La tecnología estudia las relaciones entre el ser humano, el mundo natural y el mundo artificial. Nos ayuda a adaptar nuestro entorno de manera más fácil, cómoda, rápida y precisa, a menudo haciendo cosas que antes no podíamos hacer. Algunos productos tecnológicos siguen la secuencia tradicional de demanda, producto y proceso, mientras que otros revierten este orden con el fin de mejorar la calidad de vida humana.