de las condiciones de funcionamiento (como la temperatura
ambiente o la tensión de alimentación) por lo que hay que linealizar el sensor y compensar sus
variaciones. La compensación puede ser hardware o software, en este último caso ya no es
parte del acondicionador.
Otras veces la información de la señal no está en su nivel de tensión, puede que esté en su
frecuencia, su corriente o en algún otro parámetro, por lo que también se pueden
necesitar demoduladores, filtros o convertidores corriente-tensión. Un ejemplo de cuando la
información no está en el nivel de tensión puede ser un sensor capacitivo, en el que se
necesita que tenga una señal variable en el tiempo (preferentemente sinusoidal).
Un ejemplo clásico de acondicionador es el puente de Wheatstone, en el que se sustituyen
una o varias impedancias del puente por sensores. A continuación típicamente se coloca un
amplificador.
Por último, entre el acondicionador y el siguiente paso en el proceso de la señal puede haber
una cierta distancia o un alto nivel de ruido, por lo que una señal de tensión no es adecuada al
verse muy afectada por estos dos factores. En este caso se debe adecuar la señal para su
transporte, por ejemplo transmitiendo la información en la frecuencia o en la corriente (por
ejemplo el bucle de 4-20mA).